Cuidados para no enfermarse

Hace un tiempo, encontré un video de la Asociación Estima, que explica lo que deberíamos hacer para no enfermarnos, o para, al menos, sobrellevar la enfermedad.
Los pensamientos que provocan sentimientos de culpa, miedo, rencor, influyen en nuestra salud, mental y física. “Provocan gastritis, úlceras, dolores lumbares y dolor en la columna”, decía.
Los sentimientos reprimidos, escondidos, son causa de “dolencias nerviosas, gástricas y problemas de la piel”. Si rechazamos esos pensamientos, si perdonamos a los demás y a nosotros mismos, nos sentiremos en paz, y nuestra salud mejorará. Las buenas compañías nos ayudan a superar penas, rencores, miedos, maldades. Es importante aquello de “dime con quién andas y te diré quién eres”. A veces absorbemos la energía negativa que transmiten personas mal intencionadas, o personas que guardan miedos, desilusiones, rabia y rencores.
Las canciones tristes tienen un gran poder negativo para nuestra salud síquica. Escuchemos canciones alegres, que nos permitan aliviar el estrés y sentirnos bien.
Las cosas que vemos, si son malas, nos hacen sentir muy mal. En lo posible, tratar de mirar lo que nos hace bien, películas, videos, sucesos, que nos den alegría.
El entorno. Un ambiente desordenado y sucio, nos hace sentir enfermos. La naturaleza y el Universo tienen orden y organización. Nosotros también debemos tenerlos en nuestra casa.
La palabra. Las palabras pueden herir el alma de los otros, si son groseras y sin caridad. No usarlas para quejarse, reclamar, ofender, maldecir, juzgar. Escuchar las palabras de los otros. Cuando hablamos mal a otros, estamos dañando nuestra propia autoestima. Aprender a callar a tiempo.
La gratitud es fundamental, debemos ser agradecidos por todo lo que nos sucede: por lo bueno, que nos hace felices y por lo no tan bueno, que nos enseña siempre algo, nos da lecciones de vida. La gratitud crea un estado mental positivo y feliz.
Hablar, transmitir emociones y sentimientos reprimidos, es una forma de hacer terapia. Un buen diálogo puede disminuir el dolor y hacernos sentir mucho mejor.
Decidir rechazar dudas, ansias, angustia, sobre la enfermedad real o posible. Somos lo que pensamos, buscar soluciones, rechazar el pesimismo, no lamentarse. El pensamiento negativo genera energía negativa, que se transforma en enfermedad. Frente a un problema, de la índole que sea, no demorar en tomar decisiones. Solicitar ayuda de un amigo o de un profesional. Alejarse de las personas negativas, que agrandan los problemas. Tener en cuenta que a veces, un pequeño gesto o una pequeña acción, puede lograr un gran resultado. Las abejas son muy pequeñas, pero pueden producir mucha dulce miel.
No vivir de apariencias, con un barniz, actuar desde la raíz, mostrar nuestro interior. No esconder la realidad, no fingir para dar la impresión de estar bien.
Aceptarse a uno mismo, con dudas, temores, defectos, virtudes, ser uno mismo. Aceptar las críticas, amarse a sí mismo, con virtudes y defectos, eso es sabiduría, buen sentido y terapia.
Comunicarnos con confianza, tener apertura hacia los otros, conservar las amistades verdaderas, aquellas que siempre están cuando las necesitas, cultivar relaciones estables y duraderas.
“El buen humor, la risa, el reposo y la alegría” son factores imprescindibles para tener buena salud y una larga vida.
La tía Nilda