Los alumnos de la escuela 20 de Arbolito, Dionisia Terza, homenajearon “en un día lluvioso, con mate, chocolate para los chicos y tortas fritas”, como contó su maestra directora Gabriela Bidebirregain, a Esteban Meirelles “a quien se le denomina ahora el Gran Campeón del Pueblo” por sus recientes triunfos en las Criollas de El Prado con su tropilla Los Diablos, integrada por unos 15 caballos. “Obtuvo no solamente la Copa Mayor por ser la tropilla que más puntos logró en todo el campeonato, sino que además recibió el premio por tener las mejores montas”, relató Bidebirregain.
Meirelles concurrió a la escuela cuyos alumnos “habían trabajado los días previos en todo lo que es el vocabulario específico, lo comunicacional, la oralidad, la elaboración del texto. Luego le hicimos una entrevista y Meireles contó muchas cosas interesantes”.
Los niños también “quisieron hacer una cartelera con algunas de las fotos que Meireles nos había enviado y otra con imágenes de televisión cuando se le entregan los premios. También algunas imágenes de lo que fue todo el trayecto de la tropilla, desde que salió del pueblo hasta llegar al Prado. Tuvo que superar algunos incidentes como el cruce de arroyos crecidos. Contó además lo que pasó cuando llegó al Prado, el cuidado de los animales, el inicial estrés y cómo se fueron habituando al espacio”.
La maestra directora Gabriela Biderregain aseguró que “fue una linda charla que dejó en los pequeños una enseñanza, al conocer todo ese esfuerzo, tesón y garra, que posteriormente dio como consecuencia la obtención de tan buenos logros. En realidad, eso quizás sea lo más trascendente, es lo mismo que sucede en la vida de cada una de las personas. Porque todo aquello en que uno le pone voluntad y esfuerzo podrá llevarlo a buen puerto”.
En la escuela le entregaron a Esteban Meirelles un presente y cada alumno una carta con una dedicatoria personal. “Creo que es una linda manera de que la comunidad rescate estos valores que surgen en personas que son del pueblo, que se integran con gente de la zona. Seguramente, en algún momento, quienes hoy son niños, podrán ser testigos en forma presencial de estos hechos”.
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