ADAP cumplió 16 años y retomó talleres con usuarios tras suspensión por pandemia

Atención de Alzheimer Paysandú (ADAP) cumplió 16 años de su creación y 2021 encuentra a la institución en la reorganización de actividades, el inicio de talleres y el lanzamiento de beneficios, para continuar con la obra que un equipo de voluntarios y técnicos lleva adelante en la sede de Washington 843.

Su vicepresidenta, Marta Pasarello, recordó que el grupo se formó el 21 de setiembre de 2005 y, prácticamente en forma inmediata comenzó el trabajo con usuarios y voluntarios el 18 de octubre de ese año, en el Instituto Canadá de Rehabilitación. Posteriormente, accedieron a las instalaciones de la Sociedad Israelita de Paysandú y en 2008 a la dirección actual.

Desde entonces, “hubo muchos avances, pero el agradecimiento es a todo Paysandú que siempre nos da una gran mano”, dijo a Pasividades. La sede fue cedida en comodato en 2019 por la curia y, según reza en la documentación, es a 30 años.

Desde entonces han realizado refacciones en su infraestructura, con el fin de adaptarla a las necesidades de los usuarios. La última obra correspondió a la ampliación del salón multiuso, cuya inauguración estaba prevista el lunes 16 de marzo de 2020. Sin embargo, el viernes 13 del año pasado, el Poder Ejecutivo declaró la emergencia sanitaria, suspendieron la inauguración y los talleres con los usuarios que reabrieron el martes de la semana pasada. De hecho, actualmente planifican nuevas obras para mejorar la accesibilidad en el ingreso al local.

Profesionales

Además del cuerpo de voluntarios, “a sugerencia del doctor Gustavo Curbelo, director técnico de ADAP, llegamos a la profesionalización de la institución, con el contrato de los técnicos. Son dos sicólogas, una para estimulación cognitiva y otra para las familias, y un fisioterapeuta. Además, contamos con la colaboración del sicólogo Diego Velázquez, la asistente social Lucía Rivero y el médico honorario Marcelo Luaces.

Los vínculos se sumaron con el paso de los años y la institución creó, junto a otras, la Federación de Alzheimer y Demencias del Uruguay (Fadur).
“Eso nos permite acceder a niveles internacionales para obtener información sobre la patología. Además, pertenecemos a la Comisión Departamental Honoraria de la Discapacidad, nos integramos a las actividades organizadas por el mes del adulto mayor, con charlas en el farol Chaplin, en Asapa y en Quebracho. Incluso tenemos una invitación pendiente para ir a Piedras Coloradas”. Además de la organización de la Milla Dorada, plenamente integrada al itinerario tradicional de actividades sanduceras.

La formación en diversas áreas académicas permite un intercambio con estudiantes de variados centros educativos. “Tenemos pedidos de estudiantes de UTU que nos solicitan información sobre Alzheimer, estudiantes de 6º año de bachillerato de Medicina de Guichón. Hemos tendido redes por todos lados”, aclara.
A modo de evaluación, Pasarello agradece y reconoce “a la intendencia porque en todas las gestiones municipales recibimos apoyo y para nosotros es fundamental porque desde 2017, Paysandú es una ciudad solidaria con el Alzheimer”, al tiempo que va camino a ser declarada amigable con el adulto mayor.

Talleres

Los talleres retomaron sus actividades con los usuarios, los martes y jueves de 15 a 17. “El protocolo que presentamos en la Dirección Departamental de Salud fue aprobado para dos días a la semana por dos horas cada día. Empezamos con estimulación cognitiva y música los martes, y actividades plásticas y fisioterapia los jueves. Será acotado, pero hay buena repercusión en los usuarios porque hay muchos nuevos ingresos”, detalla.

El protocolo “se respeta a rajatabla porque los usuarios son personas muy vulnerables. Exigimos la inmunización con dos dosis de la vacuna contra la COVID-19, el diagnóstico del médico de cabecera de cada persona y la constancia de que está apta para participar de los talleres de ADAP”. El aforo aproximado es de unas 20 personas y reciben consultas al 098848396.

Los familiares recibieron una charla, a cargo de la sicóloga Karen González, “y también deben tener dos dosis de las vacunas. Al igual que los voluntarios y el equipo técnico”, dijo Pasarello. Con el fin de recabar fondos, organizan su participación en la feria “Paysandú Flor de Ciudad” los días 5, 6 y 7 de noviembre. Solicitan la donación de plantas que pasarán a buscar. Además, está a la venta un bono colaboración consistente en una mesa servida, a sortearse el 19 de noviembre con la quiniela nocturna por un valor de $100, dos números.