La concejal Darinka Reimundez recorrió La Tentación y Colonia La Paz, entrevistándose con las directoras de las escuelas 50 y 66. Luego se trasladó a las escuelas 45 de San Francisco y 12 en ruta 90.
“Las directoras me atendieron muy amablemente y muy sencillamente. A lo largo de la jurisdicción de nuestro municipio me pude comunicar con la mayoría, aunque en algún caso el contacto fue telefónico”, dijo Reimundez.
Aseguró estar alejada de lo que Ramiro Ayende, alcalde del Municipio de Porvenir, busca concretar. “El alcalde tiene un único tema, que es que se aprueba la compra de su ‘chiche nuevo’, la camioneta combi. Una vez más, sus proyectos –como el año pasado una piscina pública en una plaza– no están ni del lado de la gente ni de mí como concejal. Mi desvelo estos días es la preocupación planteada año tras año por las autoridades escolares y liceales del territorio del municipio, suplicando soluciones que de hecho fueron prometidas pero no las ha cumplido, aun cuando son muy básicas”.
Tras su recorrida por escuelas rurales, Reimundez dijo que “como era de esperar, coincidieron en las carencias y peticiones de cada centro educativo a los que el Municipio corresponde darles una solución directa. También la mayoría me comentó cuál ha sido la respuesta a todas las peticiones, como corte de pasto o retiro de residuos por ejemplo, que me hicieron recordar lo que estoy aburrida de escuchar en las sesiones del Concejo: que no le corresponde o que le quitaron el personal. Pero estas maestras simplemente piden cubrir las necesidades básicas, y merecen eso”. También la concejal por el Frente Amplio destacó otros inconvenientes encontrados. “En La Tentación, entrando por ruta 3, hay tramos de camino destrozados de hasta 50 metros, en todo el ancho del camino y con una profundidad de hasta 20 centímetros. Quienes por allí circulan, se han visto obligados a hacer caminos paralelos por el pasto, para evitar roturas y accidentes”.
Asimismo “quedan caminos hacia algunas escuelas sin asfaltar. Si eso se concretara, se alcanzaría un alivio temporal a tanta polvareda que reciben en el año. En otros casos aunque el servicio de barométrica es esencial, siguen esperando sin tener solución. En algunas escuelas, las auxiliares se llevan los residuos para depositarlos en el primer contenedor que encuentren, generalmente a varios kilómetros”.
Una necesidad que no depende directamente del municipio, pero “que es urgente, es aumentar la presencia policial en las zonas donde se encuentran las escuelas, con alguna recorrida periódica, porque es de público conocimiento que han vandalizado unas cuantas y en reiteradas oportunidades”. Lo mismo ocurre con “una mayor y mejor iluminación pública, para mejorar la seguridad”.
Durante la época de clases, las directoras de escuelas solicitan “una correcta señalización para que los conductores respeten y reduzcan la velocidad al pasar frente a los centros escolares”.
“Luego –dijo Reimundez– en algunas escuelas faltan cosas tan elementales como juegos para disfrute de los recreos. Y no piden nuevos, se conforman con los que se han retirado en Paysandú y se pueden reciclar”. “Por último y muy importante, la limpieza de las propiedades en cuanto se refiere al corte de pasto, poda y retiro de sobrantes. Esto debería estar siendo ejecutado por o con la gestión del alcalde, es el piso de su trabajo, pero en lugar de eso sigue incumpliendo y violando lo que así reza la Ley de Descentralización y Participación Ciudadana, en cuanto a sus deberes”, aseguró.
