En el marco de la jornada anual de pasturas realizada en la Estación Experimental “Doctor Mario A. Cassinoni” (Eemac) de Facultad de Agronomía en Paysandú, y denominada “Sin pastoreo no hay pasturas rentables”, se presentó el efecto de la carga animal sobre la producción invierno primaveral de una pastura de dos mezclas forrajeras. El trabajo realizado por los ingenieros agrónomos Pablo Boggiano y Ramiro Zanoniani junto a Javier García y tesistas, tenía el objetivo de evaluar la producción estacional anual de forraje, persistencia y producción animal de dos pasturas, mezclas de especies perennes bajo diferentes cargas.
De acuerdo al trabajo realizado, se comenzó a pastorear el 6 de junio de 2017 hasta la fecha. El primer año se efectuó mezcla de Festuca y Alfalfa (6.200 kilos por hectárea Masa Seca) superior en 25% a las Raigrás y Rojo; 22% en segundo año (9.700 kilos por hectárea Masa Seca) y 50% en el tercer año. Similar tendencia en producción de carne, primer año 540 versus 470 kilos por hectárea, segundo año 710 versus 590 kilos por hectárea; y actualmente 380 versus 250 kilos por hectárea.
Los agrónomos sostienen que existen diferencias en la persistencia y producción de forraje y carne de la pastura según la mezcla forrajera utilizada; la carga animal condiciona la productividad de la pastura y puede determinar variaciones en la producción de forraje y carne; los efectos combinados de la mezcla y carga determinan efectos residuales diferentes que condicionan la producción de los cultivos posteriores de la rotación.
MÉTODOS DE DISTRIBUCIÓN
También durante la jornada, se presentaron los efectos de diferentes métodos de distribución espacial de semillas en la implantación producción y persistencia de pasturas sembradas.
El objetivo, es estudiar el efecto de la distribución espacial de la semilla (métodos de siembra) tiene la determinación de diferentes grados de utilización del ambiente y por lo tanto, aumento en la implantación, producción y persistencia de las pasturas sembradas. En cuanto a las hipótesis manejadas en la investigación, se sostiene que hay diferencia en la implantación, producción y sobrevivencia estival según él método de siembra, y que la misma puede variar según la mezcla sembrada. Además, existe un efecto compensatorio entre el número y peso de plantas que determina un menor impacto de los diferentes métodos de siembra independientemente de las mezclas utilizadas.
Respecto a los resultados, se explica que dentro de los componentes de las mezclas para las gramíneas, no se encontraron diferencias estadísticas en el porcentaje de implantación, teniendo en cuenta los métodos de siembra utilizado. Por otra parte, presentaron que la producción en kilos por hectárea de biomasa disponible de los distintos componentes de las mezclas, así como el peso de los macollos (gramínea y tallos), leguminosas, medidas a los 90 días por siembra, si bien la producción de las gramíneas presentó diferencias significativas, no fue así para la producción de las leguminosas utilizadas en las mezclas.
SISTEMAS DE ROTACIÓN
También en el marco de la jornada, se habló sobre el estudio de sistemas de rotación pastura-agricultura. En los antecedentes presentados, se explicó que los sistemas integrados agricultura-ganadería, son una estrategia potencial para optimizar el uso del suelo incrementando la producción global del sistema y reduciendo riesgos económicos a través de la diversificación de rubros.
Sin embargo, resulta en grandes desafíos para productores, combinar en un área única las interacciones entre el manejo animal y la producción agrícola. Este estudio se propone la medición de rendimientos físicos y económicos de cuatro alternativas en la duración de la fase pasturas y la implicancia en el cultivo de soja posterior.
En el experimento, quedó en claro qué se pretende en cuanto a los objetivos, evaluar la producción de cuatro alternativas en el uso del suelo, combinando el uso de raigrás de diferente ciclo, la inclusión de una leguminosa bienal de alta producción inicial y condicionantes en el rendimiento de soja.
En los objetivos específicos, se habla de evaluación de dos años en la producción de dos raigrases anuales de diferente largo de ciclo y su interacción con el rendimiento de soja. Evaluar el efecto en la producción de carne y rendimiento del cultivo en la inclusión de una leguminosa bienal; y evaluar la producción de forraje en una pastura corta, compuesta por raigrás anual y trébol rojo.
