A las 9.36 de un soleado 18 de Julio de 2022, día que pasará a la historia de Guichón, en la rotonda de ingreso a la ciudad, Diego Torres, subido a una escalera, izó por primera vez la bandera oficial del Municipio de Guichón, de seis metros de largo por cuatro de ancho. Autoridades, mujeres, hombres y niños, así como gauchos de a caballo que se habían reunido en el lugar para posteriormente participar de un desfile por el centro de la ciudad, aplaudían, se emocionaban.
Entre otras autoridades, estuvieron presentes el intendente Nicolás Olivera, el alcalde de Guichón, Martín Álvarez, la diputada Nancy Núñez, el diputado Juan Carlos Moreno (a caballo, integrando una aparcería), el presidente de la Junta Departamental, Claudio Zanoniani, el jefe de Policía, comisario general Eduar Álvez de Almeida, el comandante del Batallón “General Leandro Gómez” de Infantería Mecanizado Nº 8, teniente coronel Gustavo A. Negrín, el prefecto de Puerto, teniente de Navío Luis Zinno, el jefe del Aeropuerto de Paysandú, capitán (Nav.) Carlos García Martínez, y el jefe de Región I del Comando de Bomberos del Interior, comisario Víctor Mello, quien precisamente en la presente jornada será subrogado, y continuará su servicio en la dotación de bomberos de La Teja, Montevideo. También estuvieron presentes los alcaldes de Piedras Coloradas John Cáceres y de Porvenir, Ramiro Ayende, y el exintendente Bertil Bentos, quien precisamente nació en Guichón.
“Se me eriza la piel”, dijo Diego Torres, quien diseñó la bandera, al hacer uso de la palabra al comienzo del acto de izamiento oficial. “Básicamente lo que quise hacer es aportar un granito de arena a la construcción de identidad que seguro está presente desde que un paisano comenzó a construir su rancho en los campos de Pedro Luis Guichón. Una sociedad con identidad genera sentido de pertenencia. No deja de ser en otras palabras sentirse parte de algo, andar hombro con hombro y en momentos malos tener siempre a quien acudir, sea un vecino, un familiar, un amigo”.
Destacó que “en Guichón seguimos siendo solidarios. En la pandemia un grupo de vecinos se juntó y organizó Guichón Solidario y dio una mano muy grande a personas que no la estaban pasando bien”, destacó y aseguró que “eso a uno le hace sentirse muy orgulloso. Vaya que ha habido grandes valores en nuestra localidad, desde sus orígenes. La bandera no tiene el ánimo de diferenciarnos; tratamos de unir y eso está explícito. Vemos a Paysandú, a nuestra localidad y a todas las localidades nuestras del Este”.
“Me siento muy orgulloso de ser guichonense. Cuando nos pregunten de dónde somos, digamos: ‘soy guichonense’”, subrayó.
“EL OBJETIVO ERA GENERAR IDENTIDAD”
Posteriormente habló el alcalde Martín Álvarez. “Lo que hoy hacemos es ponerle fin a un proceso de creación de una bandera que conlleva identidad, que como bien lo decía Diego (Torres) tiene que reflejar a la mayor cantidad de valores que tiene este municipio de Guichón”.
Recordó que “el 15 de julio de 1907 formalmente se fundó Guichón y el 24 de noviembre de 1962 –hace 60 años– fue declarada ciudad. En esta ciudad muchos han dejado su tiempo, su afecto, pero sobre todo su intelecto. Guichón supo tener tres estaciones de servicio, cinco bancos, un comercio como el de Niell, donde se podía ir a comprar un tornillo o una cosechadora. En la misma casa. Algo impensado hoy. Pero siempre los guichonenses tienen ese gen de resiliencia, así como lo tiene todo Paysandú, todo el departamento de la Heroica. Guichón también tiene ese gen de resiliencia. Cuando en el Municipio hablamos de crear una bandera, el objetivo era generar identidad”.
El alcalde de Guichón aseguró más adelante que “la bandera debía representar a toda esta jurisdicción, la del municipio más grande del país. Vaya si tendrá diversidad. Esta bandera tiene en su margen izquierda una franja de la bandera de Paysandú, símbolo del artiguismo. El escudo de Guichón realizado por un alumno de Torres García. En su margen derecho cinco puntas y las últimas recortadas. Representan a Piñera-Beisso, Merinos, Tres Árboles-Morató, Tiatucurá y Cuchilla del Fuego. Las puntas están sin terminar al final, haciendo referencia a la descentralización, esa que día a día vamos construyendo juntos, porque no hay otra forma de construir”.
El conocido artista guichonense “Flaco” Rivero entonó una chamarrita y posteriormente Diego Torres recibió su premio, de 500 dólares. De inmediato anunció su deseo de donarlo en útiles escolares a las escuelas de Merinos, Morató y Tiatucurá.
Olivera, Álvarez y Torres cortaron la simbólica cinta y quien la diseñó procedió al izamiento oficial. Aplausos, abrazos, sonrisas. La bandera ya ondeaba en la cumbre del mástil. Acariciada por la brisa. Visible desde la distancia. Orgullo guichonense.
