Eemac investiga productividad en vacas estabuladas y las que están en pastoreo y estabulación alternativa

En una investigación que para Uruguay no tiene antecedentes, el equipo de profesionales y estudiantes en Lechería de la Estación Experimental “Dr. Mario A. Cassinoni” (Eemac) de Facultad de Agronomía, realiza experimentos con vacas que producen leche y permanecen en un sistema de total estabulación, aumentando considerablemente la producción, con otros dos grupos que lo hacen diferente, con el pastoreo y estabulación como alternativa. “Trabajamos en la parte de salud y reproducción de los animales, para comparar el efecto de la cama caliente, con el sistema tradicional de Uruguay a cielo abierto, y ver como afecta o no, el sistema de encierro”, señaló a EL TELEGRAFO la doctora Graciana Mendina.
La profesional es brasilera, pero realiza su maestría de grado en nuestro país e integra el equipo que encabezan los ingenieros agrónomos Pablo Chilibroste y Diego Mattiauda, junto a la doctora Lourdes Adrien.
Explicó que “por un lado se encuentran las vacas que están 100% estabuladas; por otro las que están en medio turno en el encierro de cama caliente, y salen a pastorear; y el tercer tratamiento incluye a las vacas que van a pastorear y cuando llegan al encierro, están a cielo abierto con las condiciones de intemperie y barro”. Los tratamientos fueron diferenciados como Control Alto (Rojo) con una dieta totalmente mezclada (DTM), sistema de encierro permanente en establo techado y con sistema de cama caliente. Alimentación que cubre el 100% de los requerimientos de mantenimiento y producción.
Control Alto (Azul), con dieta pastoril mixta (DPM), que se trata de un sistema pastoril intensivo con encierro de los animales cuando enfrenten condiciones extremas. Los animales recibirán alimentación suplementaria al pastoreo en el mismo establo donde estarán las vacas del tratamiento rojo.
Control bajo (Verde) DPM, que es un sistema pastoril intensivo con encierro de animales “a cielo abierto”, cuando enfrenten condiciones extremas. Los animales se alimentan igual al tratamiento Azul y el sistema opera todo el año, tal como operan los sistemas de producción dominantes en la actualidad. El experimento comenzó entre el 4 y 5 de febrero con la selección de los animales. “Hicimos el trabajo para que los tratamientos fueran similares y con los animales bien distribuídos”, precisó Mendina.
Alrededor del 19 de febrero ingresó la primera tanda de animales al preparto, comenzando con los seguimientos y la dieta específica, para prevenir enfermedades y problemas sanitarios. “Una de las primeras mediciones fue en el Ph de la orina, para saber si la dieta estaba funcionando”, aclara.
La investigación se lleva adelante –van recién 3 meses de trabajo–, con vacas en producción que ingresaron 21 días antes de parir, y desde ese momento comenzaron las mediciones, acompañándose la lactación entera”.

PRODUCCIÓN

El tratamiento DTM Rojo, ha subido de 30 a 45 litros en los primeros 30 días de lactancia, lo cual está dentro de lo esperado aunque por debajo aún de su potencial. Los tratamientos Azul y Verde han subido más lentamente hasta unos 35 litros de leche. Hay que tener en cuenta que en los dos últimos controles los lotes en pastoreo estuvieron totalmente estabulados.
Los tratamientos exhiben valores muy similares de contenidos de grasa (4%) y de proteína (3,35%) lo que determina producciones de sólidos en torno al kilo y medio diario de cada uno de los componentes. Por esta razón también es razonable que la producción total de sólidos (grasa + proteina +lactosa) sea similar en tendencia a la producción de leche: mayor producción de sólidos (5 kilos SL/ VO día) para el grupo Rojo respecto a los grupos en pastoreo (4 kilos SL/ VO día). Estos valores hay que mirarlos como lo que son: datos muy preliminares de un proyecto que está comenzando.

REPRODUCTIVO

En lo reproductivo, se ha apreciado un reinicio de ciclicidad mayor en las vacas que están en pastoreo”, indicó la profesional. “Las vacas 100% estabuladas tuvieron menor reinicio, lo que parece ser significativo, lo que puede atribuirse al nivel de alimentación y producción”.
“Se sabe que la vaca que más produce, deja un poco de lado la reproducción. Más allá de recibir el mayor nivel de alimentación y tener totalmente cubierto los requerimientos de todos los nutrientes, tienen un metabolismo muy acelerado y todos esos nutrientes de energía se priorizan para la producción, llegando a niveles de entre 40 y 50 litros por día”, dijo Mendina.

PROBLEMA DE MASTITIS

Para Uruguay no hay antecedentes de investigación en cama caliente, esto llevó a que se detectara un problema en el lote de vacas con sistema de encierro permanente, que “en un momento llegó a desestabilizarse por mucha humedad y baja temperatura”.
Expresó que en la cama caliente “se produce una fermentación aeróbica, y con el calor que libera esa fermentación, mata las bacterias patógenas. Lo ideal es que esté por encima de los 45 grados y entre 40 y 50 por ciento de humedad”. En ese lote de vacas, “tal vez por el tipo de material que se consiguió, que tiene partículas muy pequeñas, quedó mucha humedad, no se pudo airear muy bien, y a su vez la fermentación fue afectada, lo que repercutió en que la temperatura quedó muy baja”. A consecuencia de lo mencionado, Mendina sostuvo que “se detectó mucha mastitis en ese lote de vacas” (12 vacas de 16). Aclaró que “eso no significa que la cama caliente no sea bueno, sino que fue un problema de manejo que le puede suceder a cualquiera, y que por suerte nos pasa a nosotros, por lo que podremos brindar datos para prevenirlo y dárselo a los productores”.
La solución pasó por conseguir “partículas más grandes que permitan la penetración de mayor cantidad de aire, y pequeños ajustes de manejo, como ser revolver la cama dos veces al día antes de los ordeñes, lo que debe hacerse con horarios fijos”. Además, el aserrín de las camas se va agregando “porque al compactarse va bajando el nivel”, al tiempo de puntualizar que “se mueve la parte de arriba –alrededor de 30 centímetros–.
En el caso del lote Azul en semi pastoreo, solo 2 de 16 vacas presentaron mastitis, siendo que una tuvo brumus en un turno y se mejoró sola sin necesitar antibióticos. Por lo que no presentó problemas con la misma cama.
En el lote Verde se detectaron cuatro vacas con mastitis de las 16. “Por lo que el efecto del ambiente pudo tener alguna repercusión”, dijo la profesional, “atribuyendo esto seguramente al barro”.
En el experimento se reemplazaron 5 vacas de las 48 que forman parte. El motivo fue una por mastitis al parto; otra por cesárea, una por hipocalcemia y cetosis secundaria más eutanasia y dos vacas por Anaplasmosis. Mendina subrayó que “pretendemos brindarle herramientas al productor, ya que estamos previniendo posibles problemas que pueda tener, y decirles todo lo que puede pasar, tanto lo bueno como lo que puede salir mal para que esté preparado para eso”.20