Cierran espacios públicos y bares en Quebracho que se acerca a 180 casos

Silbia Visoso, alcaldesa de Quebracho.

Sigue siendo muy complicada la situación en el departamento de Paysandú, tras informarse ayer de 205 nuevos casos, tres fallecimientos y el cierre de todo lo no esencial en la ciudad de Quebracho, que se acerca a los 180 casos activos.

Mientras aumenta la demanda de la población por vacunarse, debido a los elevados números de casos, fallecimientos y sanduceros en CTI, la pandemia de COVID-19 sigue en línea ascendente. Con los 205 casos de la víspera, ahora hay 1.456 contagios activos -88 más que el miércoles-, hay 5.286 personas que lograron recuperarse de la enfermedad, los fallecidos siguen en ascenso y ahora suman 86, con los tres fallecimientos de la víspera, una mujer de 100 años, y dos hombres de 57 y 77 años. Desde el comienzo de la pandemia, la misma ha afectado a 6.828 sanduceros, entre quienes ya superaron la COVID-19 y quienes cursan la enfermedad.

RRAN BARES Y ESPACIOS PÚBLICOS EN QUEBRACHO

“Estamos en una situación muy difícil, no solamente por la cantidad de casos positivos, que para nuestra ciudad (de 3.000 habitantes) es una gran cantidad, sino también porque eso repercute directamente en la economía de quienes viven aquí. Se cierran fuentes de trabajo y aquellos que viven de lo que obtienen diariamente se encuentran ante una reducción de ingresos muy fuerte”, dijo Silbia Visoso, alcaldesa de Quebracho a EL TELEGRAFO.

La comunicación se dio apenas conocida la decisión del Comité Departamental de Emergencias, que establecía que ante la situación grave por el aumento de casos de COVID-19, se determinó que “a partir de las 0 horas del día viernes 28 de mayo de 2021” se aplican una serie de medidas por los siguientes 14 días. Se decidió el “cierre de bares y cantinas de clubes deportivos; cierre de paseos públicos (plazas); plan de desinfectación de los espacios públicos. Asimismo, se continuará intensificando los controles de movilidad ciudadana y de aforos establecidos”.

“Hay una parte de la población que no ha comprendido aun el peligro de este virus, y eso claramente nos preocupa muchísimo”, dijo Visoso, quien agregó que “hay unas 1.000 personas que fueron vacunadas en Quebracho, pero hay un número importante que se movilizó para vacunarse en Paysandú”.

Por su parte, el director departamental de Salud, Carlos Leoni, indicó que “la mayor cantidad de casos se concentran en un asentamiento, donde las condiciones sanitarias no son las deseadas, no hay posibilidades de una adecuada higiene, y además hemos notado que los pobladores tampoco siguen las recomendaciones básicas para poder contener la COVID-19”.

CASOS EN LA INTENDENCIA

En la víspera se confirmó un caso positivo en el área de Comunicación de la Intendencia de Paysandú, por lo que el personal que estaba trabajando de manera presencial –como lo hacía el positivo– pasó a cuarentena. No se ha podido determinar aun el hilo epidemiológico, dado la movilidad que impone el trabajo que se realiza en esa sección. Ayer mismo se tomó la decisión de sanitizar las oficinas del área de Prensa, de modo de avanzar, pues quienes están en cuarentena serán hisopados en las próximas horas, de modo que si resultan negativos, podrán reincorporarse al trabajo presencial.
En alguna otra dependencia hay funcionarios con síntomas que los convierten en sospechosos y si bien se han tomado las medidas necesarias para evitar la propagación, por el momento no hay más contagios positivos.

MÁS DETALLES

De los 205 casos de ayer, 21 corresponden a Quebracho, 2 a Chapicuy y 1 a Tambores y a Casa Blanca. Esos 21 nuevos casos en Quebracho ponen a la ciudad muy cerca de los 180 casos activos.

En lo que tiene que ver con el impacto de la pandemia por grupo etario, se mantiene la tendencia de que la mayoría de nuevos contagios tiene hasta 30 años. En la franja de menores de 14 años, de los 205 casos nuevos, representa el 20%. Entre 15 y 30 años, el 32%, por lo que sumando ambos, 52%. Entre 31 y 60 años el porcentaje es del 38%, en tanto mayores de 60 años, un 5%.

Las camas de CTI se reducen peligrosamente en la ciudad, desde que hay 20 ocupadas, 15 en Comepa y 5 en el Hospital Escuela del Litoral.