En una ceremonia cargada de emoción y orgullo, el Teatro Escayola de Tacuarembó reabrió sus puertas tras una obra de recuperación que revitalizó este ícono cultural. El intendente Wilson Ezquerra destacó su importancia, enfatizando que el teatro une al Museo de Arte y al Museo del Gaucho, que son espacios fundamentales para la identidad y la vida cultural.
Señaló que pasaron más de 60 años hasta el día de hoy “que estamos presentando las obras y muchos eventos culturales que habrán de suceder de aquí en más; este lugar es un ícono de la cultura tacuaremboense y uruguaya que ahora tenemos que cuidar, preservar y proyectar”.
La ceremonia contó con la presencia del presidente de la República, Luis Lacalle Pou, quien elogió la labor realizada y resaltó la necesidad de preservar y promover estos espacios de arte y cultura. La inversión total superó los 80 millones de pesos y se realizó mediante el Programa de Desarrollo y Gestión Subnacional (PDGS) de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP).
El acto tuvo lugar frente al propio teatro, ocasión en que estuvieron presentes el ministro de Educación y Cultura, Pablo da Silveira; el presidente del Correo Uruguayo, Rafael Navarrine; el director de Cultura de la intendencia, Carlos Arezo, y la presidenta del Sodre, Adela Dubra, entre otras autoridades nacionales y departamentales. Hubo agradecimientos especiales para la Dirección General de Obras y todos los trabajadores involucrados en la restauración, así como al director general de Cultura, Carlos Arezo.
La gala contó con la actuación de Paysandú es Tango, conformada por la orquesta La Milonguera de Dirección de Cultura y el elenco de Heroica Tanguera, dependiente de la Unidad de Eventos y Escenarios de la intendencia sanducera, quienes cosecharon aplausos y el pedido generalizado de su pronto regreso a la ciudad de Gardel. Además, a la noche, se llevó a cabo la presentación de la Orquesta Juvenil del Sodre junto al cantante Lucas Sugo, que interpretó el tango “Volver” de Alfredo Le Pera y Carlos Gardel.
El presidente Lacalle Pou destacó que la cultura fortalece y enriquece, y que el teatro es un espacio vital para el arte y la creatividad. La recuperación del Teatro Escayola no solo implicó renovaciones estructurales, sino también la incorporación de tecnología y la preservación de elementos históricos que lo caracterizan.
El acto contó con el tradicional corte de cinta y el descubrimiento de una placa alusiva. Además, hubo un recorrido por las instalaciones y se realizó el matasellado de un sello conmemorativo por parte del presidente.
EL PADRE DE GARDEL
La construcción del Teatro Escayola se inició en el año 1888, acorde al proyecto del ingeniero francés, Victor L´Oliver, basado en el estilo de los clásicos teatros europeos de la época; hecho por encargue del coronel Carlos Escayola, político y militar uruguayo, que es reconocido como el padre del cantautor Carlos Gardel.
Tres años duró el proceso de construcción de la edificación y el 31 de mayo de 1891 fue inaugurado. Funcionó como sala cultural hasta mediados de la década de 1950. En 1989, el Poder Ejecutivo declaró el edificio monumento histórico, hecho ratificado en 2022 por el gobierno departamental, en virtud del cese de la declaración de carácter nacional.
Muchos fueron los espectáculos y artistas que se presentaron en el Teatro Escayola. Zarzuelas, óperas, danzas, cine, son solo algunos de los géneros que pudieron disfrutarse durante más de 62 años en este lugar, que a mediados del siglo XX fue cerrado. Para ese tiempo el teatro era una propiedad privada y sus propietarios tomaron las instalaciones para la creación de una imprenta.
Casi 118 años después, el teatro fue adquirido por la Intendencia de Tacuarembó que previó su transformación en un centro cultural. Las nuevas instalaciones, ubicadas en la calle 25 de Mayo –entre Luis Alberto de Herrera y Joaquín Suárez–, incluyen en la actualidad una sala de teatro, dos museos en las salas laterales, el Museo de Artes Plásticas de Tacuarembó, y el Museo del Gaucho.
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