Diputado Moreno propone castigar con trabajo comunitario la “violencia digital”

Juan Carlos Moreno, diputado por Paysandú.

El diputado Juan Carlos Moreno propone en el Parlamento que se apruebe una ley por la cual se castigue con entre uno y tres meses de trabajo comunitario a quien “a través de cualquier medio digital, incurre en ridiculizaciones, amenazas, chantajes, discriminaciones, difamaciones o injurias hacia otra persona física o jurídica, instituciones públicas o privadas”.
De acuerdo al legislador por Paysandú, el uso masivo de diferentes plataformas digitales ha modificado muchos aspectos de la vida cotidiana, siendo utilizadas para educar, acceder a información, interactuar y para fines recreativos. Incluso se usa para realizar comercio digital.
“Las formas de socializar se vieron modificadas casi por completo como consecuencia de la propagación digital en estos últimos tiempos. La pandemia incentivó y fomentó el uso de la herramienta. Conocer gente, charlar con amigos, pelearse y amigarse o distanciarse son situaciones que pueden suscitarse en las redes”, opinó Moreno.
Todo eso lleva a que se hace necesario reglamentar lo que Moreno define como “violencia digital”. Sostiene Moreno que “la misma surge porque existe una violencia que la precede y con la que se retroalimenta, que es la violencia diaria que se vive en las calles, colegios, trabajos, plazas, boliches, canchas de fútbol. Es entendible y lógico que la violencia tenga su versión digital. Así como la mayoría de las prácticas comenzaron a digitalizarse, las violencias hicieron lo mismo”.
“Somos conscientes que lamentablemente la violencia existe en todos los aspectos de nuestra sociedad. Debido a la vertiginosa evolución tecnológica a la que estamos sujetos, esta violencia se traslada a las plataformas digitales afectando de esta forma la integridad de las personas e instituciones”, subraya Juan Carlos Moreno.
Considerando todo eso es que plantea se incorpore al Capítulo de Faltas del Código Penal una ley que puede “contribuir con el combate de esta problemática actual que lamentablemente repercute, de forma impredecible, en la salud mental y social de los consumidores y usuarios digitales”.