Rurales

“Hay mucha capacidad en los trabajadores rurales”, pero muchos “no tienen oportunidades”

“Creo que hay mucha capacidad en los trabajadores rurales, lo que muchos de ellos no tienen son oportunidades de capacitarse”, consideró el técnico agropecuario Juan Eduardo Maggiolo Tejera, recordando cómo “son reconocidos en otras partes” del mundo, como el caso de los esquiladores que todos los años van a trabajar al exterior, desplazando a otros, precisamente, por sus condiciones y aptitudes.
Maggiolo trabajó durante 26 años en el Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL), donde acumuló una vasta experiencia en el rubro ovino y hoy está a cargo de una empresa de servicios agropecuarios que se dedica a la esquila, acondicionamiento de lanas, alambrados, reparaciones, asesoramiento técnico, entre otras actividades.
Su labor lo lleva a recorrer establecimientos del litoral del país, estableciendo un contacto diario con la realidad que vive el trabajador de campo. “Yo destaco mucho al obrero rural por las condiciones que a veces tiene que trabajar, no en todos los casos, pero a veces no muy adecuadas, con una serie de carencias bastante importantes”, citó. En ese sentido, observó que “se van sucediendo incluso los gobiernos y no solucionan algunas cosas básicas para ese personal”.
“Creo que hay mucha capacidad en los obreros, en los trabajadores rurales; lo que muchos de ellos no tienen son oportunidades de capacitarse, un poco por razones económicas”, aseguró el entrevistado. En ese sentido, recordó que “el peón rural sale fundamentalmente de los pueblitos de campaña; algunos terminan la escuela y después tienen que salir a trabajar por las necesidades que tiene la familia”. La mayoría, excepto unos pocos, “no tienen la posibilidad” de aprender un oficio en UTU o hacer el liceo rural para luego capacitarse en la ciudad.
A propósito de este tema, recordó cierta ocasión en que siendo técnico del SUL, “en San Valentín, en Salto, hubo una reunión, con productores rurales, asistentes sociales, técnicos, para la formación de un liceo rural, y yo en cierta medida me negué a eso, pues consideré que lo importante afuera era UTU”, porque “un muchacho de 6º pasa al liceo rural, hace los 3 o 4 años y después no puede emigrar a la ciudad a capacitarse. Entonces, tiene una instruccion básica, pero no sabe ni trabajar en el campo, ni sabe absolutamente nada, no tiene más posibilidades. Entonces, tiene que salir a trabajar en el campo sin saber absolutamente nada”. En cambio, en UTU tiene la opción de aprender “electricidad, carpintería, alambrados, guasquería, reparación de molinos, oficios que prácticamente ya no existen, se van terminando”, indicó.
Finalmente, se terminó haciendo el liceo rural en ese sitio. Hoy “veo como muchos muchachos que tengo en mi empresa, que hicieron el liceo rural, vienen a trabajar sin saber nada”, acotó.
Por otra parte, “no hay casi productores que enseñen, son muy pocos los que transmiten conocimientos a sus empleados”, observó.
En su empresa, incluso hay jóvenes de la ciudad que una vez que finalizaron sus estudios, “como no hay oportunidades laborales que abunden, han venido a pedir trabajo, uno les ha enseñado y son buenos funcionarios”, aseguró.
A la vez, describió que “hay muchachos que por falta de oportunidades no se han podido educar y tienen que salir a brazo partido a trabajar sin conocimiento de nada; saben andar a caballo, o saben recorrer y ver si hay un animal abichado”, pero no más que eso.
También se dan situaciones “que uno ha visto en el correr de los años, de personal con muchas condiciones y que a veces no han sido justamente valorados por quienes fueron sus patrones y terminan emigrando a la ciudad, porque ven que hay otras posibilidades, otras comodidades, otros horarios y días de trabajo”, en definitiva, otras condiciones de trabajo.

LA CAMPAÑA PROFUNDA ES POSTERGADA

Luego de décadas de contacto con quienes trabajan en el medio rural, Maggiolo asegura que “no solo el trabajador rural, sino los ciudadanos del interior profundo”, han sido y siguien siendo “postergados”.
“Hay que salir a la campaña y ver las necesidades que tienen de caminería, de asistencia médica, de frecuencia de ómnibus para el traslado, de carencia de materiales o de mercaderías para el consumo.
Ellos están acostumbrados a eso, son gente que no protestan, pero hay carencias de todo tipo. No se acuerdan de esa gente; nadie se acuerda de esa gente”, reclamó. “Se suceden los gobiernos y la campaña profunda es postergada”, aseveró, citando a modo de ejemplo que “hay pasos que cuando crecen los arroyos, no hay cómo salir; si hay un enfermo grave se muere y pasa hoy en el siglo XXI”. “Creo que habemos ciudadanos de cuarta; los que estamos muy afuera somos ciudadanos de cuarta”, aseguró, refiriendo que “yo me identifico mucho porque paso trabajando en la campaña y veo mucha muchachada, algunos inteligentes, que no tienen oportunidades”.

“FALTAN OPORTUNIDADES”

“Hay buena parte de la sociedad a la que le faltan oportunidades, para que el muchacho vaya creciendo y vea que hay posibilidades laborales ciertas, que eso lo anime a seguirse capacitando y a seguir preparándose para enfrentar la vida y el día de mañana formar una familia formal, como debería ser”, consideró.

“ENSEÑANZA A TODOS LOS NIVELES”

La solución para atender la situación de los jóvenes que hoy no acceden a la capacitación necesaria, “creo que es un combo entre las autoridades que tienen que tratar de brindar enseñanza a todos los niveles y los que están al frente de los establecimientos, que deberían preocuparse tal vez más por capacitar a su personal”, opinó Maggiolo.
“En lo personal lo hago porque me gusta, trabajé 26 años en el SUL como docente de lanas y me gusta la docencia, y lo sigo haciendo no solo con mis hijos, sino con todos los muchachos jóvenes que veo que no tienen oportunidad y que vale la pena invertir tiempo en ellos”, acotó.
En departamentos como Soriano y Colonia, donde la agricultura es la actividad principal, en época zafral “igual pagan U$S 400 – U$S 500 por día” por el manejo de la cosechadora, porque “si no se la saca otro y necesitan levantar la cosecha”, refirió Maggiolo al aludir a la importancia de la mano de obra calificada. “Pero uno ha visto productores que se han encargado de capacitar a esa gente, o mandarlas a Argentina, para el manejo de todas esas máquinas que requieren un conocimiento de informática importante”, citó.

“RECONOCIDOS”

“A mi criterio, creo que el trabajador rural tiene muchas condiciones” y prueba de ello son “los esquiladores que van mayoritariamente a España, entre otros países, porque han desplazado a esquiladores de otros orígenes, polacos, peruanos, bolivianos, por las condiciones de humildad, porque la mayoría es gente humilde, tranquila, y por ser buenos operarios desde el punto de vista de la técnica que desarrollan”, sostuvo. Es decir que “son reconocidos en otras partes”, concluyó.

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Internacionales

EE.UU. cree que adenovirus “pudo causar” casos de hepatitis infantil

Washington, 29 (EFE)
Los estadounidenses Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés) creen que un adenovirus “pudo causar” los nueve casos de hepatitis infantil grave registrados en Alabama, el estado desde donde se han levantado las alarmas sobre esta enfermedad.

En un estudio dado a conocer este viernes, los CDC indicaron que, pese a que es posible que un adenovirus sea el motivo de la hepatitis infantil grave en Alabama, dado que los pacientes dieron positivo en las pruebas para detectar este virus, no descartan otros factores que están investigando.
Lo que sí que han determinado es que la enfermedad no fue ocasionada por el virus de la hepatitis A, B o C, ni por una infección de SARS-Cov-2 que origina la COVID-19.
También han descartado que se trate de una hepatitis autoinmune o de la enfermedad de Wilson (un trastorno hereditario que provoca una acumulación excesiva de cobre en los órganos).

El tipo de adenovirus que se encontró en la mayor parte de los pacientes es el 41, que se contagia principalmente por la vía oral-fecal, afecta sobre todo al intestino y es una causa común de gastroenteritis aguda, con diarrea, fiebre y síntomas respiratorios.
Los CDC han llevado a cabo este estudio sobre la información que han recibido de 9 casos de hepatitis infantil grave en menores de entre 1 y 6 años –7 de ellos niñas– desde el otoño pasado en Alabama, de los cuales algunos mostraron una insuficiencia hepática aguda.

Todos ellos se han recuperado, pese a que dos han tenido que ser sometidos a un trasplante de hígado.
El informe de los CDC se centra en Alabama, dado que es donde se levantaron las alarmas en EE.UU. sobre la hepatitis infantil grave que ha aparecido también en otros países del mundo.
La semana pasada, los CDC emitieron una alerta aconsejando a los médicos de EE.UU. que se fijen en los casos de hepatitis que sean poco habituales.
Actualmente, más de una decena de casos se están investigando en ocho estados: Delaware, Luisiana, Illinois, Carolina del Norte, Nueva York, Georgia, Tennessee y Wisconsin (en este último se están estudiando la muerte de un menor).

Hasta el momento, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se han confirmado al menos 169 casos de hepatitis infantil aguda de origen desconocido en 11 países, uno de ellos mortal. → Leer más

Opinión

Cambiamos

Todavía el mundo no sale a echar campanas al vuelo en cuanto al fin de la pandemia, pero en los hechos todo parece indicar que la COVID-19, como pandemia global, está tocando sus últimos acordes (si tiene a mano toque madera).

El mundo parece retomar un ritmo de vida bastante similar a como transcurría previo a la emergencia sanitaria, especialmente si lo comparamos con las épocas de confinamiento o aquella denominada “nueva normalidad” cuando pudimos empezar a desplazarnos y andar por ahí pero con la obligatoriedad de usar tapabocas y poniéndonos alcohol en gel cada vez que se pudiera.
Pero, ¿es que de verdad regresamos a aquella “antigua normalidad”, volvimos a habitar el mismo mundo en el que vivimos antes de la COVID-19 y hacer las mismas cosas y comportarnos de la misma manera? Ahí ya no se puede ser tan categórico en la afirmación. Si se pone a analizarlo fríamente se dará cuenta que no. Capaz usted sí, individualmente mantenga algunos hábitos que tenía antes, se sigue comiendo un asado el fin de semana o mira el fútbol por la tele, yendo a misa o a la feria. Claro, hay cosas que hacíamos antes y que volvimos a hacer. Pero también hay hábitos que incorporamos durante la crisis sanitaria y que llegaron para quedarse. Y esto no es inocuo, porque si consideramos que nuestras acciones como sociedad se modificaron, es dable pensar que estos cambios afectan el mercado de trabajo, porque hay bienes o servicios que dejamos de demandar o que reemplazamos por otros. Un ejemplo: se masificaron los pagos online de facturas y las transferencias de dinero por medios digitales. Esto puede hacer suponer que se usen menos servicios de atención personal, como los de las redes de cobranzas, ergo, estas requieren menos empleados para su funcionamiento. No es más que una hipótesis basada en una impresión.

En líneas generales muchos de los cambios que podemos apreciar vienen de la mano de una mayor digitalización de la economía. Habíamos visto anteriormente la aparición de aplicaciones para solicitar comida a domicilio, al principio tímidamente, compitiendo con el tradicional pedido telefónico, pero en este último tiempo pasaron a tener una presencia más firme. Esto cambió la relación de quienes prestan servicio de reparto, que pasaron de ser dependientes de una casa de comidas o un restaurante, a vincularse con una aplicación. Tal vez en alguna medida haya cambiado además la frecuencia con la que las personas y las familias salgan a comer fuera de casa.

Ha sido muy comentada recientemente la baja que ha sufrido una popular plataforma de exhibición de películas y series, que es cierto, ya existía antes de la pandemia, pero que con el confinamiento tuvo un fuerte impulso, y no solo ella, sino que aparecieron como hongos y hoy la oferta se ha multiplicado, tal vez en detrimento del acceso a los contenidos de quien contrata una sola de estas plataformas, como ocurría al principio. Pero es indiscutible que cambió la forma en la que la gran mayoría consume televisión. Por supuesto, quedan personas que siguen viendo películas a través de los canales de aire o que van al cine, tal vez esto último se entienda más por la lógica de los estrenos y por la experiencia de salir y de ver la película en pantalla grande, pero no hay dudas de que lo dominante es la plataforma digital.

¿Quiere otro ejemplo? Los remates. Ir a una casa de remates es para un nicho de público que uno se imagina de ya determinada edad, pero con la necesidad de encontrar alternativas al no poder convocar aglomeraciones de público en las subastas, las casas de remate también saltaron a la pantalla y con tal éxito que se incorporó público de otras franjas que antes no concurría a los remates y que ahora puede intervenir desde la comodidad de su escritorio, desde el living o donde sea que esté, a través del celular. Con ello se sumaron también compradores a distancia. En fin, el punto es que la pandemia cambió muchas cosas, aunque tal vez no nos hayamos dado cuenta. Lo que en todo caso corresponde evaluar es si estos cambios son positivos o negativos, aunque tal vez nos encontremos con la consecuente afirmación: depende de para quién. Siempre que las cosas cambian hay quienes se favorecen y se perjudican.

Ayer el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social presentó un informe respecto a la informalidad. En nuestro país la informalidad cayó entre 3 y 4 puntos después de la pandemia y después de la recuperación del mercado de trabajo. Este fenómeno se analizó debido a que fue un comportamiento diferente al del resto de América Latina, donde si bien se produjo un incremento en el empleo y una baja del desempleo, esto ocurrió con un crecimiento fuerte de la informalidad.

Hay muchos factores que se explican en el informe –muy extenso como para analizarlo en esta página–, pero menciona entre ellos algunos cambios que se produjeron en el mercado laboral en este tiempo de emergencia sanitaria, algunos que se espera puedan revertirse, otros que seguramente no. “Hoy en día hay menos participación de menores de 25 años y mayores de 65. Cambió la estructura etaria. Hay menor participación del sector privado, especialmente perdimos muchos cuentapropistas sin local, perdimos muchas microempresas menores de 5 personas y esto incluye muchas unipersonales, y perdieron participación los sectores de servicio doméstico, construcción, comercio y servicios”, expuso el investigador senior del Instituto de Economía de la Universidad de la República, Matías Brum, responsable del estudio, junto a la Unidad de Estadística del MTSS y con el apoyo del Programa de las Naciones Unidad Para el Desarrollo (PNUD). → Leer más

Internacionales

Empresarios nicaragüenses, culpables de traición a la patria

Managua, 29 (EFE)
Los empresarios nicaragüenses Michael Healy y Álvaro Vargas, arrestados cuando presidían el Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep), fueron declarados este viernes culpables de delitos considerados como traición a la patria, informó el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh).

El juez Ángel Jeancarlos Fernández González, titular del Juzgado Cuarto de Distrito Penal de Juicio de Managua, encontró culpable a Healy por cometer menoscabo a la integridad nacional, y a Vargas por conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional, tras dos días de “farsa judicial”, indicó el Cenidh en una declaración.
La Fiscalía pidió que Healy, que era presidente del Cosep, sea castigado con 13 años de prisión, y a Vargas, que era el vicepresidente de esa patronal, a nueve años.
“Desde Cenidh rechazamos y condenamos esta pantomima judicial y exigimos al régimen Ortega Murillo (pareja presidencial) los libere de inmediato”, señaló ese organismo.

Los dirigentes empresariales fueron detenidos por la Policía Nacional a mediados de octubre pasado para ser investigados por los presuntos delitos de lavado de dinero, bienes y activos en perjuicio del Estado y la sociedad nicaragüense, y realizar actos que menoscaban la independencia, la soberanía y la autodeterminación, entre otros.
La detención de Healy y Vargas, críticos del Gobierno del presidente Daniel Ortega, se dio un día después de que el Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) exigiera la liberación “inmediata” de los aspirantes a candidatos presidenciales y los “presos políticos”.

La OEA hizo esa petición cuando faltaban 17 días para los comicios del 7 de noviembre en los que el mandatario Daniel Ortega fue reelegido con sus principales contrincantes en prisión.
El juicio a los dirigentes del Cosep, que es la principal cúpula patronal de Nicaragua, forman parte de una cuarentena de audiencias que se han abierto en contra de líderes opositores, estudiantiles, campesinos, periodistas y profesionales independientes. Esos juicios a los opositores se han celebrado a puerta cerrada en El Chipote, una celda ubicada en la Dirección de Auxilio Judicial de la Policía Nacional.

Según el Ministerio Público, que había anunciado que los juicios serían orales y públicos, los opositores han sido juzgados por haber violentado la Constitución Política, la Ley de defensa de los derechos del pueblo a la independencia, la soberanía y autodeterminación para la paz, la Ley de seguridad soberana y el Código Penal de Nicaragua. → Leer más