Comenzó la poda para preservar tipas en Plaza Acuña de Figueroa

Ayer en horas de la mañana, comenzaron los trabajos de poda que realiza la Intendencia Departamental para la preservación y mantenimiento de las centenarias tipas (que fueron declaradas Patrimonio) de la Plaza Acuña de Figueroa.

Tal cual informáramos oportunamente, desde hace casi dos años los vecinos de la plaza plantearon su inquietud por el estado de los árboles y desde entonces, se han llevado a cabo varias reuniones que concluyeron en dos rigurosos estudios. El primero de ellos surge de la visita del ingeniero agrónomo argentino Eduardo Haene, exdirector de Arbolado Urbano de Buenos Aires, una ciudad que tiene muchos ejemplares similares a los de esta plaza. Haene por lo tanto, cuenta con una amplia experiencia en el manejo de estos árboles, por lo que posteriormente a su visita, hizo llegar un informe detallado sobre el estado general de la arboleda y realizó una serie de recomendaciones sobre cómo actuar frente a aquellos ejemplares que presentaban algún problema.

Se solicitó además una segunda opinión a la UdelaR, quien envió desde Montevideo a la docente Grado III Ana Paula Cohelo, de Facultad de Agronomía quien también realizó un pormenorizado informe que coincide con el anterior. Ambos especialistas recomendaron un alivianamiento de las ramas horizontales y el corte de las ramas que tienen fisuras o fracturas como consecuencia de algunas tormentas y vientos fuertes.

Como resultado de las conclusiones, se recorrieron los caminos administrativos para dar comienzo esta semana con el corte de las ramas horizontales de mayor peso y así lograr que los árboles no pierdan verticalidad, según explicó Cecilia Camacho, paisajista de la Intendencia.

“Se hará hincapié en los dos ejemplares que están en el centro de la plaza, que tienen una inclinación mayor a veinte grados con respecto al nivel del suelo. Esos árboles tienen peligro de vida, ya que pueden desenraizarse en una tormenta, y más allá de los daños que puedan producirse en las tipas, lo que más nos motiva es cuidar la integridad de los usuarios de la plaza y de los transeúntes, evitando una posible desgracia. Si el clima acompaña, y no llueve, el tiempo estimado para finalizar los trabajos es de dos semanas”.
Consultada al respecto de la fecha en que se lleva a cabo, dijo a EL TELEGRAFO que “en noviembre es cuando estos árboles tienen la menor cantidad de hojas, la tipa es un árbol del tipo tardíamente caduco, ya que no pierde el follaje en invierno como lo suelen hacer la mayoría, por lo tanto, es cuando mejor se puede ver la estructura, lo que permite un mejor corte de las ramas que estén quebradas”.