En la gestión del pasto, usar el Índice sobre el Plato de Comida “es algo sensacional”, dijo Juan Bazzano

Con muy buena presencia de productores se realizó la jornada del proyecto Gestión del Pasto en Merinos.

La utilización del Índice sobre Plato de Comida (IsPC), herramienta que permite realizar una presupuestación forrajera de forma simple y robusta en los sistemas ganaderos, “para mí ha sido sensacional, porque es algo sumamente sencillo”, destacó a EL TELEGRAFO el ingeniero agrónomo Juan Bazzano De León, una vez finalizada la jornada de Gestión del Plato, organizada en el establecimiento Cerro del Bombero de la zona de Merinos, por parte del Instituto Plan Agropecuario.
El IsPC es un indicador que relaciona el pasto que hay en el predio, con el pasto que requieren los animales para cumplir con los objetivos de producción estacionales. A partir de un indicador simple (IsPC) pero con mucho contenido técnico, se logró diagnosticar si el pasto es suficiente, sobra o falta lo que permite la reflexión entre los ganaderos.

Recordó su primera experiencia, que fue al momento de medir el pasto con una regla, acotando que “esto no tiene ningún misterio”.
Allí se observó “la cantidad de verde y pasto seco que hay, efectuándose una observación en cada potrero, determinándose con eso la cantidad de comida disponible, y de acuerdo a la cantidad de animales que habrá en cada potrero, sabemos a que atenerse. Con esta comida y la condición corporal de los animales, tengo un índice que me indica si estoy bien o mal”.

Bazzano lo relacionó con un semáforo: Verde, amarillo, rojo y se le agrega el marrón, que es cuando hay pasto de más”. Dijo que se había destinado un potrero en la primera medición para la alimentación de las vacas, “y a simple vista con el conocimiento que uno tiene de campo decía ‘acá van a poder parir las vacas’, pero cuando fuimos a medir, inmediatamente vimos que las vacas en ese potrero no podían parir porque sería contraproducente, ya que no había nada para darle de comer los animales”.

Inmediatamente el productor tomó medidas que “me permitieron obtener buenos resultados en la eficiencia reproductiva”, destacando que “son medidas que te permiten adelantar una estación, de las medidas que se deben adoptar”.

Sobre el Índice del Plato de Comida, el óptimo es 0,86, y allí el animal podrá cumplir con sus requerimientos productivos. “En nuestro caso, en verano estábamos en 0,56”, enfatiza Bazzano, “por lo que si no hubiéramos tomado medidas, seguramente tendríamos que haber cuereado algún animal porque las condiciones estaban un 30% por debajo de las óptimas, o aún más”, dijo. Los obbjetivos trazados ante la crítica situación forrajera del establecimiento en el verano, fueron “sostener el esqueleto productivo del sistema, sabiendo que en sequías siempre se pierde; lograr niveles de preñez aceptables, según la trayectoria del predio; apostar a un mayor valor agregado del producto, capitalizando favorables relaciones de intercambio; y capitalizar las fortalezas del rubro ovino en estas condiciones de producción”.

Entre las medidas adoptadas por Bazzano, están el “sacar de Cerro del Bombero, categorías de recría de machos de vacunos y ovinos (750 UG); adelantar el destete de los terneros (20/11 fue el primer lote); suplementar vacas de peor Condición Corporal (CC) por un período de 35 a 40 días; realizar tratamiento hormonal tendiente a promover reinicio de actividad sexual en vacas posdestete; engordar todas las vacas CUT, mediante el uso de suplementos concentrados; y concentrar los ovinos en potreros específicos del predio”.

Resultados

En cuanto a algunos resultados monitoreados al inicio del Otoño 2022, el productor destacó la “mejora en la cantidad de pasto disponible (4,2 centímetros) en el sistema; mejora en la CC promedio del rodeo de cría: 4; IsPC = 0,86; recrías vacunas lograron moderadas ganancias de peso durante el verano; resultado de preñez: 82%.; embarque de 178 vacas a frigorífico (entre 20/1 y 5/4); y ovinos en excelente estado corporal y sanitario.

El proyecto

El objetivo del proyecto Gestión del Plato “es entender cómo los productores ganaderos gestionan el pasto, y cómo se relaciona esto con los resultados productivos, económicos y ambientales, construyendo conocimiento de los datos generados, y compartiendo ese conocimiento”, manifestó por su parte el ingeniero agrónomo Rómulo Cesar.

El coordinador de la regional Litoral Norte del Instituto Plan Agropecuario fue el responsable de organizar la jornada realizada en la tarde anterior, a la que asistieron no solamente productores de la región, sino también de otros departamentos, invitados por el anfitrión.
Allí se presentó la caracterización del sistema productivo de Cerro del Bombero, que en vacunos cuenta con ejemplares de la raza Hereford, con un plantel MH con compra de toros. Se producen toros para el rodeo general.

En el establecimiento ubicado a 10 kilómetros de Merinos, la fecha de entore es el 15 noviembre al 15 febrero, con inseminación de vaquillonas desde 2008, en tanto que desde 2020 se realiza Inseminación Artificial a Tiempo Fijo (IATF). Además, se realiza desde hace 5 años DAO a las vaquillonas en octubre.
Sobre el destete, se realiza en forma estructural a partir de mediados de diciembre. En general se hacen 3 tandas (la última a inicios de febrero), siendo el criterio de destete, terneros con 100 kilos de peso. El destete consta de 2 etapas: corral (10 días); y autoconsumo (60-70 días), siendo el peso objetivo 140 kilos.
Sobre el manejo de la recría, en el primer invierno, se realizó suplementación de terneros y terneras (ración balanceada), en tanto que en segundo invierno, suplementación de vaquillonas y novillos 1 a 2 años (afrechillo de trigo). Forma de suministro: autoconsumo.
En el establecimiento la edad de faena es de 55% entre 32 a 36 meses, y 45% entre 36 y 38 meses.

Ovinos

Otro aspecto importante de la producción en Cerro del Bombero es el trabajo que se realiza con el Merino Australiano. Se hace tatuaje MO desde el año 2012, siendo la orientación, ciclo completo, lana superfina.
La fecha de encarnerada es entre el 15 marzo y el 30 de abril. Ecografía y separación por carga fetal y etapa de preñez. La esquila preparto en julio y las corderas en setiembre.

Se destacó además, que se brinda suplementacion a las melliceras. La cosecha de lana: fardos, grifa verde- coreo del lote; el diámetro promedio es de 17,4 micras. Peso Vellón: 4,5 kilos (venta de capones 2° vellón). Comercialización: Venta por datos objetivos. Certificaciones: RWS y Natural.

Lluvias

Un dato al que Bazzano hizo hincapié en varias oportunidades fue la lluvia. Es que la zona en donde se encuentra Cerro del Bombero fue de las más afectadas por el dédicit hídrico en la pasada primavera y verano.
De acuerdo a los registros pluviométricos del productor, en setiembre no llovió, en octubre fueron 23, en noviembre 70 y en diciembre cero. Solo 93 milímetros en cuatro meses, lo que generaba muchas complicaciones en el sistema productivo.
Las lluvias recién llegaron a partir del 15 de enero, totalizando ese mes 210 milímetros; en febrero fueron 155 y en marzo 143 milímetros.