“El Chono” y un familiar enviados a la cárcel por venta de droga en zona Sur

El conocido malviviente apodado “El Chono” y un familiar, de 19 años, fueron enviados a la cárcel al comprobarse su responsabilidad en la venta de drogas en una boca ubicada en la zona sur. El operativo, denominado “Kacike”, realizado por la Brigada Departamental Antidrogas, permitió además la incautación de marihuana y cocaína.
De acuerdo a lo informado a EL TELEGRAFO, la Policía trabajaba desde octubre del año pasado con varias pistas que indicaban que en una finca de la zona de Charrúas y Gutiérrez Ruíz estaba operando una boca de venta de drogas. Al saberse que era habitada por Rodolfo Samuel Benítez Otormín, de 48 años, poseedor de profusos antecedentes penales, se montó un operativo que demandó el trabajo coordinado con la Fiscalía de Turno.
En el marco de las averiguaciones, fue detenido “El Chono” Benítez Otormín, que en 2015 lideró una banda dedicada al narcomenudeo en coordinación con un recluso al que conoció estando preso en el Penal de Libertad. Si bien la cantidad de droga que movían entre los departamentos de Artigas y Paysandú no se asemejaba al de una gran organización, la metodología utilizada emulaba los cárteles americanos. En esta ocasión, fue aprehendido además un familiar de “El Chono”, K.I.B., de 19 años.
Personal de la BDA, con apoyo de la Unidad de Investigaciones y del Grupo de Respuesta Táctica, incautó un “ladrillo” de marihuana de 355 gramos, sustancia vegetal acondicionada en forma de paquete con un peso de 75 gramos, 125 gramos de “cogollos”, una “piedra” de cocaína de 9,8 gramos de pesos, tres teléfonos celulares, parlantes de música, un led de 24 pulgadas y 300 pesos.
Una vez en la órbita penal, se dispuso la formalización de la investigación y posterior juicio abreviado para Rodolfo Samuel Benítez Otormín, imputado y condenado por “un delito continuado de negociación de sustancias estupefacientes”, imponiéndole como pena dos años y seis meses de penitenciaría. Y la formalización de la investigación para K.I.B por “un delito continuado de distribución de sustancias estupefacientes”, imponiéndole como pena dos años de penitenciaría a cumplirse de la siguiente forma: un año de prisión efectiva y el restante año en régimen de libertad vigilada con la medida de arresto domiciliario nocturno en el horario de 21 a 6. Por su parte, se dispuso el decomiso de la sustancia incautada y la confiscación de los bienes secuestrados en oportunidad de la realización del allanamiento, los cuales fueron puestos a disposición de la Junta Nacional de Drogas.