
Rayos UV, medidas de prevención y el alto porcentaje de cáncer de piel en el Uruguay
“La piel tiene memoria, y el sol que tomemos, sobre todo en los primeros 18 años de vida va a tener impacto en la piel”, cuando seamos adultos mayores; una de las consecuencias de riesgo de los Rayos UV es el cáncer de piel, que tiene una alta incidencia en nuestro país, destacó a EL TELEGRAFO la doctora Alejandra Larre Borges, integrante de la Sociedad de Dermatología del Uruguay, a propósito de la alta incidencia de los rayos UV por exposición al sol en esta época del año.
Destacó la profesional que “no se trata solo del calor, sino que estamos ante un incremento de la radiación ultravioleta, agravado por el hecho de que por la baja nubosidad los rayos solares impactan directamente”.
Acotó la Dra. Larre Borges que la primera medida lógica es “el tratar de estar a la sombra, sobre todo en el horario que va de las 10 a las 16, y si se puede estar bajo techo, mejor aún, y quien no tiene la posibilidad lo mejor es por supuesto cuidar la hidratación, utilizar sombrero, si es posible de ala ancha, que cubra las orejas y la nuca, o algún otro sombrero, aunque no tenga esta amplitud”.
Asimismo, recomendó “utilizar ropa, en lo posible de colores oscuros, y no necesariamente negro, porque puede ser rojo, violeta, verde, porque esos son los que más detienen los rayos ultravioleta, a lo que naturalmente debe agregarse el uso de lentes para cuidar los ojos, porque hay que tener en cuenta que la primera causa de ceguera en el mundo son las cataratas, y eso es provocado muchas veces por el daño por la radiación ultravioleta. Además es fundamental el uso de protector solar, que es un accesorio más, pero no sustituye a todo el resto de lo que hemos mencionado”.
Observó que “el protector solar que se use debe tener por lo menos un filtro de 50 para UVB, y un filtro muy alto para rayos UVA y además debe ser resistente al agua, porque implica tanto el agua de playa como de piscina, río, arroyo, lo que fuera, como de la propia transpiración”.
“Por lo tanto se requiere un protector resistente al agua, que es aquel cuyo máximo efecto dura hasta 40 minutos después de aplicarlo, en tanto uno muy resistente al agua es aquel que dura hasta 80 minutos después de aplicado.
El sol que tomamos mientras crecemos
En lo que respecta al impacto de los UV sobre la piel, destacó la entrevistada que “el peor sol es el que tomamos hasta los 18 años, como todo lo que hagamos en un individuo en construcción rápida –todos estamos en construcción permanente, pero no tan rápida– y todo lo que hagamos va a repercutir a la larga cuando seamos mayores. Por lo tanto va a quedar un daño genético por los rayos ultravioleta en las células de la piel, lo cual en muchos casos se repara, pero si existe daño intenso se perpetúa a lo largo de los años, va quedando ahí latente, hasta que en un momento se manifiesta con cáncer o un precáncer de piel”. → Leer más