Inventario del patrimonio edilicio es un instrumento para corregir políticas

Un grupo de estudiantes trabaja en el “Patio Colonial” de EL TELEGRAFO.

Durante el fin de semana más de 200 estudiantes de la Facultad de Arquitectura estuvieron trabajando en la elaboración de un inventario del patrimonio edilicio de la ciudad de Paysandú. Como publicó EL TELEGRAFO, la actividad de los futuros profesionales y sus docentes coincidió con la celebración del Día del Patrimonio. Pero cabía profundizar un poco en los aspectos técnicos del trabajo que se lleva a cabo y, de paso, conocer una visión académica acerca de este debate sobre la conservación patrimonial edilicia, que se ha avivado en nuestro país a partir de casos tan sonados como la demolición del antiguo Hotel San Rafael, ícono de Punta del Este.
William Rey, académico que participó en la coordinación de las actividades desarrolladas durante el fin de semana indicó que un inventario “es un gran instrumento para la planificación. Si dentro de cinco años -lo ideal de este tipo de inventario es hacerlo entre cinco y seis años- se volviera a hacer, tendríamos otro registro, otra fotografía, y podríamos comparar perfectamente si ha mejorado el estado del patrimonio, o si no lo ha hecho, para corregir políticas; ese es un poco el sentido de un inventario”.
El profesional explicó cómo se relevan los inmuebles comprendidos en la zona determinada para el estudio. “No se trabaja solo a nivel de fachada, pero no siempre se puede ingresar a los bienes; para eso hay otro instrumento, que es el Google Earth, o el IDE, que nos permiten ver desde arriba y por ejemplo entender si se trata de una vivienda de patios, si tiene un jardín, ver un poco la estructura, aún cuando no se puede ingresar. Pero la idea es poder ingresar, solicitar los permisos correspondientes en el momento para poder ingresar. Si no se puede no se puede, pero de todas maneras no nos quedamos solo con la información de fachada”, dijo.
En Paysandú el inventario se extiende desde Cerrito hasta el barrio portuario, desde Uruguay hasta Sarandí.
“Va variando, esta zona (plaza Constitución) es un poco más ancha, pero básicamente son dos manzanas y dos manzanas, con el eje vertebral de la calle 18 de Julio”, explicó.

CONSERVACIÓN Y DEBATE
A partir de lo ocurrido con el antiguo Hotel San Rafael y otros sonados casos con obras importantes en Montevideo, que se fueron para siempre, se instaló en nuestro país un debate sobre el valor que damos los uruguayos al patrimonio edilicio.
“Yo creo que uno lamenta a veces la destrucción de algunos bienes, pero me parece que lo importante es que la discusión genere fermento de una toma de conciencia, de una nueva actitud frente a los bienes”, planteó Rey.
“Esto que nos pasa a nosotros les pasó a los europeos, y de manera más dramática por las guerras; pero nosotros lo que tenemos que hacer es poder capitalizarlo en términos de toma de conciencia, por eso las discusiones son fundamentales, las discusiones en clave respetuosa, pero son fundamentales”, afirmó.
En el caso de Paysandú hay valores que considera deberían considerarse especialmente. Señaló que se trata de una ciudad que tiene entre “las ciudades litoraleñas, la mejor arquitectura moderna; básicamente dada por las obras de algunos arquitectos como Garrasino, Vignola, pero también Máscolo; arquitectos que hicieron sus aportes muy interesantes. Yo creo que ahí está el nudo fundamental de los mejores valores. Bueno, el Palacio Rizzo es una muy buena obra y sin embargo no es una obra moderna. Bueno, estoy frente a un gran patrimonio del país (la Basílica); entonces, todo eso hay que ponerlo en valor y para ello el inventario es clave”.
El inventario abarca también el barrio portuario, “una zona con problemas históricos pero con un muy buen patrimonio sin embargo; tenemos el palacio Rizzo, allá tenemos la casa que había sido del exintendente Garrasino, que fue un muy buen arquitecto de esta ciudad, o sea, hay muy buenas obras, por lo tanto es materia patrimonial también”.

PROCESO
Este inventario requiere de un procesamiento y corrección que se realizará en las aulas de la Facultad, mediante clases taller. “Después tiene que haber una corrección final, de los profesores y luego se le entrega a la Intendencia”, dijo el académico. Habrá una preentrega a la Intendencia este año, pero la entrega final será el año que viene.
Rey agregó que este trabajo tiene antecedentes: “se hizo con la Intendencia de Florida, el año pasado entregamos el inventario, se hizo también en Fray Bentos, cuando esa ciudad aspiró a ser Patrimonio Mundial, ahí fue un trabajo muy duro, porque había un estándar muy duro de parte de Unesco, y también hicimos el inventario para la obra del ingeniero Dieste, que no culminó, porque finalmente el Uruguay decidió presentar solo una obra. Pero la idea era tener un inventario completo, las 40 obras quedaron perfectamente identificadas, relevadas e inventariadas”.