Sector de la industria láctea y productores lecheros en un momento muy complicado

Los productores dicen que han tirado la leche. Desde el sindicato dicen que no es así.

A la situación conocida en varias industrias lácteas, entre ellas Claldy, la única que queda en funcionamiento al norte del Río Negro, se suma ahora la Cooperativa Nacional de Productores de Leche (Conaprole), que decidió adelantar el cierre de la Planta Nº 14 de Rivera, agudizando aún más el conflicto que mantiene con el gremio, a tal punto que ya se aprecia claramente el desabastecimiento en las góndolas de los supermercados.

En las últimas horas, la Asociación Rural del Uruguay (ARU), expresó su apoyo a la industria de la pesca y la leche. A través de un comunicado, una de las instituciones rurales de mayor peso del país manifestó su “apoyo a los empresarios de las industrias pesquera y lechera en el marco de las medidas de paro promovidas por los sindicatos correspondientes”.

Las movilizaciones sindicales “han afectado negativamente a las empresas, los trabajadores y, en consecuencia, a la economía del Uruguay”, enfatiza ARU.
También solicita al gobierno de Yamandú Orsi que defienda el derecho a trabajar: “Al mismo tiempo, esperamos que el gobierno tome los recaudos correspondientes en defensa del derecho al trabajo en dichas industrias, ya que sus gestiones en favor del retorno a la actividad son de gran valor”.

Concluyen refiriendo a la necesidad de resolver el conflicto lácteo y un próspero retorno de la pesca: “Reafirmamos la necesidad de una pronta resolución del conflicto en el sector lácteo y auguramos un próspero retorno a la actividad en la pesca de modo que se pueda garantizar la producción, la inversión, el empleo y el desarrollo nacional”.

Decisión ya tomada

Justino Zavala, gremialista y productor de Canelones dijo que la decisión de cerrar la planta de Conaprole en Rivera ya está tomada y que no es del directorio sino de los productores por unanimidad. Agregó que por las medidas sindicales se debió tirar parte de la producción y reclamó un debate serio por parte del sindicato.

Entrevistado en el programa Diario Rural (CX4 Rural) y después de escuchar a Luis Goichea, de la Asociación de Obreros y Empleados de Conaprole (AOEC) dijo que enoja mucho a los productores escuchar que del sindicato niegan que se haya tirado el producto: “Calienta mucho a los productores cuando dicen que es mentira que se tiró leche”, y añadió que “lamentablemente se ha tirado leche” y también hubo productores que no llegaron a ese extremo porque hicieron esfuerzos de todo tipo como “atrasar los ordeñes o juntar leche en tarros”.

Con sus dichos, “Goichea quiere que nosotros demos el nombre de los productores para buscar sancionarlos o presionarles con inspecciones de los ministerios de Trabajo o Ambiente” y por eso “nosotros no vamos a decir” quienes fueron, dijo. Puntualizó que ningún productor tira leche “a no ser que se desborden los tanques, o sea que desde el punto de vista ambiental el daño es muy mínimo. No es que se vayan miles de litros, pero es obvio que sí hay leche que se tira”, pero “no todos los tanques desbordados han salido” a la opinión pública, “hay unos cuantos más”.

La realidad es que “a nadie le gusta tirar leche, no es una decisión que se tome cómodamente” y “se espera hasta el último minuto posible” en el límite de crear algún problema (sanitario) con las vacas” y si hay que decidir entre la vaca o tirar un poco de leche, se opta por esta última. “Indigna que se diga que es mentira, porque él (Goichea) sabe que es cierto lo que estamos diciendo”.

Otro punto que “saben que es mentira” es lo que dicen sobre el trabajo a reglamento, en el sentido de que “cuando trabajan a reglamento lo hacen a media o cuarta máquina” demorando el proceso, “reciben un camión y se van, después vuelven, con 50 camiones esperando”.

No tiene lógica

Por las condiciones de la planta de Rivera, el conflicto “no tiene lógica”, definió Zavala. “Es una planta que recibe 15.000 litros por día contra 5 millones de Conaprole; tiene 20 funcionarios contra 2.000 que trabajan en la cooperativa. No tiene lógica salvo la de decir ‘acá en Conaprole ganamos nosotros’”.
Sobre la afirmación de Goichea de que la planta de Rivera no da pérdida, Zavala se preguntó cuál sería entonces el motivo del cierre: “¿Si da ganancia para qué se cierra? ¿Para ganarse un problema con el intendente, con el diputado, con el sindicato?”

“Tenemos que ser mínimamente serios. Conaprole cierra la planta porque la tiene que cerrar debido a las pérdidas que le genera, y a que no tiene futuro, solo hace leche pasteurizada en sachet, un producto que cayó 60% en ventas en Rivera y está cayendo a nivel país. Hay un cambio cultural” por el cual “la gente no va todos los días al almacén a buscar la leche, cambió el hábito de consumo y cayó el consumo más allá de las campañas de promisión”. La otra opción es “hacer una inversión muy importante en dólares que no se justifica”.

Por otra parte, Zavala aseguró que la decisión de cierre “está tomada y es de la asamblea por unanimidad, no del Directorio”, con lo cual el peso de la medida es mayor.

EL MTSS “BALCONEA EL CONFLICTO”.

Zavala fue crítico con el accionar del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS): “Lo vemos como balconeando el conflicto, no intervino con la fuerza con la que hay que hacerlo”.
Ahora “el gobierno tiene que valorar qué significa Conaprole para el país; qué significan los 1.500 productores, las 20.000 personas que día tras día dependen del accionar de la cooperativa, la principal empresa exportadora del país. Creemos que el gobierno la tiene clara”, reflexionó.

“El gobierno no es solo el MTSS y si el conflicto se profundiza –espero que no–, el gobierno entero lo va a tener que resolver, no solo el Ministerio. La decisión de cerrar la planta está tomada y no podemos permitir que la empresa no pueda tomar resoluciones sobre su forma de trabajar”.
De todas formas “siempre estamos preparados” para posibles medidas extremas del sindicato, teniendo en cuenta el escenario actual con la planta que se mantendrá cerrada y la posición del sindicato.
Denunció que hay máquinas que no se pueden poner en funcionamiento por oposición del sindicato, y así “es muy difícil trabajar. Eso no solo pasa en Conaprole, también pasó en Claldy, Calcar, Pili. Lo que pasa es que Conaprole tiene otra espalda, que es la espalda de los productores, que somos los que pagamos el pato”. Zavala añadió que Conaprole paga 3.000 horas sindicales por mes, que es casi 3 veces más que Ancap.

Sindicato dice que no se tiró leche

Conocida la decisión de cerrar de forma inmediata la planta 14 de Conaprole en Rivera, los trabajadores de la cooperativa decidieron realizar una asamblea en la mañana del jueves 21. Luis Goichea, de la Asociación de Obreros y Empleados de Conaprole (AOEC), dijo al programa Diario Rural (CX4 Rural) que la decisión de la cooperativa lo “sorprendió” a pesar de que el cierre ya estaba anunciado para el 31 de octubre, y aseguró que nunca se tiró leche por la actividad sindical.

El dirigente sindical subrayó que “la planta no da pérdidas, es rentable y en los últimos dos ejercicios tiene U$S 1 millones de ganancia” y esos “son números públicos”. El problema está en que, “según dice Conaprole, la tendencia de los últimos años va a la baja en el consumo y venta de leche fresca, y la planta que vende 20.000 litros tendrá una reducción a futuro y daría pérdidas. El monto de U$S 1,5 millones de pérdida surge” porque la cooperativa “dice que la ganancia estimada de la producción saliendo de Montevideo sería de ese total porque se ahorra costos” que se generan en Rivera. “La planta en sí es rentable”, enfatizó.

Por esas razones se están “planteando una serie de medidas” para que crezca el consumo de leche en el país y el norte, como recuperar la compra de leche fresca por parte de ANEP para las escuelas que desde la pandemia consumen leche en polvo.

Goichea también contradijo a la cooperativa al decir que “se pierden fuentes de trabajo porque son 28 puestos menos en Conaprole, desplazando trabajadores contratados en otras plantas”, además que el traslado (reubicación) es en una distancia de “400 o 500 kilómetros a las plantas más cercanas”, lo que genera cambios en las situaciones familiares y sociales, sumado a que hay trabajadores del lado de Brasil.
Todo eso se da mientras Conaprole pide y recibe el beneficio de determinadas políticas que le da el Estado, entre ellas “un planteo que el gobierno realizó para las empresas exportadoras a efectos de alentar la exportación, que consiste en reducir costos, que en el caso de Conaprole es de U$S 1 millón al año. Esos aportes eran del Estado”. En otro orden, Goichea dijo que “ningún productor tiró leche por una medida de AOEC, en ningún lado y en ningún momento. Eso lo desmentimos, porque hay un protocolo que no se puede tirar leche” con excepciones puntuales como el caso de que una inundación no permita llegar al tambo.

Enfatizó que “no hay ninguna prueba de que se tire leche por un conflicto” y que las imágenes que circulan en redes sociales no se sabe quién las publicó, si son reales o de otro momento.
Para evitar la pérdida de leche el sindicato cumple con “guardias en todos los lugares de trabajo, tomamos precaución y no hay ni una sola denuncia” de que se tire la materia prima.

POR EL MOMENTO NO SE PREVÉN MEDIDAS.

El entrevistado dijo que el ministro de Trabajo, Juan Castillo, pidió al sindicato no profundizar ningún tipo de medidas y que se mantuviera el trabajo a reglamento mientras él intentaba recomponer el ámbito de negociación que se estaba llevando a cabo entre ambas partes.
“Por lo tanto no tenemos medidas previstas”; el 25 de agosto concurrirán a trabajar, pero la semana que viene el Consejo Directivo evaluará.