Solicitada: Decepción popular

Quiero escribir esta nota Solicitada con la intención de que la gente que la lea entienda mi gran preocupación.
Soy una persona que no sólo piensa en su situación personal sino también en la de los demás.
Tengo un comercio que, pese a la crisis, trabaja bien, pero me pasa algo; converso con la gente, ando en la calle, recibo a cientos de personas que por razones comerciales tienen que informarme de qué viven, cómo viven, cuáles son sus proyectos y la verdad, encuentro que la mayoría de la gente está decepcionada por todo lo que pasa en este país.
Algunos con grandes deudas, imposibles de pagar, sueldos y jubilaciones mínimas que rondan los 15 a 20 mil pesos. Hay algunos que ganan un poco más, tienen otros compromisos pero todos ven lo mismo que yo, un futuro muy complicado para un país que sigue sin rumbo.

A este gobierno le queda muy poco tiempo, pero los políticos que tenemos siempre gobernaron para un Uruguay que no existe, con sueldos que rondan los 500.000 pesos, teniendo el privilegio de trabajar lo mínimo durante el año, pudiendo, ellos sí, viajar adonde quieran por el mundo, gastando fortunas pero sin dejar algo positivo para nuestro paisito.
Así no hay pueblo que aguante. Tenemos que bancar a 350.000 empleados públicos con muy buenos sueldos que trabajan muy poco.

Muchos de ellos por ejemplo, en el mes de abril tendrían que ganar un 25% menos del sueldo, porque de las cuatro semanas van sólo tres.
Todos son iguales. Parece que ser político es destacarse por no hacer nada bueno para la gente. Hablan mucho, prometen muchas cosas durante la campaña para las elecciones y después parece que les viene amnesia. Se olvidan de todo y hacen lo de siempre, se pelean continuamente, hasta sacan para ventilar al aire cosas de sus vidas privadas del pasado y mientras tanto la gente lucha día a día para sobrevivir.

Para el uruguayo de a pie, comer todos los días es un milagro. ¿Cuánto necesita por día una familia tipo de 4 personas para llevar un plato de comida a la mesa?, sin contar la luz, el agua, el gas, el transporte, sea en ómnibus o vehículo propio.
Todos los días suben un poco más los precios de la canasta familiar.

Ahora dicen que es por la seca, pero siempre que vamos al almacén o a la carnicería de un día para otro los precios vienen subiendo. ¿Dónde está el control del gobierno?
Se dice que nuestro presidente está preocupado por la suba de precios, ¿qué espera para hacer algo?, ¿a quién le tiene que pedir permiso para moverse?
No sean malos. Diga que tenemos a Colón, donde mucha gente come y vive gracias a que puede comprar todo cruzando el puente internacional, haciendo horas de cola pero con la satisfacción de poder sobrevivir, porque nuestro país es muy caro y la plata no alcanza para llegar a fin de mes.

Se vienen tiempos muy difíciles. Sólo mirando nuestro vecino, Argentina, nos damos cuenta qué mal puede hacerle al país el sistema político, donde el más corrupto quiere gobernar para robar escudándose en el discurso que dice que lo que hace es para “salvar al pueblo de los más ricos”. No tienen dignidad ni vergüenza.

¿Qué pueden hacer de bueno para la gente? Funden un país teniendo la riqueza más grande del mundo, petróleo, oro, alimentos, con 40 millones de habitantes.
Aquí somos un pañuelo, con 3 millones de habitantes, donde trabaja 1 millón y los demás viven de los aportes que hace el laburante, sea patrón o empleado.
Ojo que cada vez somos menos y tenemos cada día más responsabilidades y obligaciones que asumir e impuestos que pagar.
Esa gente que hace militancia política, que sale a caminar y pasa casa por casa queriendo convencer a la gente de las buenas cosas que van hacer sus candidatos, son admirables, ¡qué voluntad y convencimiento tienen!

¿Hasta cuándo la gente no se va a dar cuenta que esta casta política que tenemos y que quiere llegar al gobierno es la misma que estuvo gobernando este país y lo ha dejado en la lona? Blancos, colorados y frenteamplistas, hace muchos años vienen haciendo muy mal las cosas, han gestionado mal.
A veces han estado en organismos públicos y se han tomado atribuciones y malgastado el dinero de sus “clientes”. Hay intendentes que no han hecho una buena gestión y hoy quieren ser presidentes y prometer que van hacer las cosas bien.

Por favor, aquí sólo nos puede salvar que venga gente nueva, que sean profesionales de alto nivel, que conozcan el mundo, que sean número uno a nivel universitario en temas de economía nacional e internacional, que sea alguien que nunca haya incursionado en ningún partido político y que no tenga ningún compromiso con nadie, excepto con el pueblo.
Eso sería un paso importante para este país para que volvamos a creer en el sistema político que hoy deja mucho que desear. Sólo así nos podrá ir mejor.  Ángel