En la recta final de la zafra de cultivos de invierno, ya se realizan las primeras cosechas de colza, y con los cultivos de trigo y cebada “tomando color”, manifestó a EL TELEGRAFO el ingeniero agrónomo Luis Simean, indicando que “estamos frente a una zafra que parece será muy buena, en cuanto a rendimientos y calidad de grano”.
El gerente de la filial Paysandú de la Cooperativa Agraria Nacional (Copagran), dijo que en colza las primeras chacras “presentan buenos rendimientos, y en cuanto a trigo y cebada las primeras estimaciones de rendimiento que han cargado los técnicos en los sistemas de evaluación, son por arriba de los 3.000 kilos, por lo que estamos frente a una buena zafra”.
A pesar de que son las primeras chacras “y no da para sacar ninguna conclusión”, algunos de los productores de la filial arrancaron en colza-canola con cosecha directa, otros hilerando y con buenos rendimientos que oscilan en 2.200 kilos, otros en 2.000 y 1.800, cubriéndose las expectativas que tenían los técnicos”.
Consideró que la calidad “es buena, cosechándose seco y con un poco de humedad, pero que no afecta. Las expectativas son que habrá una buena zafra con la canola”, acotó.
En trigo y cebada los cultivos “están empezando a madurar”, considerando el profesional que “algún episodio de lluvia no viene mal para algún cultivo que puede estar completando el llenado de grano, pero lo ideal climáticamente son las condiciones que se vienen dando: noches frías, días cálidos y soleados, secos y ventosos”.
Se estiman en lo previo “rendimientos por encima de los 3.200 kilos en cebada y algún kilo más en trigo. Proyección elaborada por los técnicos de la cooperativa, que si el clima acompaña se terminarán logrando”, explicó Simean.
En lo sanitario, el profesional sanducero señaló que “en general ha sido bueno”. Precisó que “la situación de noches frías y días soleados y ventosos ayudan para que no aparezcan problemas de hongos. De todas maneras, en cebada se ha aplicado fungicidas en algunas chacras, pero ha sido muy puntual y más bien preventiva”.
Entiende que “algo pueden afectar las heladas tardías, pero esperemos que la incidencia sea poca y no afecten los rendimientos”.
Verano
La zafra de verano ya arrancó para la cooperativa “y tenemos sembrada el área de girasol, con buenas expectativas por parte de los productores, si bien la soja está un escalón más abajo de lo que fue el precio de zafra, pero de todas maneras son valores buenos”.
Se está incrementando el área de verano respecto al año pasado, “el que estará entre 15 y 20 por ciento por arriba a la zafra pasada”, dijo Simean. “Tenemos crecimiento de área en girasol, maíz y soja, quedando relegado el sorgo debido a las mejores perspectivas de los demás granos, pero de todas maneras el área será interesante para este cultivo”.
GIRASOL
Sobre el girasol, explicó que los productores el año pasado “anduvieron bien, adoptando sus precauciones de no sembrar en zonas complicadas por el tema pájaros, en áreas no muy chicas, buscando que el área se junte con otros cultivos para distribuir el problema, siendo bueno el resultado en general, con promedios que oscilaron entre 1.800 y 2.000 kilos por hectárea”. Lo importante que consideró el gerente de la cooperativa, filial Paysandú, es que “los productores cerraron con márgenes positivos al cierre de la chacra. Eso determinó que este año se incrementara el área, duplicándose respecto a la zafra 2020-2021, y haciéndose 6.000 hectáreas en toda la cooperativa”.
Acotó que en la filial local “se duplicó el área, y los productores que habían sembrado el año pasado incrementaron su área, y se sumaron nuevos productores”.
Sobre el maíz, dijo que “viene creciendo año a año. El mejor comportamiento en año complejos de sequía es uno de los aspectos importantes, además de la propia cultura maicera dado que el productor le va agarrando la mano, hace que se imponga y crezca”.
La diferencia frente a los otros cultivos “es que no está integrado a la cadena y es muy difícil fijar un precio a futuro; por lo tanto no hay una certeza comercial hasta el momento de la cosecha”.
De todas maneras, Simean significó que “siempre hay demanda, ya sea para el consumo en las plantas de raciones, o la propia demanda de los tambos o encierres de corral, que generan una demanda permanente de maíz”.
SOJA
“Se aprecian muy buenas expectativas de los productores, con una intención de siembra mayor a la del año pasado, con crecimiento en el área, incorporando áreas de primera sobre todo de pasturas que vuelven a la rotación agrícola, ayudadas por la buena coyuntura de precios, además de casi toda el área de invierno que irá con una soja de segunda”, dijo el técnico.
Entiende que “si bien el precio de la soja actualmente está por debajo de la barrera de los 500 dólares, de todas maneras son valores buenos para lo que venía siendo la soja en los últimos seis a siete años”.
Desde la cooperativa se observa “una importante inscripción de área, además de la reserva de insumos, viéndose este año un mayor uso propio de semillas, pero de todas maneras se observa una demanda”.
Precio
Los tres factores que se aprecian actualmente, y que están influyendo en que el precio no sea mejor, “son una buena cosecha americana, que incrementó los sotcks, una estimación de área en sudamérica que viene bien y la demanda china que viene bastante retraída”.
“Esto genera que el valor de la soja esté en torno a los 440 y 450 dólares la tonelada, precio en Nueva Palmira”. La expectativa para Simean es que “el mercado chino se mueva un poco más, genere más demanda y levante los precios”.
Al ser buenos los precios hoy en día, “lleva a la gente tomar posición vendedora, no masivamente, pero a medida que toma la decisión de sembrar, va fijando 300 o 400 kilos para ir armando un precio promedio”. → Leer más