Visión crítica sobre cambios en la formación en educación

El Consejero del Orden Docente en el Consejo de Formación en Educación (CFE), Diego Silva, estuvo en el Instituto de Formación Docente (IFD) de Paysandú con el objetivo de intercambiar junto con los equipos docentes, directivos y delegados de la ATD sobre el funcionamiento en un año en el que se presenta un nuevo plan de estudios y ha habido transformaciones.

“Las transformaciones generan distintos niveles de afectación en la organización”, dijo a EL TELEGRAFO Silva, quien destacó que que el año “comenzó bastante bien” debido a que “hay muchos cursos que están funcionando” más allá de que falten algunos docentes. “Hay algunas cuestiones por resolver, como siempre sucede en las instituciones educativas que tienen muchos docentes, muchos estudiantes”. En cuanto a la transformación que se está llevando adelante, Silva indicó que “desde la representación del Orden Docente tenemos una visión bastante crítica sobre la transformación de la Formación en Educación”. “Entendemos que se ha hecho una transformación muy abrupta, con poca participación de los docentes” y con plazos “extremadamente breves”. Hace algunas semanas, desde el CFE se envió al Ministerio de Educación y Cultura una de las primeras documentaciones para el reconocimiento de los títulos. “Nosotros tenemos una visión bastante crítica sobre esto también porque entendemos que tiene que haber una formación de carácter universitario”, señaló el consejero.

“El reconocimiento universitario no puede darse solamente por una prueba que desarrollará el Ineed en el futuro”, por lo que no están de acuerdo en que el “reconocimiento depende de eso”, dado que entienden que se debe construir un proceso. “Nuestro proyecto inicial es el de la Universidad de la Educación, pero en el caso de que no exista esa universidad porque no hay consenso político que permita alcanzar en el corto plazo, creemos que sí hay condiciones para que dentro de esta institución se generen estructuras académicas y formas organizativas que se aproximan a la lógica universitaria”, aseguró Silva. En este sentido, indicó que uno de los componentes esenciales para ello es el desarrollo de la investigación como parte de poner en relación a los estudiantes y a los docentes con los procesos de producción de conocimiento.

INSTITUTO UNIVERSITARIO

Para Silva, no existen en el espectro político las fuerzas adecuadas para una nueva Universidad autónoma cogobernada. “Esto lo estamos viendo con la reorganización de la estructura de gobierno de la UTEC, en donde ha habido bastantes dificultades”, por lo que “me parece que hoy no hay un margen de acuerdo para construir esa estructura”. En este sentido, recordó que en la Ley General de Educación de 2008 “no se planteaba crear una Universidad sino crear un Instituto Universitario”, por lo que “si mañana se nos dijera que existe la Universidad hay ya un proceso de muchos años de adaptación de las estructuras internas que podríamos hacerlo en cualquier momento”. “Una de las fragilidades que tiene la transformación educativa es que el Consejo aprobó en febrero del año pasado y dejó sin efecto las estructuras académicas. Entonces, por ejemplo, toda la elaboración de los planes de estudio nuevo se hace nombrando personas que son o dinamizadores o facilitadores, sin involucrar genuinamente a los docentes efectivos de la institución”.

Silva indicó que todas estas cuestiones provocan que “en el corto o mediano plazo, no hay condiciones para la Universidad, pero sí habría condiciones para construir estructuras organizativas que armen una vida estudiantil con un sesgo universitario”.

Con esto, hace referencia a que el estudiante, además de participar en los espacios de aula en formación, participe en proyectos de investigación, de extensión, que se involucren con la comunidad.