El pasado 26 de enero la familia del futbolista salteño Charly Cabrera, su esposa Paula e hijos Guadalupe y Genaro sufrieron un grave siniestro de tránsito en la ruta 3, en el límite entre Salto y Artigas, cuando viajaban en un automóvil que tomó fuego. En ese momento falleció su hija de 17 años, días después la esposa y por último Charly. Genaro es el único sobreviviente y con 6 años fue sometido a una operación inédita en el país, con la técnica de cobertura de piel de Microexpansión o Técnica de MEEK.
La intervención se realizó en el hospital Pereira Rossell, luego fue trasladado al CTI de niños y finalmente a cuidados intermedios, en tanto presentó quemaduras en el 70% de su cuerpo
La directora del centro de quemados del hospital, Dra. Beatriz Manaro, especialista en cirugía plástica y reconstructiva, con el apoyo de autoridades de ASSE, logró la autorización para traer un equipo MEEK a Uruguay, con la asistencia del cirujano plástico chileno, Dr. José Luis Piñeros, con el fin de llevar adelante la intervención en forma conjunta.
La intervención cubrió el 90% de la superficie quemada. La innovadora técnica permite la cobertura cutánea en este tipo de lesiones, con una reducción de la morbilidad-mortalidad de los pacientes, así como el número de procedimientos quirúrgicos.
EL TRATAMIENTO
Manaro dijo a diario Cambio que el niño arribó directamente al CTI con quemaduras de tercer grado. “Ahí comenzamos con los tratamientos en el cual se le realizan cirugías que se llaman escaretomías. Es el retiro de la piel quemada hasta un plano sin piel quemada sangrante, el cual esa área cruenta, carente de piel va a ser cubierta por piel ya sea de sí mismo o piel de banco o sea piel llamado injerto de piel cadavérica”, detalló. “Después de 3 o 4 cirugías en la cual retiramos todo su tejido necrótico que ya lo hablamos que es un 70 o 75 % logrando un área receptora buena se plantea la cobertura o sea cubrir a Genaro con piel. El área que nos queda calculamos que es un 25% que se podía obtener para cubrir un 70%. Hay áreas que no cuentan, era casi imposible hacerlo con números de injertos convencionales. Los que nosotros utilizamos son las cuchillas que calculamos que tendrían que ser por lo menos 25 cirugías”.
LA TÉCNICA UTILIZADA
En el marco de las consultas, los especialistas plantearon la posibilidad de utilizar la técncia MEEK. “Cuando salgo de la sala de operaciones veo al niño que está en condiciones. En ese mismo momento llamo a un colega de Chile, al Dr. José Luis Piñeros, quien fue el que concurrió a nuestro país de manera honoraria y a pura voluntad y amistad”.
En forma paralela efectúan las gestiones con la empresa en el exterior y “acceden a prestar el aparato acá en Uruguay. Sufarma es la empresa que en ese momento podía acceder a darnos los insumos. Los insumos son enviados para que los traiga el Dr. Piñeros”.
Manaro explicó que la técnica “es un cuadradito de piel de 5 por 5 centímetros. Puede dar pequeñísimos injertos, micros injertos de piel de 194 a 200 centímetros. O sea, el aparato que tiene 16 cuchillas, puede pasar la piel de manera longitudinal y transversal haciendo un cuadradito. Un pedacito de piel se coloca en una tela. Esa tela se expande, se alarga, se agranda y es lo que se coloca en la piel. Por eso pudimos hacer esa técnica gracias a varias personas y ASSE, por supuesto, siempre a la vanguardia de tratar de conseguir lo mejor para los pacientes y al Hospital Pereira Rossell”.
Agradeció “especialmente al Dr. Álvaro Galiana, quien es el director y enseguida colaboró con la idea. De esa manera logramos cubrir a Genaro con una cirugía por la que se colocan esos micro pedacitos de piel. Va creciendo uno a otro hasta que forman una malla que lo cubre”.
EN REHABILITACIÓN
Posteriormente a la cirugía, Genaro abandonó el CTI y se encuentra en el quinto piso, correspondiente a cuidados moderados del hospital.
“La recuperación va a llevar bastante tiempo. Hay que rehabilitarlo. Nosotros somos un equipo multidisciplinario compuesto por pediatra, sicólogo, siquiatra, fisioterapeuta, cirujano plástico, rehabilitadores y enfermería. Todo ese equipo multidisciplinario está a disposición de Genaro para tratar de lograr la rehabilitación integral, física, síquica y funcional. En este momento estamos trabajando con todas las especialidades pero por supuesto que también con el apoyo de los asistentes sociales que hacen los enlaces con la familia y con los diferentes centros cuando sean necesarios”, dijo Manaro.
La especialista agregó que este proceso continuará con “una o dos cirugías más, porque el área era muy grande y muchos pedacitos de piel pueden perderse. Es muy importante el año de recuperación por delante que tendrá. Genaro va a tener que aceptar su condición física nueva porque genera una alteración de su estructura y de su imagen. Pero va a tener todo el apoyo para lograrlo”, concluyó.
