Huracán ganó un partido histórico ante Salto FC por la Copa AUF Uruguay, y el globito lo sabe. Sumergido en la Copa Nacional de Clubes de la Divisional A, del torneo local, el sacrificado Huracán tenía en claro que el desafío del torneo que integra al fútbol de OFI con el de la AUF era enorme, y que había que ponerle el pecho.Y no fue fácil. Nada fácil festejar de visita ante un rival que trabaja de manera profesional.
“El fin de semana se había hecho un desgaste grande en la Copa Nacional, sabíamos que Salto FC podía ser más en lo previo, pero creo que nos faltó un poco de piernas. El partido era ganable, pero no supimos entrar en juego, quedamos muy estirados”, dijo el experiente Ángel Mattiauda, que no tuvo minutos pero que disfrutó como pocos.
“Con la edad que tengo, puedo decirte que estoy orgulloso de lo que estamos viviendo”, reflexionó. “Lo que está haciendo Huracán es histórico, y es lo que trato de hablar con los más jóvenes. Era un clásico, el equipo tiene muchísimos gurises, por lo que trato de darles para adelante, que vayan sumando experiencia”.
El “Lagarto” sabía que el del miércoles “no era un partido más, por lo que les dije (a sus compañeros) que esta Copa AUF Uruguay es una vidriera linda para ellos, porque hay jugadores jóvenes con condiciones para dar un pasito más. Ahora, cuando enfrentemos a Racing (el rival en la Fase 2) tenemos que hacer un buen papel, y van a mirarnos con otros ojos”. Así como fue un partido histórico para Huracán, lo fue de complicado. Y no solo adentro de la cancha. Es que durante el apagón que tuvo detenido el partido durante más de media hora, un hincha local quiso llevarse una bandera de Huracán.
Y Mattiauda, que fue uno de los que intentó evitar la situación, denunció ante el árbitro que ese simpatizante “tenía un cuchillo”, mientras volaban “tablas y piedras” hacia el sector de los del globito.
“La verdad es que el partido no tendría que haber seguido. Porque no era el único hincha con un cuchillo, también había otro. Fue una locura”, contó sobre la nota insólita que se dio el miércoles a la noche en el Vispo Mari.
Pero Huracán, en silencio, dio la nota. Sin que le sobre nada, salvo corazón.