La rompió. Como siempre, pero ahora en otro escenario, en el del Mundial U20. Manuela Rotundo se quedó con la medalla de bronce en la prueba del lanzamiento con jabalina en el Pascual Guerrero de Cali, rompiendo todos los esquemas. Pero siendo fiel a su estilo. Esa flaca que entrena con tranquilidad, sin lucirse demasiado, se transforma en un animal competitivo cada vez que sale a escena.
Por esto ha roto todos los récords, y hasta se dio el gusto de establecer el nacional absoluto en medio de un Iberoamericano, tras su primera gran experiencia viajando en avión y entre mayores.
Por eso podía esperarse lo de anoche en Colombia: la medalla de bronce. El día antes, con jabalina ajena dado que 500 dólares evitaron que pudiera viajar con su elemento, le metió el pecho a las balas y terminó sorprendiendo otra vez.
Ayer, en la final, tenía tres lanzamientos para definir su futuro. Metió un 52,96 metros en el primero, 50,98 en el segundo y 53,20 metros en el tercero, lo que le permitió seguir peleando por una medalla y tener tres lanzamientos más junto a otras ocho de las 12 finalistas.
En los siguientes, fue creciendo. Primero lanzó 49,43 metros, en el segundo llegó a los 53,77, y en el tercero selló su lugar en el podio con un 55,11, muy cerca del 55,81 con el que en el Iberoamericano de España batió el récord nacional absoluto.
Manuela Rotundo la rompió toda. Hizo historia cosechando la primera medalla mundialista de la categoría para nuestro país.
La serbia Adriana Vilagos se quedó con el oro con 63,52 metros, la colombiana Valentina Barrios logró la plata con 57,84, y Rotundo se colgó el histórico bronce celeste con 55,11 metros, que sirve para reafirmar toda la expectativa que se centra en una atleta que ya dejó de ser promesa: se codeó con las mejores del mundo y de la mejor manera. Ver reel
