Tras trabajos que insumieron cuatro meses y medio, quedó terminado el desguace de dos pesqueros coreanos abandonados y la posterior limpieza del predio en que habían sido depositados, en espacio del Astillero de la empresa Indre.
Desde la empresa Torres, adjudicataria de los trabajos, se indicó a EL TELEGRAFO por Néstor Cáceres que la tarea de desguace de los buques se hizo dentro del lapso estimado, y que tras esta instancia, la empresa habrá de trasladarse a otros lugares, como es el caso próximo de Fray Bentos, en los que se les ha encomendado un trabajo similar.
Los dos pesqueros se encontraban abandonados desde hace unos cinco años en el astillero local, y constituían un riesgo al haber sido abandonados por la empresa que los había adquirido. Además eran un foco de contaminación y de oportunidad para el vandalismo, como ocurriera cuando se desató tiempo atrás un incendio en su interior, según había señalado en su momento el capitán de puerto de Paysandú, Marcelo Tortorella.
Este destacó que desde la Administración Nacional de Puertos (ANP) se generaron los trámites pertinentes para que se pudiera llevar a cabo este trabajo. Los desguaces de ambas embarcaciones fueron trasladados a una industria siderúrgica capitalina con destino de fundición.Los viejos buques pesqueros coreanos Adala 101 y Sunshine llegaron a Paysandú para su desguace, tras haber estado abandonados en el puerto de Fray Bentos. Cuando los barcos fueron abandonados en Paysandú, quedaron anclados a unos cien metros de la orilla, por lo que durante la crecida del río Uruguay de diciembre de 2015, hubo nerviosismo por si los barcos podían romper las amarras.
Tras el desguace, se procedió a la limpieza del predio en que se encontraban los pesqueros coreanos, quedando todavía en un sector alguna chatarra que será trasladada en camión en los próximos días.
