Ganadería y Defensa conforman equipo de ayuda a productores agropecuarios

Funcionarios del Ejército Nacional limpiarán tajamares y aguadas con maquinaria del Ministerio de Defensa a fin de realizar perforaciones por el déficit hídrico.
El ministro de Defensa, Javier García, se reunió con su par de Ganadería, Fernando Mattos, quien señaló el objetivo de mantener “las unidades productivas de pie y que ningún productor deba alejarse por falta de ayuda”.
Representantes de los ministerios de Defensa, Ganadería y Ambiente, además del Ejército integran un grupo de trabajo enfocado a las tareas vinculadas a la provisión de agua a los productores que lo soliciten.

El ministro García adelantó que realizarán la limpieza de tajamares y aguadas, así como eventualmente, perforaciones con tecnología a efectos de distribuir y almacenar agua para riego y consumo humano. Comenzarán por predios de Montevideo y Canelones, donde está la mayor parte de la maquinaria y luego se desplazarán al Interior.
Los efectivos se destinarán a la preparación de los materiales, así como el manejo de vehículos y el apoyo logístico. “Creo que va a ser mucha gente”, definió el ministro García.

Quebranto productivo

Mattos describió que en el país “tenemos una crisis climática con una sequía que se viene prolongando con sus efectos durante más de tres años. Hay un quebranto productivo muy grande y eso no es sólo un tema de la agropecuaria nacional sino de la sociedad. Acá tenemos una afectación importante con pérdida de capital de muchos productores”.
El ministro agregó que “en nuestras recorridas por el Interior, donde han participado legisladores del Frente Amplio, hemos dicho que son bienvenidos todos los aportes.

Acá tenemos el desafío de juntar esfuerzos para superar esta circunstancia que golpea fuertemente a la producción nacional y todos sabemos la incidencia que tiene el rubro del agro en la economía del país”.
Reconoció que “costará bastante tiempo resolverlo porque los efectos se van a extender, pero podemos mitigarlos. La consigna del gobierno es que se mantengan la mayor cantidad de unidades productivas y que ningún productor tenga que alejarse por falta de ayudas”.

Medidas del gobierno

Consultado por las medidas del gobierno, Mattos consignó que “son dinámicas. Nosotros tenemos que ver el grado el grado de profundidad que puede tener esta crisis porque la sequía se sabe cuando empieza pero no cuando termina. Esta batería de medidas son más de 20, porque todos los días le vamos sumando alguna. En este caso, el apoyo del Ministerio de Defensa por los medios que dispone Ingenieros”.
Sin embargo, reconoció que “si esto se prolonga en el tiempo, vamos a tomar medidas más drásticas. Pero recordemos que son medidas paliativas, porque también debemos hablar sobre temas estructurales y seguramente nos reuniremos con el presidente para hablar del tema”.

Según Mattos, “el cambio climático impone las condiciones en las cuales se desarrollan las producciones y están cada vez más relacionadas a sistemas muy vulnerables a cielo abierto. Por eso impone condiciones extremas del clima, con problemas de sequía que son cada vez más frecuentes y no hay que dudar que, dentro de unos meses, estemos hablando de inundaciones. Porque los cambios climáticos determinan estos virajes muy violentos que exponen al sistema productivo nacional”.

Pérdidas

El ministro de Ganadería precisó que “las pérdidas son muy difíciles de estimar, si bien estamos trabajando. Pero es generalizado y afecta a todas las producciones. Hay que analizar cadena por cadena. La Oficina de Planificación y Política Agropecuaria (Opypa) del ministerio trabaja en un estimativo, teniendo en cuenta que esto es dinámico y los números que puedan arrojar nunca serán definitivos”.
Mattos ejemplificó que “tenemos los cultivos de verano o la mayor parte de ellos corriendo la carrera y no está todo perdido. Si llueve suficientemente en los próximos días, como está pronosticado, tenemos la chance en algunos cultivos como la soja, que es el principal del país por su extensión, con más de un millón cien mil hectáreas cultivadas en este momento. Es una planta muy aguerrida que está con estrés hídrico, pero no está perdida. Por eso, es difícil anticipar las pérdidas”.

Estrategias

De acuerdo con el ministro, Uruguay tiene una estrategia de cambio climático. “Una de ellas es pensar en las obras estructurales que tenemos que realizar para el almacenamiento de agua. No es que no llueva, sino que llueve pero en forma irregular. Por lo tanto, cuando llueve en exceso, la lluvia se va por los cursos de agua que desembocan en el océano”.

Mattos abogó por “mejores sistemas de almacenamiento para la contención del agua y administrarlo o usarlo en los momentos de escasez. No estamos inventando nada. Esto está bastante estudiado y hay que ejecutarlo, pero se requieren recursos”.
En este punto, el secretario de Estado aclaró que resta definir “si son recursos públicos o privados” pero “es un tema de visión estratégica que Uruguay deberá encarar en forma rápida para estar mejor preparado en la próxima sequía que seguramente vendrá. Pero no se sabe si dentro de veinte años o el año que viene”.

Recordó que en 2022 “tuvimos un escenario parecido. Comenzó a llover el 15 de enero y hubo lluvias semanales. Porque tampoco es positivo que tengamos lluvias torrenciales y en gran volumen en forma concentrada porque la capacidad de absorción del suelo es limitada. Todo lo que no absorbe el suelo, lentamente se escurre y las aguas torrenciales también generan erosión que afecta a los cultivos”.
Mattos concluyó que “para que no dependamos tanto de la naturaleza, las acciones humanas son necesarias con la planificación y una visión de largo plazo”.