“Las autoridades del HEL no discuten con los trabajadores sobre traslados de ambulancias”

La Federación de Funcionarios de Salud Pública realiza elecciones mañana miércoles para elegir sus nuevas autoridades. Con la presencia del secretario del Interior de la federación, Javier Acosta, la Lista 19 que encabeza a nivel local Domingo Ramírez, evalúa las necesidades de trabajadores y usuarios y propone una reforma de la salud que responda a los reclamos del Interior del país.

“Somos asiduos en estas recorridas constantemente durante todo el año. No solamente en las ciudades sino en las áreas rurales y zonas fronterizas para analizar la realdiad de la atención de la salud pública en Uruguay. Nuestra lista, que es minoría dentro de la federación, reclama una reforma de la salud. Hay que discutirlo porque en estos últimos años no hubo un intercmabio de las autoridades del gobierno con los funcionarios y ASSE o el MSP”, dijo Acosta a EL TELEGRAFO.

Atención primaria

En las recorridas “constatamos que este gobierno apostó mucho más a los hospitales grandes y, por la pandemia, se han construido más CTI. Pero se ha dejado de lado la atención primaria. También es cierto que tenemos pocos médicos al norte del río Negro, pero se han sacado especialistas de los pueblos para trasladarlos a las ciudades. A veces constatamos un solo médico de medicina general, un solo chofer para una ambulancia sin enfermeros para realizar los traslados”.

SAME 105

Consultado sobre la eficacia de la instalación de un servicio de ambulancia SAME 105, el dirigente señaló que “sin lugar a dudas reclamamos que en los lugares más alejados los traslados se hacen sin médicos ni enfermeros. Eso también pasa en las ciudades cuando sacan a una enfermera o un médico de las emergencias para un traslado y queda uno solo en su área. En otras ocasiones, hacen un traslado a Montevideo y se quedan sin ambulancias”. El dirigente enfatizó en la necesidad de “discutir cómo llegamos a los lugares más alejados. Nuestra agrupación quiere debatir una reforma de la salud y la llegada con un nivel igualitario”.

El presupuesto quinquenal definió recursos para la Telemedicina y visitas domiciliarias. “Es como querer instalar un servicio 105 pero de una manera no muy eficiente. En algunos lugares, como en Salto, pudieron logralo con trabajadores que ingresaron por el Fondo COVID. Después se desmanteló y no tuvo solución”.
Explicó que “el 105 es muy importante porque tiene una estructura en Montevideo con sus claves de llegada y una mayor resolución. Así como en Rivera, Maldonado o Juan Lacaze. Hay que armar una estructura de llegada al Interior con un organigrama para la atención de todas las rutas. Porque ASSE es muy grande, tiene más de 900 centros y va a llegar un momento en que no habrá disponibilidad de profesionales. Tendrá una presencia aún más acotada de especialistas, cirujanos y anestesistas”.

Toda la vida

Ramírez reconoció que en el Interior del país “se viene hablando desde hace tiempo, pero se constatan problemas de llegada en los traslados. El SAME 105 tiene otro modelo de trabajo, con ambulancias especializadas, con médico y enfermera, algo que es imposible de instalar en todo el Interior”.
En Paysandú, “las autoridades del hospital se sientan a discutir con los referentes de la RAP sobre la problemática de la ambulancias, pero no lo hacen con los trabajadores. Los encargados de las ambulancias no son citados a las reuniones y, por lo tanto, hay una descoordinación. La problemática de las ambulancias en la ruralidad es de toda la vida”. Ejemplificó que “hoy en Cerro Chato y El Eucalipto hay dos ambulancias pero hasta hace muy poco tiempo había una sola para esa zona de influencia. Mientras no lo resuelvan, seguirá pasando y no solo casos como la niña de Zeballos, sino con otros pacientes que han llegado sin vida”.

Propuestas

A nivel nacional la lista es la 1941. “Hay derechos postergados que debimos tener desde hace muchos años. Por eso queremos cambiar la conducción de nuestro sindicato. Cómo es posible que la salud esté avanzada, haya 900 centros de atención y no tengamos un estatuto del funcionario de ASSE. Tampoco tenemos carrera funcional porque hoy es impensable que un trabajador ingrese con 20 o 25 años y se vaya a jubilar a los 60 o 65 en el mismo grado y el mismo escalafón”, dijo Acosta. Aseguró que “aunque siga estudiando, tampoco puede ascender en ASSE. No tenemos salario vacacional, como pasa con otros funcionarios públicos. Pero nosotros trabajamos en la salud y es una cuestión desgastante que cuando un trabajador sale de licencia, se va pelado para la casa”.
Así como la salubridad. “Hemos detectado a lo largo y ancho del país que hay un gran problema con la salud mental. Necesitamos generar un profundo debate con los parlamentarios que no recorren el Vilardebó ni el Piñeyro del Campo, ni los hospitales públicos porque la mayoría se atiende en el sector privado”.