Estudiantes de intercambio disfrutan de Paysandú

Los estudiantes de intercambio provenientes de Europa, junto a los que se van y a voluntarios de AFS en Paysandú.

A poco más de un mes de haber llegado a Paysandú, los estudiantes de intercambio Ginevra (Italia), Erik (Alemania), Guillaume (Bélgica) y Angelo (Italia), disfrutan de los atardeceres de Paysandú y de los mates con sus amigos.

Estos jóvenes estudiantes llegaron a nuestra ciudad gracias al programa de intercambio cultural que ofrece AFS, una oenegé que hace más de 60 años se dedica a posibilitar experiencias educativas internacionales para estudiantes liceales, universitarios, maestros y profesores.

Llegaron sin saber el idioma y ya hablan un español que se les entiende de gran manera. Angelo tiene 17 años, vive en un pueblo de Sicilia de 900 habitantes y es aficionado de la política, del fútbol y de la historia contemporánea. El único conocimiento que tenía de Uruguay era Luis Suárez y eligió nuestro país para ver “cómo se vive, cómo es la gente, me encanta Sudamérica”. En Paysandú concurre al Liceo 1 y estudia en 5° Humanística.

Ginevra, en tanto, tiene 17 años y proviene de La Toscana. Practica vóleibol que la ha llevado a competir a diferentes puntos del país y de Argentina, obteniendo el campeonato en reiteradas ocasiones. También concurre al Liceo 1 y se encuentra en 5° Humanística.

Por su parte, Guillaume tiene 16 años y en su país de origen estudia economía y practica el deporte de la vela. En Paysandú estudia en 4° año del Liceo 7 y ya conocía algo de Sudamérica tras haber visitado Argentina, Chile y Perú antes de la pandemia de la COVID-19.

Erik es de Berlín, tiene 15 años, y le gusta mucho el fútbol más allá de que en Paysandú aún no esté practicándolo. Estudia en el Colegio del Rosario y se encuentra en 4°año.

“EL RESPETO”

“Me gusta porque la gente acá es muy abierta y la familia es muy importante, en Italia no es tan así”, destacó Ginevra sobre nuestro país.
“Acá el respeto es la base de todo, en Italia quizás puede faltar algo de valores”, reflexionó Angelo quien además resaltó que “los uruguayos son muy pegados a su patria”.

Algo que les llamó la atención a los estudiantes es la importancia que se le da a la merienda en nuestro país, en donde es un momento de compartir entre amigos. Los estudiantes toman mate, destacan la carne uruguaya, comen asados y ya probaron los churros.

Pero la principal diferencia es la hora de la cena. “En Italia la comida más importante es la cena, porque es cuando se reúne la familia”, indicaron los estudiantes provenientes de dicho país. Y la hora de la cena es bastante más temprano que acá, debido a que “como tarde se cena a las 20.30” pero “en invierno es más común que se coma más temprano”.

Si hablamos de cenar temprano, en Alemania la hora de comer es sobre las 18 o 19 horas, y “a las 10 de la noche ya están todos durmiendo”. En Bélgica en cambio depende de la región, debido a que al norte el horario habitual de la cena es a las 18, pero en el sur es sobre las 20, según contó Guillaume.

“ENAMORADA DEL ATARDECER”

Los jóvenes estudiantes están felices de estar en Paysandú, y así lo manifiestan en cada ocasión. Y cuando se les consulta sobre qué aspectos son los que más les gustan de nuestra ciudad, no lo dudan: “me encanta la comida y la belleza natural, cuando uno va a la playa puede ver la costa argentina”, destacó Angelo. Por su parte, Ginevra dijo estar “enamorada del atardecer” que se ve desde nuestras costas.

OTROS SE VAN

AFS ofrece un programa de intercambio estudiantil, por lo que más allá de recibir a jóvenes de diferentes partes del mundo, algunos sanduceros también vivirán esta experiencia en el exterior.

Tal es el caso de Juan Ignacio, quien viajará a Dinamarca el 4 de noviembre a un campus durante un mes tras haber ganado una de las becas que ofrece la oenegé. Alfonsina, también ganadora de una beca, viajará a Italia el 2 de diciembre y vivirá la experiencia durante dos meses; en tanto que Maximiliano irá a Alemania el 24 de febrero y estará allí durante un año. “Elegí Alemania porque me gusta la historia”, indicó.

Cabe mencionar que los jóvenes sanduceros no conocen aún su ciudad de destino debido a que todavía no se les fue asignada una familia para hospedarse en los países de destino. “Estamos nerviosos y ansiosos”, dijeron los tres previo a su viaje al viejo continente, en donde vivirán una experiencia única e irrepetible que recordarán durante toda su vida.