El Municipio de Porvenir reclama a la Intendencia de Paysandú 99.450 pesos por pago de viáticos que ese municipio entiende fueron devengados en el mes de noviembre de 2020. Hasta ahora el Ejecutivo departamental no ha autorizado ese pago.
Empero, el intendente Nicolás Olivera explicó “el sistema que se aplica de modo general para la certificación de viáticos”, utilizado en los siete municipios.
Tras asumir el 26 de noviembre, “a los pocos días, llegaron las planillas de los siete municipios con la petición de pago de viáticos. Como se sabe, el viático es una partida que se paga a cada funcionario cuando cumple dos variables: trabaja fuera de su lugar habitual de actividad y la distancia de ese lugar que lo hace. Cuando se yuxtaponen esas dos cosas de tiempo y distancia, corresponde pagar viático”, dijo Olivera a EL TELEGRAFO.
“Entonces -indicó- con las siete planillas de los municipios que tienen nombre del funcionario, la comisión del trabajo encomendado, la distancia que debió recorrer, el horario en que estuvo fuera de su lugar habitual de trabajo, y el vehículo que se utilizó para la tarea”.
Tras recibir las planillas, “lo que se hizo fue cotejar con el Sisconve (Sistema de Control Vehicular), que tiene geo referenciado a cada vehículo. Así se puede contrastar la información que nos fuera enviada desde los municipios con la que proporciona el sistema. Entonces aparecieron tres situaciones. Una en la que la información proporcionada y la del Sisconve coincidían, y correspondía pagar; una segunda en la que la información que se nos entregó no coincidía y por lo tanto no correspondía pagar; y la tercera, situaciones en las que el GPS no brindaba información por falta de señal en algunas partes del interior del departamento”.
En una primera instancia “dimos instrucciones para que los informes retornaran a los municipios, con el pedido de que se corrigieran aquellas situaciones en las que surgiera información errónea. Por caso, cuando se pedía el pago por trabajo supuestamente realizado, pero en la línea temporal y en la de distancia no era correcto, porque el GPS indicaba que ese vehículo estaba en otro lugar; no donde se había solicitado un trabajo”.
El intendente subrayó que “de los siete municipios, seis ajustaron sus planillas. El único que devolvió la planilla sin cambios -y tenía errores- fue el de Porvenir. Cuando se le informó que tenía que ajustar lo enviado, se insistió que era lo que él creía que se debía pagar. Pero había vehículos que un determinado día y hora no habían hecho el recorrido reclamado para viáticos a ciertos funcionarios”.
Desde la Intendencia se le informó al Municipio de Porvenir que “hasta no ajustar su planilla a la realidad, no se iban a pagar viáticos. Hace pocos días envió otra planilla, en la que se mantenían algunos errores”. Ante eso, el Ejecutivo tomó la determinación de “resolver a qué funcionarios pagar viáticos porque contamos con las herramientas tecnológicas que brinda el Sisconve. Se pagarán los viáticos que correspondan. Los que no, no”.
AYENDE PIDE QUE VUELVAN A CONTRATAR A DISCAPACITADO
“Entre los contratos que no han sido renovados por la Intendencia de Paysandú, hay uno en particular en el Municipio de Porvenir que realmente me llena de tristeza, porque me parece que se trata de un abuso, y precisamente uno a los más desposeídos”, dijo a EL TELEGRAFO el alcalde Ramiro Ayende.
“No se trata de una denuncia porque bueno, es cierto que cuando un contrato termina, es así, cae. Ahora bien, si alguna vez la ciudadanía me honrara con el cargo de intendente, uno de los grupos que más defendería sería a las personas con discapacidad. Por ley (la 19.691) el 4% de los contratos deben ser reservados para personas que tienen diferente tipo de incapacidad. Pero resulta que el intendente Nicolás Olivera no piensa lo mismo”, agregó.
Indicó que “W.A.B.C., a quien le falta una pierna y está obviamente protegido por la ley de discapacidad, fue contratado en 2015 –y hasta 2020– por el exintendente Guillermo Caraballo, bajo el régimen de contratación pública para atender el Telecentro en el Municipio de Porvenir”, explicó Ayende.
“Este municipio hizo hincapié en este contrato y en la necesidad de que esta persona mantuviera su trabajo; es un buen funcionario, es una buena persona y creo que lo ampara la ley para que mantenga un empleo digno”, subrayó el Alcalde de Porvenir. “Pero –agregó– no fuimos escuchados. Lo peor es que su contrato cayó mientras estaba en licencia médica”.
Ramiro Ayende culminó indicando que “ahora espero que el intendente Nicolás Olivera sepa por EL TELEGRAFO lo que realmente pasa, porque probablemente con tantos asuntos que atender no conoce este caso, y actúe en consecuencia, en beneficio de un funcionario de muy buenas cualidades para el cargo, el que ejerce por la ley de discapacidad”.
