“Cuando decimos que hay que preparar a los jóvenes para el trabajo, los sindicatos se enojan”, dijo Mieres

El ministro de Trabajo y Seguridad Social, Pablo Mieres, confirmó que comenzó a reunirse el equipo de trabajo para analizar la forma de mejorar la productividad en el Uruguay, con el fin de atender un reclamo de las gremiales empresariales. El secretario de Estado destacó que el empleo y los salarios se encuentran en una situación mejor que antes de la pandemia sanitaria. Sin embargo, reconoció que si no se introducen correcciones en el modelo productivo, esas mejoras pueden tensionarse y perderse. En cuanto a la creación de nuevas fuentes de empleo, el ministro abordó la problemática que enfrenta el gobierno con la escasa respuesta ante algunos instrumentos legales, como la Ley de Promoción del Empleo.

Salario

Mieres reconoció que “hay un número importante de personas que ganan menos de $25.000 y esa es una cifra baja. Sobre todo para el poder adquisitivo en Uruguay. A raíz de la política económica, tenemos una inflación con tendencia a la baja y, por primera vez en mucho tiempo, la inflación anual quedó situada en el rango establecido por el Banco Central. Cerramos 2023 con 5,11% de Índice de Precios al Consumo (IPC), que es realmente muy baja contra un aumento salarial promedio de 8 puntos. Esa diferencia de tres puntos se comenzará a notar porque este año, los convenios salariales ya están acordados. Y van a continuar porque la décima ronda se extiende hasta 2025”.

Recordó que “cuando acordamos la pauta salarial, las expectativas de inflación eran más altas. Los acuerdos de los consejos de salarios, establecieron aumentos por encima de la inflación efectivamente ocurrida. Esa diferencia entre aumento salarial y evolución de precios, será favorable al trabajador hasta mitad de 2025”.
No obstante, Mieres agregó que “eso no quiere decir que sea igual para todos. Hay algún sector, particularmente el turismo, donde la recuperación demorará un poco más. Esto afecta a trabajadores de esta zona porque las empresas del sector turístico han estado mucho más afectadas. La pandemia tuvo un impacto en este sector por encima de la gran mayoría”.

Medidas del gobierno

La Ley de Promoción del Empleo (Nº 19.973), aprobada en el año 2021, busca fomentar la contratación de determinados grupos de personas –jóvenes entre 15 y 29 años, mayores de 45 años y personas con cierto grado de discapacidad– otorgando subsidios a las empresas.
“Está vigente y pretende ayudar a los sectores vulnerables pero no ha tenido el uso que hubiéramos querido. No se puede obligar a los empleadores a que recurran al subsidio y hay que hacerla conocer, pero también buscar otros instrumentos. Hoy no los tengo definidos, pero creo que hay que ayudar al trabajador por cuenta propia a que tenga un nivel de respaldo y habrá que impulsarlo en el próximo período de gobierno”, dijo a EL TELEGRAFO.

De acuerdo al jerarca, “no es justo que un trabajador por cuenta propia que interrumpe su actividad, no tenga algo similar al subsidio por desempleo que tienen los trabajadores formales privados o seguro de paro. Y lo que ocurre con los jóvenes es una gran incógnita que no se ha logrado revelar. Creo que tiene que ver con la educación. Seguimos teniendo un salto muy grande entre lo que se enseña en el aula y lo que se requiere en el mercado de trabajo”.

Mieres sostuvo categóricamente que “los jóvenes no salen preparados para el mercado de trabajo. Es más, cuando los gremios docentes oyen que hay que preparar a los jóvenes para un trabajo, se enojan. Dicen que eso es mercantilizar la educación. Desde que el mundo es mundo, la educación cumple dos funciones claras en la sociedad. Una es la transmisión de normas y valores pero la otra es preparar a las nuevas generaciones para una inserción exitosa en el mundo adulto”.

Educación dual

Mieres se mostró partidario de la educación dual, bajo el modelo alemán. “Que el estudiante siga siendo estudiante y empiece a trabajar. Que a partir de cierta altura del trayecto educativo haya un componente de tiempo en aula y otro tiempo en práctica. De hecho, en las licenciaturas y en los grados, es un mandato que haya una práctica. Es decir, que la persona antes de recibirse haya tenido una experiencia práctica”.
El ministro reconoció que “por más que los docentes hagan el esfuerzo, la enseñanza siempre está lejos de lo que ocurre en la realidad del trabajo. Si no hay un cambio de chip en la forma de enseñar y el vínculo entre la educación teórica y el aterrizaje práctico, los jóvenes van a salir poco preparados para el mercado. Después chocan con un mundo que no los demanda rápidamente, porque cuando tienen que elegir a sus trabajadores tiene que buscar a gente con más experiencia”.

Concluyó que “la experiencia hay que encontrarla en la trayectoria educativa. Por eso, la necesidad de una educación dual. En Uruguay, existen experiencias pero hay que seguir creciendo en ese sentido”.