Día Internacional de Conmemoración de las Víctimas del Holocausto

La Asamblea General de la ONU decidió en el año 2005 que se designe el 27 de enero como Día Internacional de Conmemoración anual en memoria de las Víctimas del Holocausto. En esa fecha del año 1945 las tropas soviéticas liberaron el campo de concentración y exterminio nazi de Auschwitz-Birkenau. La fecha busca no solo rendir homenaje a las personas que murieron en los campos de concentración nazis, sino también tomar medidas para ayudar a los más jóvenes a crear resiliencia en cuanto a las ideologías de odio.
Se estima que seis millones de hombres, mujeres y niños judíos perecieron en el Holocausto. Y este evento no solo afectó a los países donde se cometieron crímenes nazis sino también en otros muchos lugares del mundo, donde muchas personas también perdieron la vida por el simple hecho de la religión que profesaban, o de la familia en la que habían nacido. Aunque se inició en Alemania, a medida que las tropas alemanas iban conquistando territorios en Europa iban expandiendo su política de persecución de los judíos del Viejo Continente. Más de setenta y cinco años después, los Estados comparten la responsabilidad colectiva de abordar los traumas aún vivos, conmemorar los hechos, cuidar de los lugares históricos para guardar la memoria y promover la educación, documentación y la investigación.

Diferencia entre holocausto y genocidio

Genocidio y holocausto no son sinónimos. Un genocidio es la planificación de la muerte de todas las personas que pertenecen a un grupo o a un pueblo, generalmente por motivos políticos o religiosos. El término fue acuñado en 1944 por “un abogado polaco judío llamado Rafael Lemkin (1900-1959), que creó la palabra combinando ‘geno’, término griego que significa raza o tribu, con ‘cidio’, del término latín que significa matar”, según afirma el Museo Memorial del Holocausto de Estados Unidos en su página web. Lemkin, según su biógrafo Douglas Irvin-Erickson, consideraba que “las leyes de guerra existentes eran inadecuadas para tratar las nuevas formas de violencia política que afligían al mundo”.
Por su parte, el Holocausto, se entiende como el genocidio sistemático de los judíos a manos de los nazis durante la Segunda Guerra Mundial. Antes de la Segunda Guerra Mundial, esta palabra ya se utilizaba cuando un gran grupo de personas moría, pero desde 1945 se convirtió casi en un sinónimo del asesinato de judíos europeos y se nombró “Holocausto”, con mayúscula. Los judíos lo llaman “Shoah”, que en hebreo significa “catástrofe”.

Por qué es importante recordar el Holocausto

Los judíos fueron una especie de chivo expiatorio en la historia de Europa y el Holocausto fue el último gran episodio de esta etiqueta. “Las persecuciones de judíos y muy particularmente el Holocausto, han permitido señalar el peligro de convertir en chivo expiatorio a un determinado grupo social, pero también que la modernidad y la razón, no inmunizan contra la barbarie”, explica el profesor de historia de la Universidad Francisco de Vitoria Diego Martínez López, experto en las deportaciones de Mauthausen.
“A pesar de las dificultades, nuestro deber es continuar pensando en fenómenos como Auschwitz para tratar de evitar a toda costa que algo así pueda volver a repetirse, pero también como prisma desde el que interrogar el presente”, concluye Martínez López. “Al fin y al cabo, tal y como ha señalado de forma reciente el historiador Dan Stone, el interés y la necesidad de arrestar, aislar y mantener a individuos fuera de los marcos legales, se ha mantenido como insoslayable por todo tipo de Estados hasta nuestro días”.

Las “víctimas olvidadas” del régimen nazi

Otro de los grupos perseguidos fueron los testigos de Jehová. Se los identificaba con un triángulo púrpura cosido en el lado izquierdo de su uniforme, justo al lado de su número de prisionero. Resulta destacable que los testigos de Jehová no fueran encarcelados por su origen étnico o nacionalidad, sino por sus convicciones religiosas. El profesor Detlef Garbe, anterior director del museo conmemorativo del antiguo campo de concentración de Neuengamme, explicó: “Los testigos de Jehová, quienes fueron sometidos a una persecución implacable, están entre las llamadas víctimas olvidadas del régimen nazi. Se les ignoró por décadas pese a que un número importante de testigos de Jehová sufrió persecución y muerte”. Claro que “en comparación con la enorme comunidad de Auschwitz, los testigos de Jehová no constituían más que un grupito minúsculo que no llamaba la atención”.

URUGUAY

Ayer a las 20:00, fecha en la que se recordó al Día Internacional de Conmemoración en Memoria de las Víctimas del Holocausto, la subsecretaria de Educación y Cultura, Prof. Ana Ribeiro, emitió un mensaje, en nombre del Poder Ejecutivo, vía cadena nacional de radio y televisión.
Por su parte, mañana lunes a las 10:00 se llevará a cabo una sesión especial de la Comisión Permanente del Parlamento en conmemoración del Día Internacional en Memoria de las Víctimas del Holocausto establecido por las Naciones Unidas.