“En una dieta equilibrada, la carne roja tiene que estar presente”, aseguró la licenciada en Nutrición Stella Arrospide, al ser consultada acerca del aporte nutricional de este producto.
En tal sentido, la profesional aclaró que “todos los alimentos que consumimos siempre deben ser alimentos seguros y que nos proporcionen diferentes nutrientes, o sea, que contengan un valor nutritivo importante para que nosotros podamos mantener una alimentación variada y también equilibrada”.
“Uno de los alimentos que tenemos que destacar es la carne, ya sea roja o blanca como pollo o pescado. Es muy importante porque estas colaboran con una buena alimentación”, puntualizó.
A la hora de consumirlas, “debemos tener en cuenta las porciones, la forma de preparación y también la frecuencia con la que consumimos carnes. Puede ser 2, 3 o 4 veces por semana, y si la comemos a mediodía, la evitamos en la noche. También podemos alternar carne vacuna, con pollo y pescado”, aconsejó.
Desde el punto de vista nutritivo, “las carnes son fundamentales porque nos aportan un nutriente, como lo es la proteína, principalmente las rojas que son de alto valor biológico. Es decir que esa calidad nutricional que tienen las proteínas de la carne, se deben a que son muy digeribles y, además contienen aminoácidos esenciales, por lo que con su consumo estamos cubriendo las necesidades de nuestro cuerpo”, destacó la profesional.
Como “las carnes rojas contienen hidratos de carbono en muy pequeña cantidad”, es aconsejable en nuestra dieta “combinarlas con otros alimentos, como pueden ser verduras o pastas”, apuntó.
Entre los beneficios de este producto, Arrospide destacó el contenido en hierro “que en la forma que se encuentra en las carnes nos permite que se absorba entre un 20% o un 30%, que es un porcentaje importante y todos sabemos que es fundamental para el transporte de oxígeno a nuestra sangre”.
Además, “entre otros minerales, se destaca el contenido de las vitaminas B12, que son de las más importantes para metabolizar las proteínas y nos ayudan a formar los glóbulos rojos. También colaboran en el mantenimiento del sistema nervioso central”, significó la entrevistada.
A la vez, “la carne tiene cantidad importante de zinc, lo que ayuda al fortalecimiento de las uñas, a la cicatrización de la piel y también para formar hemoglobina”, describió.
“Por lo tanto, en una dieta equilibrada, la carne roja tiene que estar presente, es un alimento saludable y más aún si lo consumimos en cantidades adecuadas, junto a un estilo de vida activo. Buena alimentación acompañada de la práctica de ejercicio físico”, aconsejó Arrospide.