La trazabilidad de los repuestos de Merbe, un plus que facilita el trabajo al tallerista

“Para nosotros, los mecánicos son nuestros socios, porque necesitamos que ellos nos den la información de que piezas hay que tener, y ellos necesitan el soporte de repuestos para las reparaciones, por lo que entendemos que es algo que debemos trabajar en conjunto”, dijo a modo de saludo a los talleristas Alejandro Adano, uno de los principales de Merbe. Por eso, “tratamos de tener un stock amplio que cubra todas las necesidades, y estar atentos a lo que nos van pidiendo o sugiriendo de piezas nuevas, los nuevos modelos”.
Recordó que “nosotros trabajábamos solamente con la línea Mercedes, pero hace unos 10 años empezamos a ampliar e integramos lo que es pesado con Scania, Volkswagen, Ford, con motorización Cummins y ahora empezamos a traer algo de Iveco y de Volvo. Vamos siguiendo lo que el mercado de transportes va incluyendo, tratamos de acompañar las marcas que van apareciendo”.

Especialización en surtir repuestos

“En 1999 dejamos la venta de camiones y focalizamos nuestra energía en vender repuestos, que es un negocio que requiere un conocimiento de lo que se va a comprar y manejarse con los plazos de importación, donde desde que uno tiene la necesidad hasta que llega la pieza a veces pasan tres o cuatro meses”, y esto es así ya que “hay que completar un pedido mínimo a una fábrica, ya que exigen cierto volumen en dinero, y tiene que hacerse así para que el proceso de importación no dispare los costos, porque hay gastos fijos que se diluyen en el volumen. Y la mayoría de las fábricas trabajan con muy poco stock, producen a medida que le van pidiendo, y tienen exigencias de montos mínimos. Eso es un manejo donde hay que ver qué stock tenemos, qué prevemos vender y cuánto hay que comprar. Es un trabajo de estadísticas, hay que saber cuál es el stock que hay, y saber cuáles son las piezas que se rompen más asiduamente, porque hay muchas piezas que tenemos en el estante por cuatro o cinco años, pero hay que tenerlas porque cuando el cliente lo necesita debe tener la solución. Y muchas no son intercambiables, hay 50 modelos de crucetas pero el cliente precisa la número 8, y a veces son milímetros la diferencia pero ya no sirve”.

Catálogos electrónicos

Para ayudar en la tarea de búsqueda, “tenemos catálogos electrónicos de las marcas que trabajamos donde uno ingresa el chasis del camión y logra un despiece completo y puede ubicar cuál es la figura que requiere el mecánico. Ese dato nos da el número de pieza de la mercadería, y con eso lo registramos en nuestro sistema y lo encargamos a las distintas fábricas”.
En este sentido, “uno más o menos sabe qué fábricas hay en el mundo, entramos a su página y tratamos de encontrar la pieza para traerla a costos razonables. Porque lo original siempre es calidad superior, pero a veces tiene un precio que hay casos que en nuestro mercado no siempre es posible utilizarla. Y depende si es una pieza de seguridad, como los frenos, o de mecánica, con un accesorio de la cabina o un farol que puede ser de otra calidad”. Comentó que “tratamos de tener en todos los artículos donde hay opciones, tratar de darle al cliente dos o tres posibilidades, sea la pieza original, la pieza brasilera o la europea”.
El desarrollo del trabajo de proveer repuestos ha ido evolucionando en los últimos años, y Adano recuerda que “cuando empezamos eran catálogos de papel y hoy es todo en la informática: cada empresa tiene su sitio web, se pueden ver las imágenes con las medidas. Hoy es mucho más sencillo, hay mucho más oferta en el mundo para conseguir piezas”.

Programa informático propio

En lo interno, “cada artículo está con un código propio asociado al del fabricante. Cuando hay que hacer un pedido a la fábrica elegimos cuál es y el sistema informático recorre toda la lista y nos indica todas las piezas que debemos reponer y nos sugiere la cantidad a comprar de acuerdo a la estadística de venta que tenemos. Después se hace un trabajo artesanal mirando el listado y viendo si la pieza es de un camión viejo –por lo que no se va a vender tanto-, o es de un camión nuevo que va a empezar a ser demandada, o me pide una compra de diez piezas pero esa fue una venta especial a un organismo del Estado que no se repite todos los años, y ahí es donde uno tiene que tratar de comprar de forma de, con la menor inversión posible, tener la mayor cobertura de stock posible”.
Detalló que “este sistema de reposición lo hicimos en el departamento de informática de la empresa, y cuando implantamos la reposición con el sistema informático, logramos ampliar un 40% nuestro stock bajando un 20% el capital invertido en repuestos”.
Sobre la importancia de este sistema, dijo que “miro la empresa hoy y verla funcionar sin la informática es prácticamente imposible, porque hacemos todas las importaciones mirando el sistema. Si hubiera que pensar en planillas, hacerlo a mano y revisando los estantes, habría que tener un batallón de gente para ver lo que uno va a comprar”.
A su vez, “a cada pieza que llega se le da una posición de stock con un galpón, un número de estantería y de estante. Porque si se trae una pieza que va a estar tres o cuatro años hasta que la necesitan, y hay varias personas que guardan, es muy importante identificar el lugar donde está”.

Hay 38.000 ítems diferentes

Además de la línea pesada, hay repuestos para utilitarios, como “los modelos Sprinter, que también manejamos como línea pesada porque la mayoría de los usuarios la tienen como una herramienta de trabajo, como una distribuidora o de pasajeros. Por eso tratamos de tener stock y ubicar rápidamente la pieza”. Tal magnitud de desarrollo y la cantidad de ítems, que “son unos 38.000, con la gama completa de camiones y acoplados, y a veces cada ítem tiene tres o cuatro referencias porque hay piezas de diferentes orígenes, la brasilera, la alemana, la turca y la china” han llevado a que Merbe sea una referencia nacional, tanto que “el 60% de nuestras ventas es para afuera de Paysandú, todo el litoral, Tacuarembó, Durazno y Montevideo. Trabajamos mucho con envíos que nos comprometemos que lleguen en el día, y eso también está controlado, y cuando alguien factura algo para afuera, sale un aviso a Despacho donde le indica que hay un paquete para el coche de 17:30 de Copay, y si el cliente desea le mandamos un aviso con mensaje de texto con los detalles. Porque la mayoría de los pedidos en este rubro son de gente que no llama por un filtro o una correa, es para pedir lo que no consigue en otro lado, y eso tiene que llegar porque el camión no puede estar parado”.50