El Consejo de Seguridad discutirá la imposición del burka en Afganistán

Naciones Unidas, 10 (EFE)
El Consejo de Seguridad de la ONU se reunirá mañana jueves para discutir las últimas restricciones impuestas por los talibanes a las mujeres de Afganistán, incluida la decisión de obligar a usar el burka en lugares públicos.
Así lo anunció ayer Noruega, el país que solicitó este encuentro, que tendrá lugar a puerta cerrada y en el que está previsto que participe la enviada de Naciones Unidas para Afganistán, Deborah Lyons.

Aunque habitualmente el Consejo de Seguridad se centra en cuestiones de paz y seguridad, no será la primera vez que trate la situación de las mujeres y niñas en el país asiático desde que los talibanes recuperaron el poder.
Por ejemplo, el pasado marzo el máximo órgano de decisión de la ONU ya discutió la decisión de las autoridades de Kabul de no permitir el regreso a las escuelas de todas las niñas, incumpliendo una promesa que habían hecho previamente.

En esta ocasión, la reunión llega después de que el pasado sábado los talibanes decretasen el uso del burka en todos los lugares públicos, una medida que se suma a una larga lista de restricciones para las mujeres que incluyen una orden para salir de casa solo en caso de necesidad.
A todo esto, se trata de una orden de cubrirse de pies a cabeza en un país en el que “el 99% de las mujeres ya usan hiyab”, según los propios fundamentalistas, aunque el velo islámico que cubre el cabello y deja a descubierto el rostro no parece bastante para los nuevos gobernantes de Afganistán.
“Durante el anterior Gobierno (tras el derrocamiento en 2001 de los islamistas) el hiyab era también necesario pero lo hacíamos según el islam y no el código específico de los talibanes”, que exigen cubrir el rostro, explicó a EFE la activista afgana Zarlasht Mayar.
“Los talibanes mismos han dicho que el 99% de las mujeres afganas utilizan el hiyab, así que ¿por qué quieren restringir a las mujeres más y más? Son extremistas”, dijo.

La joven afgana Sonia Bahaduri lamentó también que “como mujer musulmana estoy obligada a llevar un hiyab y así lo hago, pero no me voy a meter en una bolsa”.

En respuesta, la misión de la ONU en Afganistán (Unama) ya ha adelantado que buscaría reunirse con los líderes talibanes para abordar ese anuncio que le había dejado “profundamente preocupada”.
Según la Unama, esta y otras restricciones impuestas a las mujeres contradicen las promesas de protección de los derechos humanos hechas por el grupo fundamentalista en los últimos años.