Friforífico Casa Blanca aguarda resultado de auditoría para volver a exportar a China

En Frigorífico Casa Blanca se aguarda con expectativa la resolución de las autoridades chinas para volver a exportar carne bovina a ese mercado, tras la auditoría realizada el jueves de la semana pasada, tanto a la industria sanducera como a Lorsinal, empresas donde en los primeros días del mes de diciembre del año pasado se constataron casos de COVID-19.
Desde la empresa aseguraron este lunes a EL TELEGRAFO que la auditoría “fue muy completa y realmente quedamos conformes, por lo que esperamos conocer la decisión de las autoridades de ese país en los próximos días”.
Respecto al trabajo que se desarrolla actualmente, explicaron que “la actividad del frigorífico es normal para el resto de los mercados”.
Días atrás, el ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), ingeniero agrónomo Carlos María Uriarte, señaló que “desde el 17 de diciembre no se han presentado nuevos casos”, agregando que el martes 12 “se realizó la primera auditoría virtual en una de las plantas y el jueves se concretó la segunda –en la industria sanducera– para ver cómo se procede al pedido”.
“Somos optimistas en los resultados de la primera auditoría”, precisó el secretario de Estado. “En Uruguay no se oculta información, se trabaja con responsabilidad, los casos se comunican y las autoridades actúan”, subrayó.
Durante una conferencia virtual sobre las estrictas políticas de contralor elaboradas para la comercialización de carnes al exterior, el ministro de Relaciones Exteriores Francisco Bustillo, se refirió a la importancia del mercado chino para Uruguay (31% del total exportado y 58% de la industria cárnica). Además, remarcó que es importante evitar que casos aislados se transformen en brotes y que en ese punto vamos un paso adelante.
Recordó que se reunió, junto con el ministro Uriarte, con el embajador de la República Popular China, Wang Gang, para analizar la evolución de las exportaciones uruguayas al mercado de esa nación. En esa oportunidad, se destacó el compromiso de Uruguay en garantizar la inocuidad, la trazabilidad y los controles sanitarios en las cadenas productivas de alimentos y se reafirmaron las reconocidas credenciales internacionales del país como proveedor de productos confiables y de alta calidad para el mundo.
El presidente del Instituto Nacional de Carnes (INAC), ingeniero agrónomo Fernando Mattos, explicó que, por ser una industria que exporta cerca del 70% de su producción, las exigencias de los mercados extranjeros deben ser cumplidas. “En este caso, nos regimos por el mercado más exigente, que es China”, aseveró. Y afirmó que el impacto de la suspensión del mercado chino es muy importante y que los frigoríficos que han tenido que detener su producción se dedicaban en un 60% a exportaciones al país asiático. “Por su volumen, no es un mercado fácil de sustituir”, indicó.
El jerarca delineó que la estrategia del Gobierno se basa en bajar la cantidad de aranceles, unos 200 millones de dólares por año, que paga el sector en todos sus mercados. “Eso significa menos precio, competitividad e ingresos para Uruguay”, expresó.
valoración
El ministro de Salud Pública Daniel Salinas, valoró el trabajo en conjunto para asegurar la inocuidad de los alimentos, así como para proteger la salud y la seguridad de las personas que trabajan en la industria agroalimentaria. “Hay responsabilidades a nivel empresarial”, dijo. “Se cuidaron todos los aspectos relacionados con los requisitos previos a concurrir al lugar de trabajo, control de proveedores, medidas de higiene personal y ambiental, correcto uso de áreas comunes”, enfatizó.
Aseguró que se trata de un trabajo que llevó muchas horas y cuyo objetivo es generar valor agregado a los productos uruguayos por medio de las máximas condiciones sanitarias.
Medidas para prevención
El Gobierno elaboró un protocolo de recomendaciones sanitarias para preservar la salud de los trabajadores de la industria cárnica y garantizar a los consumidores la calidad e inocuidad de los alimentos. Las medidas se tomaron ante la exigencia de China y comunicó que se realizan auditorias a dos frigoríficos para revertir la suspensión de la venta a ese mercado.
Un equipo multidisciplinario público-privado diseñó medidas adicionales para los frigoríficos, que se recogieron en un protocolo de recomendaciones sanitarias, con el fin de preservar la salud de los trabajadores y garantizar a los consumidores la calidad e inocuidad de los alimentos.
El equipo asesor responsable está integrado por los ministerios de Salud Pública, de Ganadería, Agricultura y Pesca, y de Trabajo y Seguridad Social, el Instituto Nacional de Carnes, cámaras empresariales y gremios de trabajadores de la industria. El grupo tiene un amplio compromiso para responder a las inquietudes de los mercados cárnicos, en especial las del mayor socio comercial, China, único país que estableció suspensiones a las ventas uruguayas. En ese tenor, indicó que las medidas se harán extensivas a otros mercados internacionales y al interno.
Los seis puntos principales del documento son comunicación de los términos correctos, definiciones epidemiológicas, vacío sanitario del establecimiento para prevenir la aparición del brote y evitar suspender una planta, higiene y desinfección total del establecimiento, determinación de la presencia de coronavirus SARS CoV-2 en superficies y reintegro del personal para retomar la actividad.
En la citada conferencia, el ministro Uriarte recordó que por nueve meses no hubo casos de COVID-19 verificados en la cadena de los alimentos, pero que a fines de noviembre se vulneró esa situación, lo que llevó a tomar medidas adicionales. En ese sentido, se alertó respecto del mayor grado de exposición de los trabajadores fuera del ámbito de trabajo, en sociedad, en el transporte o en el contacto social comunitario.
“La mayoría de los casos se dieron donde el contacto social es más común, es decir, comedores, vestuarios o transporte. Por eso, recurrimos a la responsabilidad individual, para tener resultados a nivel de país. Una vez detectadas esas áreas débiles, se elaboró este documento para corregirlos”, expresó.
Reiteró que son estrategias en las que el país basa su postura en el combate a la COVID-19 en la industria cárnica y comunicó que el documento se trasladará a la industria láctea y a la pesquera.