En el tablado: Mario Minetti por Marco Nieto, como para jugar a quien es quien

Por: Enrique Julio Sánchez
Fotos: Milton Cabrera, Andrés Franco

“¿Qué les puedo decir? Mi Vale y mi Cacho, mis niños eternos –porque para mí van a ser siempre mis niños eternos–; ¿y a vos Coca?, estoy aquí con vos como de gurises ¿te acordás? Y a ustedes ¿qué les puedo decir que no sepan? Si estuvieron en cada risa, en cada aplauso. Nunca pierdan esto de reír, aunque las cosas se pongan difíciles, complicadas, siempre de buen humor. Me encanta hacer esto, salir en carnaval. Yo soy feliz robándole una sonrisa. Y, ¿saben por qué? Porque reír es vivir eternamente”.

En el escenario del Anfiteatro del Río Uruguay, en una cálida noche, el grupo de parodistas Truman’s presentó “El Flaco Minetti”, una de las dos parodias (la otra “Mulan”) del espectáculo “Resilientes”.

Y esas frases fueron las finales de un personaje entrañable, de una persona entrañable; Mario Hugo Minetti Tolosa. Después, la parca se lo llevó abrazado del tablado, donde estuvo un cantinero que se llama Pedro (¿San?), amigos que le fueron entrañables, como Plomada Martínez, Carlitos Paradiso, Coca su amor eterno, Valeria y Cacho sus hijos.

Detrás de la puesta en escena estaba Marco Nieto, autor, director y protagonista. Al finalizar el Concurso Oficial de Agrupaciones, logró la mención soñada, Figura del Carnaval. Además el grupo ganó Mejor Espectáculo del Carnaval, Mejor Parodia, Mejor Interpretación.

Marco Nieto debutó en 1999 con Los Jockers, el grupo de parodistas que fundó. En 2002 salió con humoristas Megarrisas, luego volvió a Los Jockers y en 2005 participó del carnaval montevideano con Antifaces. Luego parodistas Sinvergüenzas, hasta 2020. Este año en Truman’s.

“En realidad no esperaba nada”

Conversar con la Figura del Carnaval no fue sencillo, no porque no estuviera dispuesto, solo por complicaciones externas. Justo el día en que iba a realizarse la entrevista debió viajar a Montevideo por el sindicato de Paycueros, del que es dirigente. En el ómnibus en el que regresaba a Paysandú seguíamos en contacto. Hasta que alrededor de las 22 horas estuvo en el diario. Un acto de generosidad que lo destaca, como al personaje que este año lo hizo brillar en el escenario, entre risas, nostalgias y algún lagrimón del público.

“No esperaba la mención de Figura del Carnaval. En realidad no esperaba nada. Me pasó cuando hice Eduardo Franco (Primer Premio 2016, Sinvergüenzas). Hubo mucha manija en radios, televisión. Fue la primera vez que yo esperé algo del Jurado. Y no fue así y aprendí que no tengo que esperar premios o menciones, tengo que hacer lo que me gusta, lo que puedo lograr (ese año no hubo Figura del Carnaval y como Interpretación de Personaje fue elegido el elenco de Sinvergüenzas).

“Este año pasó algo similar, más allá que el Flaco era de otro ambiente, más carnavalero. Me dijeron muchas cosas, pero no hice caso. Así como en el caso de Eduardo Franco me concentré lo más que pude en la parte vocal, en la representación del Flaco busqué otros elementos para acercar su figura al público. Adelgacé, me fijé mucho en su postura al caminar, miré en YouTube sus actuaciones e incluso entrevistas que le hicieron en televisión, su manera de hablar”, cuenta Nieto y destaca “un gran trabajo de maquillaje”.
Como escritor, director y protagonista de una parodia “me enfrento siempre a no poder dirigirme realmente, porque no puedo estar en dos lugares. Otros años les pedía consejo a Giorgina Giamberini, Andrés Caeiro o Pablo Coll. Este año Andrés no estaba, Giorgina estaba complicada y Pablo estaba en el otro grupo de parodistas. Entonces lo trabajé internamente. Frente al espejo me filmaba y mostraba los videos a amigos o familiares. Meses estuve así”, recuerda la Figura del Carnaval 2023.

Una historia bien horneada

Todo comenzó en agosto del año pasado. Primero la investigación del personaje, para luego comenzar a escribir. “El primer contacto fue Mauro Minetti, el hijo. Lo conozco vinculado al carnaval. Fue el que me hizo todos los contactos con la familia; Plomada también ayudó. La aprobación de la familia fue fundamental; podíamos hacer igual la parodia, sin consultarla, pero por respeto era mejor así. Ellos sabían que los iba a tomar con mucho respeto. Lo que pasó luego, con el resultado, fue algo muy lindo, recibí un montón de cosas de todos lados”.

“La idea surgió en agosto, cuando aun desconocíamos si podía surgir otro concurso en otro departamento. En Mercedes, aunque no hay parodistas, había concurso de la categoría e iban Pippers y Sinvergüenzas. Entonces dudamos un poco si haríamos una historia tan sanducera”.

En setiembre “comencé a hacer las entrevistas, las fui grabando y buscaba videos en YouTube. Hubo gente que me envió audios, lamentablemente algunos fueron de los últimos y no daba para incluirlos. En diciembre empecé a escribir. Y pasó algo que nunca había sucedido. Antes escribía a mano y después lo pasaba a la computadora; ahora escribo directamente, pero más allá de eso, en dos o tres días terminé de escribir. Me agarró un momento de inspiración digamos, y como nunca en poquísimo tiempo quedó escrita la historia, que es lo que hago siempre, para después buscarle la deformación paródica. Esta vez no seguí una línea argumental temporal. Puse como escenario un tablado. Para algunos puede ser el cielo, no lo sé. En las escenas se iba atrás como hacia adelante; eso rompió con lo que la gente suele esperar”.

Algunas escenas quedaron fuera

Quedaron escenas fuera de la parodia “por una cuestión de tiempo”. Quedó una escena con Valeria, pero sería redundar mucho en la parte de la enfermedad; quedó la parte del teatro, su última parte, con Tristes Tigres; no entró tampoco cuando fue Jurado del carnaval de Salto, parte que la íbamos a aprovechar para un cuadro coreográfico, porque hay que meter rubro, y lo íbamos a poner como Jurado de revistas, aunque eso no fue así; y quedó una escena de Alcohólicos Anónimos, pues él fue tutor de unas cuántas personas en Paysandú. Esas escenas quedaron afuera porque la parodia se hizo muy larga y tuvimos que incluir lo que nos pareció no podía faltar”.

“Hay una idea loca de hacer un par de funciones de teatro, con una parodia más extensa. Seguramente esas cuatro escenas se pueden incorporar. Sería lindo para los carnavaleros que no vieron al Flaco haciendo teatro; o en su vida cotidiana”.

La fuerza de los personajes locales

“Un año vino Andrés Tulipano a dar una charla sobre texto carnavalero –lo trajo Sebastián González– y dijo algo que me quedó grabado: ‘me encantaría que llevaran a Montevideo una historia de un personaje local muy querido, muy fuerte. Si la cuentan bien seguramente le llegará a la gente’. Eso es real, porque en el caso del Flaco Minetti, si gente que no lo conoció la entendió, estuvo bien escrita, pero si incluso gente que lo conoció no logró entenderla, entonces estuvo mal escrita. Creo que eso pasa en el caso del carnaval de Montevideo, que llega a todo el Uruguay a través de la televisión y se entiende lo que hacen. Por ejemplo el Pistola Mariscano, que hizo Nazarenos. Yo no tenía idea quien era, pero seguí la parodia”, refiriéndose a la parodia que tuvo como protagonista a una figura muy querida del carnaval y el fútbol montevideano, del barrio de La Teja, que en 2017 ganó como Mejor Parodia en la capital.

Queda un momento en silencio y agrega: “Cometimos un gran error con Sinvergüenzas –y hago un mea culpa– cuando fuimos a la prueba de Admisión en Montevideo. Habíamos creado un estilo, logrado un lugar no solo ganando acá sino también en otros departamentos y quisimos ir a Montevideo. Renovamos parte del elenco, cambiamos el estilo y fue el error más grande. Tendríamos que mostrar lo que somos nosotros, el estilo, la impronta. Por eso creo que la historia del Flaco Minetti pegó tanto, por cercanía, porque es parte de nosotros. Era impactante escuchar los aplausos de la gente, pero en verdad yo sentía que a quien aplaudían era al Flaco, yo era el medio”.

La tranquilidad de las cosas bien hechas

Cuando terminó la accidentada entrega de premios y menciones, siguió lloviendo un rato más mientras cada cual volvía a casa. Después de todo había que descansar un poco, trabajar, cosas cotidianas. En el caso de la Figura del Carnaval 2023 al acostarse “sentí mucha tranquilidad. No me había dado realmente cuenta de que había mucha presión en torno a esta parodia, no por mí, por el Flaco. Cuando Mauro, el hijo, llega a decirme que ‘por momentos es como ver a papá’ se te mueve todo. Aunque no sea así, porque yo hice una representación. Pero tenía mucha carga emotiva. Esta parodia hizo reír mucho más que la primera (Mulan) y lograba también más silencios. Entonces, cuando llegaron los premios sentí tranquilidad, todo lo que se elaboró dio sus frutos”.

Ese futuro incierto

¿Qué viene ahora? No lo sabe, sostiene. Por un lado el anunciado retorno de Sinvergüenzas, por otro la duda si Truman’s saldrá en 2024. “La invitación para Sinvergüenzas está. Pero realmente no lo sé, depende de mi trabajo. En la fábrica se trabajaba en tres turnos y a mí el nocturno me complica mucho para el carnaval. Luego hubo una baja del trabajo y pasamos a dos turnos, se adelantaron licencias y a mí me tocó en febrero. Todo perfecto. Pero no sé qué ocurrirá en adelante”. Pero, de todas maneras, sostiene que “por mi saldría siempre, yo no solo actúo en carnaval, yo consumo carnaval. En casa, cuando descanso, con el termo y el mate prendo la tele y miro en YouTube carnaval”.

“Hay muchas cosas que considerar, a medida que pasan los años. Ya no bailo porque los años hacen su parte. Quisiera dejar de cantar también porque lleva mucho tiempo y dedicarme a la actuación. Porque también necesito más tiempo para la familia. Este reconocimiento del carnaval sanducero, inesperado, me llena de orgullo y ganas de seguir adelante. Pero al mismo tiempo, sé que hay cosas que no puedo descuidar, como la familia –que me apoya enormemente– ni el trabajo”.

Termina un carnaval, el merecido reconocimiento a quien desde que tenía 18 años escribe, actúa y dirige grupos de carnaval, ha llegado. Homenajeando a una persona insustituible. “¿Sabés qué diría el Flaco si viera esto? Se reiría mucho y preguntaría: ‘¿vo, esto que estás haciendo, estás seguro que es para mí?’”