¿Qué une a Facundo Llambías con Diego Lugano?

La presentación de todo lo bueno que se le viene al piloto sanducero Facundo Llambías ern España tuvo un invitado de lujo: Diego Lugano.
Pero ¿qué une al excapitán de la selección uruguaya de fútbol con el joven piloto sanducero? La respuesta es fácil: las motos, la velocidad, la adrenalina y sobre todo, el país y el sentimiento de ayudar para que un deportista celeste crezca.
Es más: más allá de que sin el enorme talento de Facundo nada sería posible, podría decirse que Lugano tiene que ver con buena parte de lo que le sucede al sanducero, que ingresó al equipo Talent Team Estrella Galicia 0,0, y que correrá el Mundial Junior Moto3.
La historia se remonta a comienzos del presente año. El propio Lugano dijo a EL TELEGRAFO que “el vínculo nació de manera graciosa”.
Es que el excapitán celeste tiene un amigo que corre en moto, tiene un equipo y siempre lo ha invitado a sumarse. “Obviamente que a lo máximo que me subí fue a una Honda 50 cuando tenía 15 años, aquella Honda a pedal. Pero me gusta”, reconoció.
Lugano explicó que “a comienzo de cada año hay un torneo de preparación. En este caso un endurance que hizo Yamaha en Goias. Se corre por equipos, son tres horas, cuatro competidores por equipo, y uno de ellos puede ser un invitado”.
Y aclaró: “puede ser un corredor de verdad o un invitado como yo”.
Lugano aceptó el desafío. Entrenó tres días, y el viernes afrontó las pruebas de tiempo. “Estaban los mejores pilotos de Brasil, América y muchos que venían de Europa”, remarcó.
Lo cierto es que cuando fue a ver en qué lugar había clasificado, la tenía clara: “miré abajo de la tabla, y de los 140 competidores, el peor tiempo era el mío”. Sí: Lugano era el último.
Pero comenzó a repasar la lista. “Empiezo a ver para arriba y veo banderas japonesas, brasileñas, y que en el primer puesto estaba la bandera de Uruguay. Pensé que se habían equivocado, y veo el nombre de Facundo Llambías.
La “Tota” comenzó a preguntar quién era Llambías, le contaron de quién se trataba y pidió conocerlo.
Lugano recuerda como si fuera ayer el momento en el que conoció a Facundo. “Todo tímido, educado y con una vergüenza bárbara de conocerme. Le empecé a preguntar, y resultó que con 15 o 16 años estaba medio solo por el mundo buscando su sueño, viendo si conseguía equipo y estabilidad. Cuando le consulté cómo hacía para mantenerse en este mundo, que es difícil y caro, me dijo que sus viejos se rompían en alma, pero que cada vez era más difícil”, contó.
Facundo también recuerda ese día. “Me llamaban los brasileños para que fuera, y no entendía nada. Era porque Diego quería conocerme. Yo lo conocía de la tele. Nos vimos ese día y ahí empezó todo. Me ha ayudado muchísimo”, dijo el piloto sanducero.
El contacto con Lugano es permanente. “Es una persona que me ayudó muchísimo”, dijo tímidamente Facundo.
Tras conocer la realidad de Facundo, a Lugano le afloró la rebeldía del capitán. “En aquel momento el dije que era un talento bárbaro y que había que ayudarlo para que siguiera creciendo. Y le prometí que iba a mover mis contactos para que lo visualizaran y lo empujaran”, recordó.
Así fue como desde varios ámbitos comenzaron a seguir la carrera de Facundo. “Lo siguieron, fue a hacer pruebas en España y resulta que terminó con los mejores del mundo”, agregó Lugano hasta con orgullo por lo que ha logrado Llambías.
Lugano la tiene clara: “Facu tiene talento, y por eso quedaron tan conformes con él. Y ahora tiene la estabilidad de un contrato para crecer e ir atrás de su sueño”. La “Tota” rebobina y recuerda que “por casualidad lo encontré en una corrida”, como dándole también crédito al destino. “Rescato la educación, el talento, y que es muy querido. Es un clásico ejemplo a seguir por la juventud”, sumó.
Y mientras, el exfutbolista ya prepara su vuelta a la pista. El 10 de enero, en Floripa, volverá a subirse a las dos ruedas como invitado del equipo.
Pero se acuerda que “Facu nos pasaba como si estuviéramos parados. Lo ves con esa timidez y después anda en la curva a 250 por hora y a los codazos con lso rivales. ¡Y yo creía que era peligroso meter un codazo en el área!”.
La “Tota” volverá a disfrutar un rato de la velocidad y la adrenalina. Pero, ¿cómo es Lugano sobre las dos ruedas? Facundo la tiene clara y define, entre sonrisas, que “es rápido pero tiene que aprender”.