Plan de protección de incendios forestales detectó más de 600 focos y actuó en 43; sistema combina aviones y cámaras

Captura de la toma de una cámara en la que la inteligencia artificial detectó la presencia de humo y generó un alerta automático.

A partir del enorme incendio forestal que se produjo en el cambio de año entre 2021 y 2022, que consumió miles de hectáreas en la zona, los productores forestales hicieron importantes mejoras en el sistema de protección, con incorporación de tecnología que facilita la velocidad de respuesta. En particular en el Litoral el monitoreo se realiza con una red de cámaras de alta definición dotadas de inteligencia artificial.

Hugo Mastropierro, subgerente de silvicultura y referente en incendios forestales de Montes del Plata, y Marina Flores, responsable de sustentabilidad y comunicaciones, comentaron los pormenores del sistema que se implementó este año.
El Plan, dijo Mastropierro, se basa en en cuatro pilares: “la prevención es el primero de ellos, el segundo es la detección y por otra parte también el ataque rápido, la eficiencia en la respuesta. El cuarto es la organización, que no es menos importante”.

En cuanto a la prevención, hubo una fuerte inversión en la capacitación de personal, lo que también suma al pilar cuatro, indicó. También se trabajó mucho en los cortafuegos. “Durante el año se capacitaron más de 400 personas, invertimos 6.500 horas de formación. Y se hicieron 15.000 kilómetros de mantenimiento de cortafuegos, que para hacerse una idea es como ir a Estados Unidos en auto, más o menos”. Estos datos corresponden a acciones que Montes del Plata realizó en los predios donde tiene forestación, que se distribuyen en 13 departamentos.

DETECCIÓN

Pero quizás en lo que más se mejoró de un año a otro es en la detección y en la respuesta rápida y son pilares en los que se trabaja en conjunto con la Sociedad de Productores Forestales. “Hay dos sistemas de detección básicos, llamémosle, y hay otros accesorios”, dijo Mastropierro. Uno de los sistemas de detección es conocido, porque se viene realizando desde hace años, y consiste en el patrullaje aéreo con aviones que realizan rutas de vuelo que cubre “prácticamente el resto del país a excepción del Litoral”. Y es que en esta zona es que viene probando un sistema novedoso –al menos para Uruguay– de videovigilancia “que más o menos va desde Chapicuy hasta Andresito y vigila todo lo que es el área forestal en esa superficie. Son quince cámaras que funcionan en una central de monitoreo que está en Durazno”. Esa central controla tanto las cámaras como las patrullas aéreas y es desde allí que también se coordina la respuesta inmediata, en principio con aviones y helicópteros. “Al ser la central de monitoreo y despacho, cuando se detecta algo inmediatamente está en condiciones, porque son dos personas que están una al lado de la otra, de ponerse en contacto con los medios aéreos en primera instancia, que son los que llegan más rápido, y despacharlos al lugar”, señaló el referente.

TECNOLOGÍA

Las cámaras, 12 de ellas ubicadas a entre 60 y 65 metros de altura –las otras tres están a 30 metros, en antiguas torres de vigilancia– trabajan con inteligencia artificial. “Lo que hacen es reconocer humo y cuando detectan un humo pasan un mensaje, le salta una alerta al observador, que está atendiendo las quince a la vez, pero tampoco es capaz de estar a 360 grados en las quince cámaras.

El delay (retraso) que puede haber entre la detección y que el observador las pueda confirmar son dos minutos, que más o menos es también lo que tarda la cámara en dar una vuelta tomando fotos”, indicó. El banco de imágenes que va generando la cámara es el que utiliza la inteligencia artificial para comparar una imagen “normal” contra una imagen con humo, describió. A partir de una alerta el observador toma el control de la cámara y puede dar zoom “hasta 150 veces, puede ver muy bien una imagen muy cercana a 10, 12 kilómetros. Estas cámaras cubren de forma segura 15 kilómetros, pero en esta primera experiencia de uso nos ha permitido identificar focos a 40, 50 kilómetros también.

El sistema tiene varios años de implementado por ejemplo en Chile. Los incendios en el Litoral de los últimos 60 días fueron detectados por estas cámaras. Y los tiempos de respuesta sorprenden. Los de los últimos días en el basurero de Piedras Coloradas o en el de Algorta, se detectaron en 2 o 3 minutos y los medios aéreos llegaron en 15 minutos, “y pese a eso dio trabajo, se estuvo un día entero trabajando, prácticamente”, comentó Mastropierro.

DATOS

Otra de las novedades fue la instrumentación de un software que permite gestionar todos los recursos en tiempo real para mejorar los tiempos de respuesta. La interfaz es un mapa en el que se presentan todos los recursos: los aviones que están en el aire haciendo la ruta, los medios aéreos de respuesta –tres helicópteros y dos aviones– con sus brigadas, la ubicación de los vehículos en los que se mueven los supervisores de todos los predios, las 20 pistas de aterrizaje donde hay puntos de abastecimiento de agua, con indicación de radios por tiempos de vuelo. Los supervisores además reciben automáticamente un mensaje en el que les indica el lugar del incendio (sea en un predio propio o lindero) y la información para llegar, que se puede abrir en aplicaciones como Maps o Waze.

El software genera además informes de cada actuación y provee las estadísticas acumuladas. “Yo estaba viendo un informe de que en lo que iba de la temporada llevábamos detectados 613 focos, en todo el país, habíamos tenido 43 intervenciones y de ellas solo 3 habían tenido origen forestal, que se iniciaron en una forestación”, destacó.
De hecho la empresa determinó que cuando la situación alcanza al nivel naranja se posterguen una serie de tareas que pueden dar lugar al origen de un incendio, como cortes de pasto o cortes con motosierra. “Esas actividades las suspendemos entre las once y las dieciséis horas”, indicó.

REACCIÓN

A modo de ejemplo, Mastropierro comentó el caso de un incendio en Merinos, que fue identificado en el sistema como “Pitanga”. “Muestra en qué predio es, en qué cuadrante, y qué medios están trabajando o trabajaron en el lugar, cuando ya pasó”. En este caso “se asignaron dos aviones, el primero salió a las 14:24, a las 14:53 llegó al lugar e hizo la primera descarga, 15:03 aterrizó, cargó 1.600 litros de agua, 15:33 hizo la segunda descarga y ahí siguió descargando hasta que la última descarga fue a las 16:35”, repasó. “Al helicóptero se le avisó a las 14:12, salió a las 14:15, llegó 14:37, descargó la brigada y enganchó el balde a las 14:40, a las 14:52 encontró el agua y empezó a tirar. Tira de a 900 litros cada balde y tiró 35 baldes, tiró casi 35.000 litros”, agregó. Simultáneamente “se mandaron cisternas, te dice todo los tiempos, a qué hora salieron, a cuáles llegaron, qué fue lo que hicieron, cuántas horas estuvieron en el lugar. Hubo gente que estuvo dos horas, tres, cuatro, siete. Todo eso queda registrado, digamos”. Esos informes permiten evaluar la respuesta y si es posible mejorarla.

Lo que todavía no se instrumentó es el aviso automático a Bomberos, a quienes se comunica telefónicamente desde la central. También se pretende generar un aviso al Comando de Operaciones Aéreas, “para que a partir de una emergencia se forme un área de acceso restringido donde solo pueden estar las aeronaves que están trabajando, que no haya drones ni otras aeronaves”.

VERTEDEROS Y CABLES

Los vertederos de residuos se han vuelto un dolor de cabeza. Además de en los de Algorta y Piedras Coloradas, también hubo un episodio en el de Villa del Carmen “y alguno más en los últimos días”. Pero así como los vertederos han sido importantes, también lo están siendo las líneas eléctricas. “No sé por qué motivo cuando hace tanto calor se cortan y se caen, y al caer empiezan a largar chispas digamos y arranca un incendio ahí”, afirmó Mastropierro. “Hemos tenido unos cuantos eventos también derivados de caídas de líneas eléctricas, sin ningún motivo, nos la chocó ni la enganchó nadie, se cayó sola y originó un foco. El año pasado nos había pasado también en algunas oportunidades”.