Conversatorio por Día Internacional de la Mujer Afrodescendiente

La actividad se desarrolló de manera presencial en el Espacio Gobbi,aunque con algunas intervenciones a distancia.

“Promoviendo la inclusión de la población afrodescendiente” fue el título de un conversatorio organizado por el Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres) del Ministerio de Desarrollo Social (Mides)) junto a la Secretaría de Género, Generaciones y Derechos Humanos, de la Intendencia Departamental, en el marco del 25 de julio, fecha establecida como el Día Internacional de la Mujer Afrodescendiente. Así se la definió durante el Primer Encuentro de Mujeres Afrolatinas, Afrocaribeñas y de la Diáspora celebrado ese día, en 1992, en Santo Domingo, en reconocimiento al trabajo que realizan mujeres de ascendencia africana en la lucha contra la discriminación racial, el sexismo, la pobreza y la marginación.
Luego de una introducción a cargo de Marisa Acosta, encargada de la oficina municipal, y Fernando Torres, referente del citado instituto, intervino Virginia Aurelia Rodríguez, por la organización Afrofloreciendo, quien destacó la iniciativa de haberlos convocado a participar de esta instancia y planteó el problema de invisibilidad que tiene en Paysandú esta población.

Con plata

“Si bien en diferentes niveles de conversación sobre el racismo, quienes caminamos por acá, quienes somos afrodescendientes, nuestro máximo órgano del cuerpo, que es la piel, nos autoriza ética y moralmente para hablar sobre racismo. Más allá de toda la teoría que tengamos encima o no de toda la capacitación y toda la preparación. Porque el racismo se siente en toda la piel y te cala en lo profundo del alma”, expresó.

Agregó al respecto que “a veces es muy difícil que en la otredad se note o se sienta lo que estamos diciendo. Entonces necesita esa entrega, porque nos roban la vida. Imagínense que si somos invisibles a los ojos de los demás, imposible que nos reconozcan, imposible que entiendan lo que vivimos”.

Rodríguez consideró además que en esta pandemia es el momento propicio para el Estado salde una deuda histórica con la comunidad afrodescendiente. “Tenemos un objetivo claro y específico, y eso tiene que ver con una reparación económica”, planteó. “El momento de la pandemia nos empuja, porque estamos peor. El problema del racismo se arregla con la plata, por la misma que todos trabajamos, por la misma que todos nos movemos y por la misma que no tenemos tiempo para atender a nuestros afectos”, expresó.

Hubo dos intervenciones en video, una de ellas de la activista feminista afrodescendiente Vicenta Camusso y la primera, a modo de apertura de conversatorio, por parte de Johana Martínez, del área de Discriminaciones Múltiples y Agravadas, de Inmujeres.

En el barrio

Finalmente hubo una intervención de Juan Pedro Machado, activista y referente en la lucha por los derechos de la población afrouruguaya, quien planteó que si bien se han logrado avances en lo institucional y en la normativa, todavía cuesta que la gente se apropie de ello.

“Ha ido como haciéndose una construcción bastante importante en algunos espacios como el normativo, por ejemplo, y con cero repercusión en el barrio. Tenemos una ley que se preocupa particularmente por la presentación del racismo, que lo criminaliza, etcétera”, dijo.

“La gente no sabe que existe esa ley. No sabe cómo utilizarla, y en el peor de los casos, nosotros que somos militantes, deberíamos aproximar eso. A veces perdemos el lenguaje de cómo traducir estas normas en el lenguaje del lugar, y hacer que la persona del lugar reclame al responsable, que en este caso sería la Intendencia o el Poder Judicial, o quien fuera”.
Otra inquietud que planteó Machado es que ha habido un retroceso en la captación de datos sobre afrodescendencia en nuestro país. De hecho el mismo viernes, cuando se realizó el coloquio, hubo más temprano una reunión a través de Zoom con representantes del Instituto Nacional de Estadística, donde se trabajó sobre este tema, sin que por el momento se logren avances. “No se incluyó la captación de datos en el año 2020, lo mismo ocurrió en el Mides. Qué importancia tiene eso, tenemos una historia ahí con la gente del instituto porque dijimos que era discriminación, hay toda una pelea ética, ese tema ahora está en la Institución de Derechos Humanos”, comentó.