“En el interior del país –salvo Canelones, donde realmente no aparece claro– hemos encontrado un apabullante apoyo al ‘No’. En el caso de Montevideo apreciamos una elección previsible, pero como las últimas ediciones pautan, no tengo que duda que el celeste hará una buena elección. Hay muchos frenteamplistas que votarán ‘No’, especialmente por las certezas en el tema seguridad que da la LUC, que no es una promesa, sino un hecho real y concreto que se aprecia desde hace 20 meses”, dijo el senador Sebastián Da Silva, del Partido Nacional, quien llegó a Paysandú completando 22.000 kilómetros recorridos desde febrero, por todo el país, defendiendo la vigencia de la LUC.
“Con sinceridad en esta recorrida por el país no he encontrado un sanducero, un maragato, un arrachán, un salteño a quien le haya perjudicado la ley. Sí a muchos que los ha beneficiado. Pero lo realmente destacable es que los promotores del ‘Sí’ tampoco han podido encontrar a nadie que la ley los haya perjudicado. Mejor argumento en defensa de la ley, en su permanencia, es eso. Tenemos veinte meses de aplicación de una ley que solo ha dado beneficios”, agregó.
Opinó luego que el referéndum es “un instrumento de democracia directa binaria como por ejemplo a favor o en contra de la pena de muerte. Pero no para esto se ha hecho. Creo que después de esto nadie más va a volver a usar un referéndum para promover una derogación tan extensa, porque resulta prácticamente imposible que la ciudadanía pueda conocer profundamente cada uno de los artículos que el Frente Amplio pretende derogar”.
“De hecho estamos viendo esta última semana que hay un grupo de personas que no le interesa el tema y que definirá su voto considerando la confianza que le genera los defensores del ‘No’ o los promotores del ‘Sí’”.
Sebastián Da Silva aseguró asimismo que “la realidad es lo más poderoso. Pasó con la portabilidad numérica. Desa-pareció el ‘Chifle’ (Gabriel) Molina después de anunciar que Antel se iba a fundir, pero luego la realidad demostró que Antel se fortaleció. Si se elige otro tema, se apreciará que ha pasado lo mismo”.
Dijo más adelante que “no se qué estaban pensando cuando decidieron promover la anulación de un abanico tan grande de temas. El presidente del Frente Amplio, Fernando Pereira, tuvo la desfachatez de decir que en este país hay una justicia para ricos y una para pobres, lo que es absolutamente falso. Pero además cuestionan lo fiscal, la justicia, el defensor público. Este es el mismo Frente Amplio que inauguró una etapa muy miserable en la vida política del país, cuando hizo un caceroleo en el comienzo de la pandemia; después pidieron un encierro total; más adelante cuestionaron la capacidad de vacunación. Y ahora, en la etapa más miserable, se apoyan en la mentira”.
