Un hecho inusual se dio en la zona de Benito Chain e Independencia cuando la Policía detuvo a un hombre que habría pretendido robar una motocicleta.
De acuerdo a datos recabados por EL TELEGRAFO, el sujeto había sido visto merodeando en las inmediaciones de Super Independencia, donde había varias motocicletas estacionadas. Con actitud sospechosa, habría aprovechado la ocasión en que quedó poca gente fuera del comercio para intentar romper el carenado de un birrodado que le pertenece al guardia de seguridad.
El hombre fue visto por particulares que le gritaron y lo corrieron. Por el lugar iba pasando un patrullero, por lo que se le dio aviso de lo ocurrido. De inmediato, los uniformados fueron a detener al sujeto quien comenzó a gritar que no lo tocaran, ya que tenía “coronavirus y sida”.
No dando crédito de lo que escuchaban, algunos vecinos llegaron a replicar que el hombre decía que tenía coronavirus; aunque luego se supo que se trataba de una maniobra para evitar ser aprehendido. Sin embargo, fue identificado por la policía y conducido –en la caja de la camioneta junto a la bici en que andaba– al servicio del hospital para el examen de rutina. Posteriormente fue alojado en una dependencia policial.
ARRESTO DOMICILIARIO POR CORONAVIRUS
En Montevideo, en tanto, llamó la atención la resolución tomada con un hombre, señalado como “narco”, a quien se le negó la audiencia de formalización por tener síntomas de COVID-19 y que luego dio positivo al test.
El hombre se encuentra con custodia policial en el refugio dispuesto por el Ministerio de Desarrollo Social (Mides) para personas con coronavirus, ubicado en el Estadio Charrúa. El imputado se fugó de un control policial y fue detenido en un segundo control. Los efectivos lo vieron descartando una bolsa cuyo contenido hacía presumir que se trataba de drogas. Luego, en un análisis del celular, se constató que participaba en una operación de comercialización de drogas y armas.
Éste admitió los hechos y su defensa llegó a un acuerdo con la Fiscalía, que este martes pretendió formalizarlo. El acuerdo, según supo Subrayado, implicaba la prisión efectiva por 10 meses y otros 14 meses de libertad vigilada. Como el hombre tenía síntomas, se llamó a un servicio de emergencia en Fiscalía y el médico le indicó antibióticos, quedando pendiente el resultado del test de coronavirus, que finalmente se confirmó este miércoles.
La jueza no hizo lugar al pedido de la Fiscalía. El hecho generó malestar en Fiscalía y en la Policía por entender que la magistrada no debía dejar de lado que se cometió un delito. El acuerdo al que se llegó con la defensa no se pudo llevar a cabo. “Sin que esto signifique valoración o prejuzgamiento sobre los hechos que se le imputan, entiende la suscrita que los mismos no revisten una gravedad tal que amerite realizar una audiencia poniendo en riesgo la salud de todos los operadores judiciales”, indicó la jueza Beatriz Larrieu en el fallo al que accedió Subrayado.
Ante este dictamen judicial, la fiscal de Estupefacientes, Mónica Ferrero, solicitó medidas limitativas, a lo que la jueza Larrieu dispuso fijación de domicilio y la prohibición de salir del departamento de Montevideo por 90 días.
