La canción de luto por la muerte de Pablo Milanés

El artista falleció el martes, en Madrid, a los 79 años.

El martes de madrugada, en Madrid, España, falleció a los 79 años el cantante y compositor cubano Pablo Milanés, una de las voces más reconocidas de la música de su país. Se encontraba hospitalizado desde el 13 de noviembre a causa de una inflamación en la vesícula biliar y una infección en el riñón, por lo que debió cancelar varios conciertos de la “Días de luz”, que venía llevando adelante. Desde hace tiempo, su estado de salud era frágil. Radicado desde hacía varios años en España, en junio pasado se había presentado por última vez en su país, en el Coliseo de la Ciudad Deportiva de La Habana, ante miles de espectadores.
Milanés fue un artista reconocido y admirado a nivel mundial. Durante décadas recorrió escenarios de todo el mundo, incluyendo los de Uruguay, donde su música comenzó a difundirse a principios de los ‘80, en principio a través de casetes que se regrababan y pasaban de mano en mano. Nacido en 1943 en la localidad de Bayamo, estudió música en el Conservatorio Municipal de La Habana. En 1965 editó su primer disco, “Mis 22 años”, considerado el eslabón entre el Filin (género musical cubano) y la Nueva Trova, movimiento que fundó en 1967 junto a sus coterráneos Silvio Rodríguez y Noel Nicola. Como parte de ese colectivo, creó canciones como “Yolanda”, “Años”, “Yo pisaré las calles nuevamente” o “El breve espacio en que no estás”, que no solo fueron grandes éxitos internacionales, sino también himnos de toda una generación.
Marcada por su apego al romanticismo, su obra impactó también por su contenido político y de denuncia. Desde los años ‘90 criticó duramente el carácter dogmático de la Revolución cubana, a la que había apoyado en los inicios de su carrera. Su postura crítica, sin embargo, se remontaba a su primera juventud, cuando debió cumplir el servicio militar en un campamento de castigo contra homosexuales, religiosos, excéntricos y todos aquellos que no encajaban en los “parámetros revolucionarios”. Durante mucho tiempo, el artista lamentó que nadie en Cuba se disculpara por esos episodios.
A lo largo de su vida editó más de 50 discos y recibió, entre otros, el Premio Nacional de Música de Cuba y el Grammy Latino a la Excelencia Musical. Admirado y querido por sus colegas, compartió grabaciones, escenarios y amistad con Joan Manuel Serrat, Chico Buarque, Mercedes Sosa, Armando Manzanero, Fito Páez, Joaquín Sabina, Luis Eduardo Aute, Gal Costa, Ana Belén o Víctor Manuel, entre muchos otros.
“Agradecemos profundamente todas las muestras de cariño y apoyo, a toda su familia y amigos, en estos momentos tan difíciles. Que descanse en el amor y en la paz que siempre ha transmitido. Permanecerá eternamente en nuestra memoria”, expresó la Oficina Artística del músico, que parte dejando una huella imborrable en la canción de habla hispana.