Guichón se movilizó en búsqueda de niño perdido en Paso de los Mellizos

Un pequeño de 4 años perdido motivó la respuesta inmediata de los habitantes de Guichón y alrededores que se volcaron a colaborar en su búsqueda. Cinco horas después, en plena noche y frío, el pequeño fue encontrado sano y salvo a unos cinco kilómetros cerca de una estancia en Paso de los Mellizos. La situación fue incluso seguida por los jefes de Policía de Paysandú y Río Negro, se estudió la utilización del plantel de perros e incluso el ministro del Interior, Jorge Larrañaga, puso un helicóptero a disposición.

CUESTIÓN DE MINUTOS

A la tarde, como en tantas otras ocasiones, Joaquín acompañó a su madre a una recorrida por la zona de la estancia La Favorita, ubicada entre Paso de los Mellizos y Guichón. En un momento se alejó para jugar y se perdió de la vista de la madre –que había bajado del vehículo para mirar una pradera– que comenzó a buscarlo sin resultados. Se dio aviso a la policía y se amplió la búsqueda con personal policial. Además, vecinos de la zona también ayudaron recorriendo el lugar, en el marco de una respuesta inmediata de quienes salieron en vehículos particulares y otros que desde sus hogares iniciaron una campaña virtual con posteos en Facebook.
Temiendo que pudiera haberse accidentado o algún otro desenlace, la búsqueda se tornó intensa conforme pasaban las horas. Eso motivó que la Policía de Río Negro delineara un posible plan de acción, sumándose también personal del Municipio de Guichón.

CAMINÓ CASI 5 Kilómetros

Dos familias de establecimientos vecinos, conocedoras del lugar, se pusieron en marcha. “Nos calzamos, nos pusimos los abrigos y salimos de tope a buscarlo. Íbamos las dos camionetas juntas con los focos y llamándolo por su nombre con la esperanza de encontrarlo. Llegamos a una portera cerrada y al bajarnos para abrirla, apagamos los motores de las camionetas y seguimos llamándolo. En eso escuchamos una voz que nos respondió ‘acá estoy’. Más o menos a unos 150 metros de la portera en el campo El Mirador, y se le veían los championcitos”, comentó Mario Alvarez, uno de los vecinos participantes.
Corrieron hacia donde estaba el pequeño que, lejos de estar asustado, les dijo que tenía frío mientras masticaba chicle. “Estoy comiendo chicle que me dio mi mamá, pero ya está duro”, dijo mientras lo llevaban aupado hacia la camioneta. Una vez en resguardo, lo envolvieron en una manta, le dieron agua y un chicle nuevo.
“Mientras Rolo Noble, su señora y mi señora lo atendían, lo llamé al padre para avisarle que estaba con nosotros. A las 20.50 me quedó grabada la llamada. La verdad que fue una inmensa alegría que todo haya terminado así”, dijo Alvarez.
Mientras esperaban a su padre, Joaquín les contó que tenía frío, porque estuvo casi 5 horas a la intemperie, que “cruzó dos cañadas y que había corrido unas ovejas”.
“Pero por suerte estaba lo más bien sin ningún problema de salud”, concluyó el vecino.