
El sindicato de la construcción y anexos (Sunca) realizó ayer un paro parcial de 9 a 13 horas por el fallecimiento de dos trabajadores, uno de 46 años y otro de 66, ocurridos en enero y comienzos de abril, respectivamente. La medida no se efectuó en enero porque la causa de muerte no se supo hasta días pasados, luego de un informe forense que confirmó la inhalación de monóxido de carbono como causa mortal.
En el segundo accidente, el trabajador falleció en el acto a causa de la caída de una carga de planchas de mármol desde un camión que maniobraba marcha atrás. Desde entonces, el sindicato reunió información para esclarecer la situación. “No quedando dudas que los trabajadores pertenecían a la industria de la construcción, el Sunca determina la resolución de la medida de paro”, señala el comunicado.
Reclaman una fiscalía
El presidente de la departametnal del Sunca, Mathías Machuca, señaló a EL TELEGRAFO que “lamentablemente realizamos otro paro porque las características de nuestras medidas son por accidentes laborales y tienen un significado especial. No paramos solamente en memoria de estos compañeros, sino para preguntar cuántas muertes más hacen falta. Esta frase no es un eslógan de campaña, sino el reclamo para la creación de una fiscalía que investigue los accidentes laborales”.
Explicó que “por poner un ejemplo solamente para dimensionar el problema: si un trabajador carnea una oveja, hay una fiscalía que investiga y formaliza. Pero si ese mismo trabajador tiene un accidente laboral y muere, no hay una fiscalía que atienda su caso”.
Según el dirigente, “las normativas vigentes como la ley de responsabilidad penal empresarial (Ley 19.196 de 2014) y de seguridad e higiene, aún son insuficientes. Pero no le cargamos la culpa a nadie. Un accidente ocurre por una acumulación de factores”.
Machuca argumentó que “en el Ministerio de Trabajo hacen falta controles más estrictos y que se cumpla el rol de contralor. Desde el sindicato hemos detectado obras que emplean a extranjeros, pero cuando hacemos la denuncia en el ministerio nos piden el nombre de la empresa. De lo contrario, no nos aceptan la denuncia y a veces las empresas no nos dejan ingresar a las obras para hablar con los trabajadores”.
Reconoció que “muchas veces no sabemos el nombre de la empresa y a veces no tiene ni el número de obra declarada ante el BPS. Eso pasa hoy en los barrios nuevos que se construyen en Paysandú, donde vemos a trabajadores a cargo de las obras”.
En la mañana de ayer, la dirigencia del Sunca participó en una audiencia en la oficina local del Ministerio de Trabajo, “a raíz de la denuncia de un trabajador de una empresa local. Aprovechamos esa instancia para pedir una reunión con el ministerio y discutir estas cosas. Entendemos que a veces juega la necesidad de hacerlo por debajo del salario, pero también lo hacen en condiciones precarias de seguridad e higiene. Y al sindicato no le compete hacer esos controles, sino a otras organizaciones como las cámaras empresariales”.
Sin embargo, agregó que “las cámaras sólo se dan cuenta de un problema cuando existe competencia desleal. Y esa discusión también hay que darla”. Machuca enfatizó en la necesidad de “integrar una mesa de diálogo con el BPS y la Intendencia, donde hemos pedido una reunión con el intendente Nicolás Olivera hace 8 meses y aún no se ha dado”.