La Junta Departamental de Paysandú, resolvió por unanimidad (28 votos en 28) remitir al estudio de la Comisión de Tránsito, Transporte y Nomenclátor de la corporación la moción del edil nacionalista Marcelo Tortorella, referente a “Calle Manuela Marote de Raña. Corrección en el nomenclátor de la ciudad”, por cuanto se le denomina de varias maneras, con los apellidos equivocados.
Hace referencia el curul al artículo publicado en su momento en EL TELEGRAFO, señalando que “en una extensa nota del año 2019 en el periódico local, titulada ‘La calle se llama Manuela Marote de Raña’, el investigador Andrés Oberti señalaba: ‘…fue el más que autorizado profesor Augusto Isidoro Schulkin y entre varios nombres que sugirió en abril de 1952 estaba el de ‘Manuela Marote de Raña’ para ser incluido en el nomenclátor de nuestra ciudad’”.
“‘Schulkin planteaba, entre otros argumentos: Benefactora de pobres y desvalidos. Primera presidente de la Sociedad Filantrópica de Señoras, fundada en 1858, benemérita asociación que mantuvo el Hospital Pinilla hasta el año 1911. Gobernadora sin títulos de la villa entre 1846 y 1863. La historia de sus días se confunde a grandes trazos con la ciudad de sus amores. Fue madrina en la solemne colocación de la piedra fundamental de la hoy Basílica Menor San Benito, el 25 de agosto de 1860, tocante ceremonia en que le acompañó el coronel Basilio A. Pinilla’”.
“‘Era por entonces viuda del coronel federal José María Raña y madre del insigne Emilio Raña, muerto en la Defensa de Paysandú de 1864’. Volviendo concretamente al nombre de la calle sanducera, Oberti agregaba: ‘Hoy la particular calle 34S, (que corre en el sentido Oeste – Este en tres tramos interrumpidos), es llamada de varias maneras equivocadas, donde lo único correcto y que no cambia es el nombre de pila. Por apellido encontramos: Marota, Marotte y Marotta; y por apellido de su esposo se alternan Graña o Braña, a gusto del consumidor. Es Marote, porque era hija del hacendado español Pedro Marote y Juana Paula Lator’”. “‘Se casó el 6 de agosto de 1827 con el militar José María Raña, quien falleció a sus 28 años en la Batalla de Cagancha, el 29 de diciembre de 1839’”, agrega.
“Estos argumentos eximen de mayores detalles. Sí se debe decir que, por supuesto, es necesario corregir el nomenclátor de la ciudad, de modo que el homenaje que se quiso rendir a esta benemérita señora, sea no solo justo, sino además, correcto”, precisa Tortorella.
“Por lo expuesto, solicito que la Junta Departamental dé su aprobación para corregir el nomenclátor de la ciudad, de modo que la designación de la calle 34S quede correctamente escrita, siendo lo debido Manuela Marote de Raña”, agrega el representante nacionalista en su planteo, respaldado por unanimidad en la Junta Departamental de Paysandú.