Lograr mayor supervivencia de corderos en una majada con muy alto porcentaje de melliceras

Indudablemente que cualquier productor procura salvar la mayor cantidad de corderos, pero en “Cerro Del Bombero”, establecimiento de la sucesión María del Carmen De León que administra el ingeniero agrónomo Juan Bazzano De León, el hecho de que 1.300 ovejas Merino Australiano son melliceras y prácticamente tenían hijo único por circunstancias de clima y predadores, llevó a invertir en instalaciones y también personal, para aumentar la productividad, y también la rentabilidad.
A partir del año pasado “y por la gran cantidad de mellizos que venimos teniendo en la majada y por las pérdidas de años anteriores, decidimos implementar estructuras doble propósito, pero con el objetivo fundamental de salvar la mayor cantidad de corderos posibles teniendo en cuenta el valor que tienen para nosotros esos animales”, dijo a EL TELEGRAFO, el ingeniero Bazzano.
El titular del establecimiento ubicado en la zona de Merinos, fue el primer anfitrión del ciclo de tres jornadas realizadas esta semana en predios de productores de Paysandú, Tacuarembó y Salto, organizadas por el Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL), Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA), Facultad de Veterinaria y Facultad de Agronomía.

Bazzano indicó que la construcción “arranca desde un contenedor que básicamente se utiliza para guardar la ración que se le brinda a las ovejas que están pariendo en el entorno de la casa”. Luego se armó una estructura como un galpón (el contenedor quedó en el medio), “porque después de ese mes y medio de parición, se utiliza con otros fines, como puede ser bretes, acopio de fardos o guardar maquinaria”.
Tras la estructura de chapas y cerchas, con lonas a sus costados, se armaron los corrales con Farmaquip, haciendo boxes individuales para las ovejas, agregando este año otra estructura que se utiliza para tener allí mayor cantidad de animales, y no de forma individual.

Recordó que en el establecimiento “había muy poca supervivencia de mellizos, lo que nos afectaba en el porcentaje final de señalada. El objetivo y ya el año pasado comenzamos a lograrlo, es obtener la mayor supervivencia de esos animales”, dijo el productor, quien agregó que tener la majada pariendo en las cercanías del establecimiento, “también permite que los predadores no actúen”.

Entiende que la cercanía a la casa de las instalaciones es muy importante. “Es muy difícil en un temporal, salir a cuidar una oveja, sea por la inclemencia del clima, y tener todo acá es fundamental para el personal y nosotros, porque tenemos todo a mano”. De todas maneras, es consciente que tener toda la majada concentrada en un lugar puede ocasionar un problema sanitario, pero es un mal menor comparado con las ventajas que tiene de tener a los animales comiendo acá”.
En el primer año de utilizar las instalaciones “obtuvimos una mejora del 30% de aumento de corderos señalados”, enfatizó. Acotó que ese 20% de pérdidas “es producto de la inexperiencia al ser la primera vez, tanto en el manejo como en algunos aspectos de la infraestructura, que este año pretendemos solucionar y así mejorarlo”.

Es claro que cerca de 1.300 ovejas pariendo no logran ingresar a esa infraestructura. El productor aclaró que “desde hace muchos años que se insemina –sin ser las borregas que se encarneran–, todos los animales están identificados por fecha de servicio, y en el momento de la ecografía los identificamos con sunchos de colores en las caravanas para saber la fecha probable de parto, y de esta manera agrupamos por semana los animales que van a parir”.
De esta manera, las ovejas que van a parir a partir de la semana del 8 de agosto, serán las primeras y estarán cerca de la casa y las instalaciones preparadas para el parto. Se les brindará todos los días ración de lupino. A los días de paridas saldrán al campo e ingresará por otra semana una nueva camada de ovejas a parir, y así sucesivamente por espacio de un poco más de un mes.

Para este año, Maussy Gutiérrez y Ronald Sirio, dos jóvenes estudiantes trabajarán en la parición durante el período de nacimiento de los corderos, lo que para Bazzano será muy importante “ya que podrán observar todo lo que ocurra para salvar más corderos”.
Agregó que en el caso de las ovejas únicas (un solo cordero), se pretende implementar este año en el campo un reparo similar para los corderos mellizos que ya tienen 3 a 4 días, “y como esas ovejas ya saben comer ración, serán traídas a un lugar de suelo firme y colocar lonas (no como parideras), sino como reparos, teniendo en cuenta que el temporal de Santa Rosa puede generar algunos inconvenientes”.

Esquila preparto

En Cerro del Bombero ya se esquilaron todas las ovejas y algunos capones para vender y carneros que no fueron comercializados el año pasado, saldrán a venta. Siendo todas categorías grandes, “nos dio algo más de 5 kilos de promedio, lo que nos deja sumamente conformes”, explica Bazzano De León.
El micronaje obtenido el año pasado fue entre 17,3 micras y 18,3, y todavía se desconoce el de este año, al ser enviado recientemente al laboratorio. “Este año no separamos lotes, ya que hicimos un lote único porque se nos complicaba para el manejo en forma diferencial”.
Bazzano expresó que la idea “es seguir el rumbo marcado hace 16 años, disminuyendo el diámetro de la fibra que se obtiene, no perdiendo el peso de vellón y el tamaño del animal, además de mejorar la calidad”.

Precisó que el año pasado todas a las categorías de reposición de hembras “se les hizo peso de vellón, y las borregas que no tuvieran 3 kilos de lana no las utilizamos para servir y salieron del sistema”.
Sobre la carne ovina comentó que fueron esquilados en estos días 600 capones “que se van a la venta y es una parte importante del sistema. Es una parte del sistema ya armada. Le sacamos la lana como borregos y capones y después se comercializan. Solo están a campo natural y se venden con 50 kilos”, dijo el productor.

Inversión rentable

Ante las consultas de asistentes a la jornada por la importante inversión que realiza, no solamente en la infraestructura sino en el costo de la ración de lupino para la alimentación de las ovejas, Bazzano señaló que “todo lo que sea válido para aumentar la rentabilidad del negocio no debe ser rechazado”.
“Lograr que 1.300 ovejas paran mellizos es sinónimo de genética, al igual que la lana obtenida sea de 17,3 micras, los corderos nacidos darán en promedio 16 micras en su primer vellón. Se invierte para ganar más en lana y carne y ya lo logramos el año pasado, así que mejorando en donde se constataron problemas, permitirá este año seguir aumentando las ganancias, sin perder en el bienestar animal y del personal que trabaja en Cerro del Bombero”, finalizó el productor.