Como es tradicional, y en esta oportunidad con un clima que acompañó al no ser excesivamente caluroso, miles de sanduceros se volcaron en la jornada anterior a la compra de los regalos del Día de Reyes, con predilección por la zona céntrica pero también inclinándose a recorrer otras zonas de la ciudad y comercios de barrio. La venta de juguetes de todo precio fue muy importante, pero también se ha trabajado en regalería, tiendas, zapaterías, farmacias, perfumería, confiterías, entre otros rubros que son sensibles a las inquietudes de compras de nuestros conciudadanos. Un oportuno respiro también para el comercio local, en una tradicional jornada de ventas pico, y cuando también se ha minimizado el impacto del cruce para compras en la vecina orilla.