Una madrugada de terror vivió un adolescente de 16 años al ser víctima de un robo y quedar encerrado en su cuarto, mientras los delincuentes hurgaban entre las pertenencias de la familia.
Según el relato brindado por el padre del adolescente a EL TELEGRAFO, la situación fue “muy fea” y por la cual “siento mucha impotencia”. “Cuando uno trabaja todo el día para tener las cosas básicas de una casa, para darse algún lujo o ni eso, sino tener un poco más de comodidad; y entran con total impunidad, rompiendo todo, no importándoles nada, es horrible. Tratando de someter a las personas a un momento muy malo como le pasó a mi hijo que vivió una semana muy aterradora al habernos entrado los delincuentes dos veces en una semana”, dijo.
Comentó que el martes 16 “nos entraron por primera vez”. “Mi hijo estaba solo porque yo estaba trabajando. Sintió ruido y se levantó y en ese momento cuando ellos vieron que había gente se fueron; pero igualmente les alcanzó para llevarse la bici, termo y mate, una mochila y un buzo de mi hijo. El viernes pasado habíamos puesto candados mejores en las puertas para tener más seguridad, pero volvieron. Rompieron todo, candados, puertas, entraron a casa y lo encerraron a mi hijo en el cuarto. Por una equivocación había quedado la llave del lado de afuera de la puerta, entonces lo encerraron y aprovecharon a robarnos la tele, parlante, ropa y otras cosas. Cuando mi hijo se dio cuenta del ruido, pensó que yo había vuelto, entonces al querer salir del cuarto notó que estaba encerrado. Se asustó y me llamó de inmediato por teléfono; me vine volando del trabajo, ya no encontré a nadie, pero sí el faltante de las cosas”, relató.
Mientras volvía del trabajo “mi hijo rompió la puerta del cuarto para poder salir, en un total estado de nervios y desesperación. Por un lado doy gracias a Dios que él no salió antes del cuarto o los enfrentó, porque se ve que ellos andaban con barretas o algo similar al ver la forma en que rompieron los candados del fondo y la puerta. A raíz de eso tuve que decidirme a poner alarma y cámaras en la casa, pagarle a una persona para esas noches antes que nos terminaran de instalar las medidas de seguridad y poder dormir al menos, no tranquilos, pero sí descansar”.
Asimismo, contó que la Policía concurrió a la casa, tomó declaraciones “pero el problema es el barrio que está muy inseguro. Anda gente de noche que no es acá, que no vive en nuestras cuadras, pasan controlando, vichando todo y eso preocupa”.
VECINOS CREARON GRUPO DE ALERTA
En tanto, una de las vecinas de la zona de Entre Ríos y Colón dijo que “siempre” han sufrido robos menores, pero no tan seguidos como en estos últimos años. “Tenemos la sede de Rampla en la cuadra y es la que siempre resultada afectada con robos, pero ahora hace una semana que nos vienen atacando y ya no sabemos qué hacer. Hay noches en que me acuesto tarde y si siento cualquier ruidito ya me asusto y me levanto para estar alerta, porque mis perros y los de los vecinos se ponen como locos. Anda gente pasando, se silban entre ellos, se contestan, como que van mirando todo y avisándose de qué hay o si las casas están vacías”, dijo.
Asimismo, indicó de un caso reciente que quedó grabado por las cámaras “donde uno se trepó a un muro para entrar a una casa y en ese momento los dos perros malísimos que tiene la familia lo sacaron corriendo y huyó con una bolsita que ya tenía”. “La semana pasada pegado a la sede de Rampla pasó lo del vecino con su hijo adolescente”, dijo haciendo referencia a lo antes señalado en la nota. “Yo estaba sentada en mi casa tomando mate y vi que otro vecino se paseaba mirando y pensé ‘le debe haber tocado y le robaron’. Pero no, era que había pasado esto en la casa con el adolescente y el vecino estaba alerta por que andaba la Policía. Cuando vino el móvil tuvieron que llevarse al chiquilín a Comepa porque estaba en un estado de nervios total del susto que pasó y después lo trajeron a la casa”, contó.
“Hace tres semanas por Colón casi Carlos Albo robaron en una casa. Después saltaron el muro y entraron a otra casa donde también robaron. Antes de ayer (por el lunes) por calle 25 de Mayo entraron en una casa y robaron varias cosas, y ayer de mañana (por el martes) a una cuadra de mi casa asaltaron la carnicería El Emperador, pero ha habido otros robos chicos también en el barrio como nunca nos había pasado”, aseguró la vecina.
Dada la situación, “llamé a la Intendencia a pedirles más iluminación, porque si bien tenemos, hay unos tubos como medio agotados. Otro vecino también llamó y quedaron en venir, pero no lo han hecho. Lo que pasa también es que la Policía anda, pasa por acá, pero vienen ya con sus luces de barrales encendidas que los ven de lejos y los chorros disparan. Tendrían que tomar otra determinación, traer a la Republicana por unos meses”, dijo.
Además, indicó, “entre todos decidimos crear un grupo de WhatsApp, somos unos 16 vecinos, para cuidarnos y avisarnos las cosas. Ya nos estamos mandando mensajes. Incluso el vecino que le treparon el muro nos avisó que a ese mismo ladrón lo había visto a dos cuadras merodeando y enseguida nos alertó a todos. Pero ya no es vida lo que estamos pasando en unas cuadras como lo son las calles Entre Ríos, Colón, Gutiérrez Ruiz y Artigas”, dijo la vecina.
