Sigue la atracción argentina por Uruguay

Casco antiguo de Colonia, el Uruguay idealizado.

Buenos Aires (Por Horacio R. Brum).- Para Jorge Luis Borges siempre fuimos orientales, y en alguna entrevista dijo que sus padres lo habían concebido en una estancia de Paysandú, propiedad de la familia Haedo. Uno de sus cuentos más geniales, Funes el memorioso, transcurre en Fray Bentos; Milonga para los Orientales es un canto a la hermandad histórica y en un poema, así como lo hizo en muchas declaraciones, elogió la tranquilidad de estas tierras. Montevideo era para él “el Buenos Aires que tuvimos, el que en los años se alejó quietamente”. Esa idealización del Uruguay ha estado presente en muchos de sus compatriotas, especialmente en los porteños que luchan a diario con el tráfago de Buenos Aires, y es el incentivo principal para los cientos de miles de turistas que en el verano cruzan el Río de la Plata, pero en los últimos años ha tomado otro carácter, a causa del desquicio económico y político que provocó el kirchnerismo.

El año pasado se publicó en Buenos Aires Laboratorio Uruguay, un libro escrito por dos periodistas vinculadas a la política y al ambiente de las grandes empresas argentinas, que define al país como “El pequeño gigante que sorprende en América Latina”. La obra destaca la capacidad de los dirigentes uruguayos para discutir y llegar a acuerdos civilizadamente, en una sociedad libre de corrupción y en los primeros puestos mundiales de calidad de la democracia. Para cuando Laboratorio Uruguay llegó a las librerías de ambas márgenes del Plata ya eran numerosos los argentinos de alto poder económico que estaban aprovechando las ventajas para establecerse en la orilla oriental, dadas por el gobierno de Lacalle Pou. A las personalidades de la farándula y de la gastronomía se sumaron grandes empresarios como Marcos Galperin, el dueño de las empresas de ventas por Internet Mercado Libre y Mercado Pago, clasificado por las publicaciones financieras como el hombre más rico de Argentina y en la lista mundial de multimillonarios.

Aunque el presidente Milei ha prometido cambiar radicalmente a su país, por la idiosincrasia del mandatario y las peculiaridades de su gestión de gobierno, todavía no está muy claro el rumbo y las posibilidades de éxito de las reformas. Probablemente por eso, Uruguay sigue siendo un tema para los columnistas y las secciones de economía de los diarios. Además, es frecuente que los suplementos inmobiliarios dediquen varias páginas a proyectos que se están desarrollando casi exclusivamente para compradores argentinos, como +Colonia –que se supone será una modernísima ciudad satélite de la capital departamental–, o las residencias de lujo en Carmelo.

Los argumentos que exponen los medios de comunicación para atraer a los inversionistas son siempre los mismos. Para La Nación, en su reportaje titulado: El Cercano Oriente: qué le ven los empresarios argentinos a Uruguay, nuestro país “se destaca por la calidad de vida que ofrece y los números de su economía”. Este medio sostiene que la clase media uruguaya es la más grande de la región y cita a una empresa clasificadora internacional (CS Global Partners), según la cual si se consideran unas variables como seguridad y protección del ciudadano, oportunidad económica, calidad de vida, movilidad global y libertad financiera, tener el pasaporte uruguayo significa estar entre las cuarenta mejores ciudadanías del mundo. Por otra parte, uno de los empresarios entrevistados para el artículo reconoce que Uruguay es un mundo diferente de Argentina cuando se trata de cumplir las reglas para hacer negocios. “Atravesamos problemáticas que no esperábamos”, dijo Sebastián Ríos, de la cadena Almacén de Pizzas, refiriéndose a la apertura de uno de sus locales; “Para la obra, tuvimos dificultades de todo tipo, con constructores y con la municipalidad, por permisos y procedimientos que en la Argentina se hacen de forma diferente. La casa que elegimos para el local, por ejemplo, estaba ‘protegida’, por lo que no podíamos hacer ciertas reformas y eso trajo complicaciones que se vieron reflejadas en tiempo y en inversión”.

Ríos es un empresario mediano, pero hay grandes jugadores que están aumentando su presencia en Uruguay y un factor a tener en cuenta es su cercanía con el presidente Milei.

Eduardo Eurnekian opera los principales aeropuertos nacionales, desde Carrasco hasta Paysandú, a través de su Corporación América. Eurnekian fue empleador de Milei y cuando éste era candidato dijo que “Argentina no necesita otro dictador”; actualmente, no se pierde uno de los eventos en los que el mandatario argentino expone sus ideas económicas radicales. Eduardo Elsztain encabeza el grupo IRSA, especializado en grandes inversiones inmobiliarias, concesionario del Centro de Convenciones de Punta del Este y con proyectos y terrenos en Montevideo; durante los meses de su campaña electoral, Milei se alojó con todo su equipo en el lujoso hotel Libertador, de propiedad de Elsztain.

Aunque en el oficialismo se ha dicho que el entonces candidato pagó por el hospedaje, en los círculos periodísticos se especuló con la posibilidad de que hubiera gozado de una oferta muy especial, otorgada por el dueño del establecimiento. Una trinidad de grandes empresarios cercanos a Milei y con intereses sustanciales en nuestro país puede completarse con Marcos Galperin, un furioso oponente a los gobiernos argentinos anteriores, quien decidió radicarse en Uruguay para huir de la voracidad impositiva kirchnerista. El dueño de Mercado Libre y Mercado Pago tiene llegada tanto al presidente de Argentina como a su colega uruguayo, que en los últimos meses ha sido un invitado de honor a varios seminarios y reuniones realizados en Argentina por los sectores afines a las ideas económicas de Milei.

El “mileísmo” también está entrando en los medios de comunicación uruguayos, porque entre los propietarios del diario El Observador se cuentan Gerardo Werthein, actual embajador argentino en Washington, y Alejandro Fantino, uno de los pocos periodistas de confianza del jefe del Ejecutivo argentino. Además, la semana pasada el portal de noticias La Derecha Diario, creado por el exjefe de comunicaciones digitales de la campaña presidencial de Javier Milei fue adquirido en un 50% por Javier Negre, un periodista de la ultraderecha española, y hay planes para que el grupo propietario se expanda a Brasil, Chile y Uruguay. Aparte de su respaldo incondicional a Milei, La Derecha Diario se caracteriza por un fuerte tono anti-migrantes y favorable a las posiciones sociales más conservadoras.

El inquilino actual de la Casa Rosada ha tenido con frecuencia expresiones de intervencionismo en los asuntos internos de otros países, más allá de los insultos propinados a algunos mandatarios de la región. En junio, el gobierno argentino emitió un comunicado de apoyo a la intentona golpista en Bolivia y cuando concluyeron las votaciones en Venezuela, Milei instó a las Fuerzas Armadas de ese país a derrocar a Nicolás Maduro. Por otra parte, él se ve como un adalid de una lucha mundial contra “el comunismo” y “el socialismo empobrecedor”, categorías en las que caen todos los políticos y gobernantes que no comulgan con sus ideas.

En ese contexto, cabe preguntarse si el presidente de Argentina escapará a la tentación de influir en el resultado de las próximas elecciones uruguayas mediante sus palabras y con el músculo económico de los empresarios que sintonizan con él, si se presenta la posibilidad de un regreso al poder del Frente Amplio.

El paraíso inmobiliario argentino está en Uruguay.