Pese a los votos favorables de los ediles del Partido Nacional y el edil del Partido Colorado –en tanto la posición contraria se manifestó por los representantes del Frente Amplio– la Junta Departamental de Paysandú no aprobó anoche en sesión extraordinaria la modificación presupuestal propuesta para ampliar a 92 millones de pesos la suma vigente, que era de 77 millones, en base a informes de las comisiones de Asuntos Internos y de Relaciones Públicas y de Presupuesto, debido a que se requería mayoría especial de 19 ediles.
El miembro informante de la mayoría fue el edil Alejandro Mega, quien destacó que de ser actualizado por IPC, el presupuesto de la Junta debería ser de 102 millones de pesos, pero se acordó proponer que sea de 92 millones, con el objetivo de que se contemple la reparación de funcionarios de la Junta en base a los cargos que habían sido suprimidos como consecuencia del acuerdo interpartidario durante la pandemia, mediante reajuste presupuestal, por lo que ahora es el momento de hacerlo, cuando por dos años no se podrán hacer modificaciones presupuestales.
Destacó que de otra forma se estaría bloqueando el desenvolvimiento de la carrera profesional de los funcionarios de la Junta Departamental de Paysandú.
Miembro informante de la oposición mayoritaria fue la edila Verónica Villarreal, quien cuestionó al oficialismo por no haber seguido lo que se tenía que hacer por la Comisión Especial de Reestructura, y consideró que el nacionalismo debe hacerse cargo de las decisiones que adoptó en su momento, a la vez de indicar que el Partido Nacional ha sido contradictorio y está en campaña política permanente dentro de la Junta.
Siguieron intervenciones en pro y en contra de la ampliación presupuestal, con duras expresiones tanto de ediles de la mayoría como de la minoría, con pases de factura recíprocos, en tanto el Frente Amplio manifestó que no se estaba contra los trabajadores, a la vez que reclamó concursos para los cargos. Desde el nacionalismo, a su vez, se hizo hincapié en que el Frente Amplio solo hace discursos de que defiende a los trabajadores, pero con esta postura contraria se ha puesto en la vereda de enfrente de la carrera de los funcionarios de la Junta Departamental.
Natalia Martínez, del Frente Amplio, dijo que el presupuesto que tiene la junta no va a dejar a nadie sin comer, porque hay gente que vive con 20.000 pesos por mes, en tanto Marcelo Tortorella, del Partido Nacional, consideró que algunos ediles frenteamplistas son “verdaderos hipócritas”.
En el mismo sentido y siguiendo una línea argumental similar se expresaron otros ediles de los respectivos bloques, con representantes del Partido Nacional señalando la contradicción de que el Frente Amplio en su momento dijo que no quería que se suprimieran cargos, y que ahora que tienen la oportunidad votan en contra. Desde el Frente Amplio se dijo también que se piden 20 millones de pesos más por año, cuando la Junta Departamental está funcionando bien con lo que se tiene, y hasta se utilizan recursos para sesionar en el interior departamental, sin que se diga que no hay rubros para ello.
David Helguera, del Partido Colorado, dijo que el Frente Amplio no cumple con el compromiso asumido al inicio del mandato, por motivaciones políticas, y que solo ello explica que se esté votando en contra, a la vez de subrayar la falta de compromiso ético de los ediles del Frente Amplio presentes en sala, cuando el plazo para votar vence este miércoles.
Al votarse negativamente la propuesta de ampliación presupuestal, los funcionarios se retiraron de sala en señal de protesta por esta decisión del cuerpo, ante la negativa de la oposición mayoritaria.
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