“La creación tiene que ver con el descubrimiento que sucede a partir de la experiencia práctica”

En el marco de la 35ª Fiesta de la Prensa que se está viviendo en Paysandú, se están llevando a cabo diversas actividades organizadas por EL TELEGRAFO junto con instituciones y artistas adherentes. Una vez más la literatura tuvo su espacio en esta gran fiesta, instancia en la que el pasado martes desde las 21 en la Sala 1° de Julio de EL TELEGRAFO, unas 20 personas presenciaron el taller literario de escritura creativa “No excluyente”, que presentó el autor sanducero Mario Pons.

Pons dijo que “es una alegría que haya un espacio donde podamos intercambiar, esto es de ida y vuelta. Planteo una especie de método para generar ideas combinando ruidos mentales y desarrollar esos ruidos hasta que tomen forma de historia, pero que tengamos el impulso de escribir combinando elementos para generar una idea, buscar estructuras, para poder escribir en base a ideas que rápidamente no se nos ocurren”.

TEMÁTICA DEL ENCUENTRO; MÉTODOS

“Primero vamos a partir de una tranquilidad, la tranquilidad de que sabemos contar una historia; la forma de contar una historia la tenemos internalizada ya. La estructura de un cuento, me refiero a lo literario, la estructura de un cuento clásico tiene las mismas características de una anécdota, de un chiste, de una mentira. De cualquier forma de contar hay tres etapas, tres grandes bloques: el inicio, el nudo, y el desenlace. No necesitamos tener más base teórica que la que ya tenemos de fábrica, cuando nos comunicamos caemos en esa estructura; el siguiente paso es una idea. Tenemos bastante normalizado el que para escribir una historia necesitamos una idea que nos habilite la escritura de esa historia, pero no tiene por qué ser tan así. Para mí en particular, es una tranquilidad que no sea tan así porque si no sería cargar con un peso muy grande, el estar atento, captar ese chispazo, o estar conectado vaya uno a saber con qué y entender de la inspiración o de esa agilidad mental de captar una idea que nos habilite al texto. No hay que estar pendiente de una idea para poder escribir, se puede escribir a pesar de no estar inspirado”, señaló.

RUIDOS MENTALES

“Como no tenemos idea de donde, ni a raíz de que va a surgir ese chispazo que nos lleve a encontrar la idea, el primer paso de esta especie de método es algo tan simple como anotar los ruidos mentales. Estos son los que van quedando en ese filtro interno donde pasa todo, donde pasa lo que escuchamos, lo que leemos, lo que vimos, lo que nos quedó haciendo ruido. El segundo paso es volver a esas anotaciones sueltas y buscar combinaciones, y a veces con suerte, de esas combinaciones empezamos a detectar algunas cosas que suenan familiares, algo parecido a una melodía, al esbozo de una idea”, expuso.

“Si fijamos la atención en esos ruidos, en esas anotaciones, podemos más tarde o más temprano ir encontrando la forma de una idea, y lo digo así de seguro porque hay una palabra que avala lo que yo estoy diciendo, pareidolia. La pareidolia es la capacidad que tenemos de encontrar formas concretas en patrones vagos. El ejemplo más sencillo es cuando miramos las nubes y encontramos la forma de una tortuga o de un delfín, miramos una mancha en la pared, una mancha de humedad, y vemos el contorno de un rostro. Lo mismo del principio, la tranquilidad de que no hay que hacer ningún esfuerzo para eso porque la mente ya funciona sola, buscando formas donde no hay formas”, destacó.

“En fin, sabemos contar una historia, no tenemos que preocuparnos a la hora de escribir porque se va a estructurar en el borrador, lo que escribamos obviamente que al terminar el borrador va a haber mucho trabajo. Ahí si entramos a ver los engranajes, los ritmos, pero la tranquilidad es que, al ir al papel vamos a saber escribir. ¿Dónde encontrar las ideas? En un principio si no tenemos nada, en las anotaciones que vamos a ir teniendo, en las palabras sueltas en las frases, en las sensaciones que vamos a encontrar, y buscar si ahí aparece el germen de algo. Ya está todo escrito, lo que sea que nosotros vayamos a escribir, alguien ya lo hizo antes y mejor, de todas formas las grandes preguntas de la humanidad o grandes temas, no son tantos. Vamos a escribir más o menos de lo mismo, la hora de escribir, lo que va a diferenciar mi historia de la que ya se escribió antes, es hacer pasar el texto a través de mí o de nosotros, que arrastra al papel lo que es nuestro, lo que nos diferencia, lo que nos hace escribir sobre lo mismo, pero diferente”, abundó Pons sobre la temática.

CONSIGNA PLANTEADA

El autor sanducero planteó a los presentes un ejercicio, de no más de 10 minutos, aplicando lo anteriormente expuesto y explicado por él. Con el diario EL TELEGRAFO del día, les propuso buscar ruidos mentales, 3 ruidos mentales que los allí presentes le mencionaron; un ruido fue un personaje (un niño), el segundo fue un verbo, una acción, (protesta), y el tercero un complemento (río).
Al dejarse llevar por la idea, al escribir algo con esos 3 elementos, surgieron un sinfín de historias, cuentos, poesías, que fueron expuestos, comentados, y analizados entre todos, viendo diferencias entre sí, entre otras cosas, pero sobre todo, contando una historia.